Gladys Monterroso
licgla@yahoo.es

“La falta de un sentido de la historia es la condena del mundo moderno.”
Robert Penn Warren

El próximo inminente relevo del funcionario, encargado de la persecución legal, plantea varias interrogantes a la sociedad en general, una, de las más importantes estriba en que la mayoría de los procesos se encuentran en fase inicial o intermedia, ya que a debate todavía no está por llegar casi ninguno de los casos de mayor impacto.

El nuevo/a Fiscal General se encontrará con un trabajo por demás difícil, de llevar a buen término, debido a que no es lo mismo iniciar un proceso a terminarlo, sin saber si las pruebas con las que se cuentan son las esperadas para lograr una sentencia justa, más aún si tomamos en cuenta la expectación que la mayoría de los juicios han despertado en la población en general.

El primer paso ya fue dado, acusar y abrir muchos procedimientos que se encuentran recién iniciados, y, dependiendo de muchas circunstancias procesales, pudiera ser que en los próximos cuatro años no lleguemos a conocer considerables sentencias, derivado de varios elementos, como que las pruebas con que se cuenten, no sean lo suficientemente contundentes para lograr una condena.

Otro podría ser, que los abogados defensores hagan uso de todas las estrategias legales para alargar ad infinitum, cada uno de los juicios, para irlos debilitando tanto que dejen de tener la importancia que al momento tienen, lo más probable es que se inicien nuevos, que de alguna manera, tendrían a la sociedad pendiente de los nuevos casos en tribunales, restándoles importancia a los antiguos, tomando en cuenta, que más personajes de la política han sido detenidos, y aún faltan más.

Como es natural, con el tiempo la noticia deja de tener relevancia, tanto para el ciudadano común y corriente, como para los medios de comunicación, tanto los tradicionales, como los alternos, y las redes sociales, en un mundo tan cambiante, y globalizado, lo que hoy es una noticia relevante, puede mañana no serlo tanto, y un día después puede ser parte del olvido.

Así que, quien ostente por los siguientes cuatro años la dirección del Ministerio Público, no lo tiene nada fácil, porque tiene que elevar más aún, el grado de credibilidad que al momento ostenta la Institución, además de continuar con los nuevos casos que pueden y seguramente van a surgir, darle seguimiento a los que se encuentran abiertos, pero no un seguimiento burocrático cualquiera, tiene que darles fin, o como mínimo adelantarlos lo suficiente para que se logren condenas, recordando que será primera instancia.

Por lo anteriormente expuesto, ya sea la sentencia condenatoria o absolutoria, la siguiente diligencia será siempre la apelación, porque los procesos difícilmente terminan en primera instancia, todos los sujetos procesales apelarán el veredicto, y ahí no termina la historia, posteriormente viene la Casación, el Amparo y la Inconstitucionalidad, así que, fácilmente y como se observan, hasta el momento los procesos penales, podemos durar hasta quince años más, sin vivir el final de los casos que hoy ocupan a la sociedad guatemalteca en general.

Lo que le espera al nuevo/a Fiscal General, y a los siguientes, no es tarea fácil, pero la próxima elección es fundamental para darle seguimiento a los casos que tanta expectación han levantado interna y externamente, porque muchos de ellos han trascendido a las noticias internacionales, la atención ha sido generalizada, y mantenerla, y superarla es un arduo trabajo.

Tomando en cuenta que las dos últimas fiscales, cada quien a su manera, han elevado el grado de confianza en la institución, el trabajo del elegido/a deberá ser de muy alto nivel.

Derivado de lo anterior, la labor tanto de la Comisión de Postulación al calificar no solamente los expedientes, más aún identificar los perfiles idóneos es bastante delicado, minucioso, y responsable.

Pero, si el trabajo de la Comisión es delicado, la decisión del Presidente, lo es más aún, dependiendo del listado con los nombres que le sea entregado, en sus manos estará la resolución final, y más importante para el país, por lo que esperamos como población que sean elegidos los mejores, y de esos mejores, el profesional sobresaliente.

Tarea difícil, y sumamente importante para el país, así que estamos a la expectativa.

 

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