Unas tijeras y una máquina de cortar pelo no solo te cambian la apariencia, también la vida. José Madero, más conocido como «Pepe Barbero» es testigo de cómo la labor de la barbería se volvió una pasión y un servicio al prójimo. Una palabra le abrió las puertas a nuevos horizontes y a lo que hoy es su propia Academia que lleva su nombre.
El espacio creado por «Pepe Barbero«, está ubicado en la 11 calle 0-49 zona 10 Ciudad de Guatemala, acoge a personas de todas las edades para instruirlos en el arte barberil, por medio de la certificación que extiende la Academia, el estudiante puede ejercer la profesión en Guatemala y en el extranjero.
Junto a su familia, y su equipo de trabajo, han sido testigos de experiencias y anécdotas que envuelven nuevas formas de ver la vida y de cómo se puede considerar al barbero el mejor aliado.
EL BARBER TRUCK DE PEPE EL BARBERO
Por su parte, él puso a rodar la primera Barber Truck en el país y con su Bici Barbería sigue regalando sonrisas con sus llamativos atuendos. Ambas salen eventualmente a regalar cortes de cabello para quien lo desee.
Compartió un poco de su historia a LH BIENESTAR y el inicio de sus sueños en el garaje de la casa de sus abuelos. Y deja un mensaje especial a los lectores “nada es para siempre, las adversidades pasan y el sol siempre vuelve a salir, sobre todo si la confianza de los proyectos están encomendadas a Dios”.
LH Bienestar: ¿Cómo te diste cuenta de que tenías habilidad para el ámbito barberil?
Pepe Barbero: La Academia de Barbería Pepe Barbero, nació hace aproximadamente cinco o seis años en el garaje de la casa de mis abuelos, esto a consecuencia de querer emprender, esas ganas de querer salir adelante y llevar un sustento a mi familia.
En ese entonces la Barbería no se llamaba Pepe Barbero, sino HOSSANA, empezó en un pequeño espacio de Boca del Monte, mi experiencia en esta profesión era empírica, ya que comencé cortándome el cabello a mí mismo. Actualmente, la barbería cuenta con 50 estaciones totalmente equipadas, pero en los inicios fue con dos sillas plásticas, para ese entonces no tenía presupuesto para las capas, usaba bolsas negras de basura.
LH BIENESTAR: ¿Por qué dices que un “no” te abrió la puerta a lo que eres hoy en día?
Pepe Barbero: Gracias a Dios, en todo ese proceso, empecé con mis primeros diez alumnos, pero hay algo muy importante que me gustaría puntualizar y es que a veces un “no” te abre las puertas.
Me recuerdo, que le dije a mi abuela, “¿me puedes rentar el garaje de tu casa para dar clases?, ya tengo 10 alumnos, la respuesta de ella fue que los sábados tenían un grupo familiar en la casa y los domingos iban a la iglesia, entonces me dijo que no. Ahí fue cuando pensé que nadie me apoyaba, su respuesta me enojó; sin embargo, fue la oportunidad para que yo ampliara mis horizontes.
Tiempo después, a pesar de las adversidades, esto fue creciendo y junto con mi esposa dimos un paso de fe, ella había recibo cursos de peluquería y fue la que me animó a emprender. Mientras ella atendía a las mujeres, yo debía realizar los cortes de cabello a los hombres, sin darme cuenta empecé a atender más clientes.
Un corte de cabello le pude cambiar la vida a alguien, siempre lo he dicho no solo es la persona que te cambia la imagen, sino que está diseñado para servir a los demás. Es alguien que te cambia la autoestima, incluso si te encontrás en depresión o estás de bajón.
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LH BIENESTAR: ¿Cuántos alumnos ha recibido la academia en todo este tiempo?
Pepe Barbero: Durante, todo este tiempo ya han pasado más de 7 mil alumnos, tanto hombres como mujeres, niños y niñas se han certificado con nosotros. Una de las características de nuestra academia, es que está avalada tanto nacional como internacionalmente, entonces le abre las puertas a las personas, a que no solo puedan ejercer el oficio o el arte de la barbería aquí en Guatemala, sino también en el extranjero.
LH BIENESTAR: ¿Alguna historia de impacto que te haya inspirado a seguir en esta profesión?
Pepe Barbero: Tenemos una Bici Barbería y la Barber Truck en la que eventualmente salimos a regalar cortes a las personas. Y durante estos años, me ha marcado mucho, de como un corte de cabello, le podés cambiar la vida a alguien. Una historia que a mí me pega mucho es la historia de un niño hondureño, estábamos frente al palacio y recorrimos toda la cuarta avenida, ya veníamos por la Municipalidad cuando de repente un niño nos empieza a limpiar el parabrisas de la Barber Truck.
Vimos que el niño tenía el cabello bien largo, le digo “¿mira, te corto el cabello?”, y un poco desconfiado dice que sí, vi que su ropa estaba algo desgastada, fuimos a un centro comercial e hicimos las compras correspondientes. Todo esto lo grabé y subí el video a las redes sociales, esto no con el fin de que la gente me aplauda sino más como un acto de servicio y que podamos transmitir cosas positivas.
Luego de varios días, me entraron varios mensajes, dentro de todos ellos, había uno que decía “él es mi hijo y está desaparecido”. Cuando leí eso estaba un poco asustado porque no sabía a qué problemas me había metido. Resulta que el niño era menor de edad y era hondureño, él se había quedado perdido acá en Guatemala porque había venido con una caravana de migrantes.
Luego de varios procesos, seguimos su caso de cerca y aunque fue difícil, el niño finalmente logró estar de regreso con su mamá. Fue un caso que quise documentar y una historia muy bonita para compartir.
LH BIENESTAR: ¿Cuál es el lema de la Academia?
Pepe Barbero: El lema de la Academia es aprender para emprender y generar. Estas tres cosas van de la mano, porque si yo aprendo barbería, yo puedo emprender un negocio y al momento de emprender un negocio, yo puedo generar ingresos y puedo volverme una persona autosostenible económicamente.
LH BIENESTAR: ¿Qué le dice Pepe Barbero de 34 años a su yo adolescente?
Pepe Barbero: Le diría que no todo es para siempre, como emprendedor he pasado momentos en los que he querido tirar la toalla. Pero nada es para siempre, siempre que hay tormentas, detrás viene la calma y la paz.
Si yo pudiera ver a ese Pepe Barbero o a ese pequeño José le daría un abrazo y le diría, que todo va a estar bien.
Yo empecé con un cliente, dos clientes, pero llegué a un punto en que llegaba atender hasta trece a quince clientes, al día. Hubo una Navidad que yo hice más de treinta cortes, pero si había veces que yo decía ya no.
LH BIENESTAR: ¿En un mundo paralelo, qué te hubiera gustado ser?
Pepe Barbero: En un mundo paralelo, si me hubiera gustado ser baterista de una banda rock y si soy baterista, pero soy baterista empírico, no estudiado.
LH BIENESTAR: ¿Nos puedes hablar un poco de tu equipo de trabajo?
Pepe Barbero: Definitivamente, tengo un equipo de trabajo detrás, que gracias a Dios ahora me doy la oportunidad de tenerlo. No siempre lo pude tener y siempre hay algunos que se van y otros vienen, pero siempre tengo mis pilares fijos. Maestros de planta, mi esposa es como el cerebro administrativo de todo esto y yo doy el toque de creatividad y el instructor principal.
Tengo docentes que son barberos profesionales que se han convertido en educadores profesionales, y que con mucha paciencia, con mucha dedicación y con estándares de calidad transmiten su experiencia al mundo.
LH BIENESTAR: ¿Cómo surgió la Barber Truck?
Pepe Barbero: La historia es un poco triste y a la vez alegre. Cuando empecé en este rollo, veo que en otros países como México, Estados Unidos y países como España hay camioncitos adaptados para vender cosas. Sin embargo, me pongo a investigar que acá en Guatemala hay de esos pero no dedicados a la barbería. Entonces me decidí a comprar de esos buses que les llaman loncheritas, lo adaptamos, e hicimos la inauguración un 15 de septiembre.
Empezamos a realizar los cortes gratis, lamentablemente tiempo después se la mandé a una persona para que la maneje; pero me la regresó con el motor fundido. Entre discordias de quién tenía la culpa, terminé decepcionado con eso.
Son de esas cosas que uno dice, quiero hacer todo bien, pero algo cambia y todo se viene abajo. Entonces, no me di por vencido, así que compré otro modelo estilo panel, evidentemente las personas no caben paradas en esos carros, entonces le mandé a cortar el techo, parecía submarino.
LH BIENESTAR: ¿Nos compartirías tu mejor historia en la Barber Truck?
Pepe Barbero: Frente al Parque Central, llegó un señor entacuchado con su corbata y llevaba un sombrero, de repente entra a la Barber Truck y se quita el sombrero y ¡buff! el montón de cabello.
Mientras le empiezo a cortar el cabello, viene a mi memoria cuando yo era más joven y salía a buscar trabajo, en ocasiones tenía que ajustar fichas para juntar Q10.00 para un corte porque, ya que en ese entonces tenía que ir presentable a las entrevistas de trabajo.
Esta persona me empieza a contar su historia, literalmente fue como que estuviera describiendo la mía. Me dice “fíjate que voy para una entrevista de trabajo, pero no tenía dinero para cortarme el cabello”, cabal saca su billetera y solo tenía Q5.00 y me mencionó que se había puesto ese sombrero para disimular un poco la gelatina que tampoco le hacía tanta justicia.
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LH BIENESTAR: ¿Qué significa para ti hacer este tipo de labores?
Pepe Barbero: Para mí hacer este tipo de labores altruistas es no solo bendecir a los demás personas, sino también sentirme bendecido.
La Bici Barbería y la Barber Truck salen aleatoriamente a regalar cortes de cabello y además compartimos con las personas un pequeño refrigerio. Por eso digo que con los pequeños actos podemos realizar grandes cambios.
LH Bienestar: ¿Nos puedes contar sobre la historia del niño “Conito”?
Pepe Barbero: Yo vi el video de él y se me hizo tan ingeniosa su idea, por supuesto comparto algunos ideales con toda esta coyuntura y otros no.
Vi en él un niño noble y humilde, entonces digo por qué no ayudarlo con estudio. El este año está culminando sexto primaria, conozco su historia y no pude cortarle solo el cabello, tuve que ir más allá. Entonces le di una beca completa con todos los módulos, así también se le proporcionó todos los artículos necesarios para que pueda realizar sus cortes.
Para que él también pueda tener un oficio e independientemente en el transcurso de las clases y él no solo pueda estar estudiando sino aprendiendo un oficio.
@pepebarbero Conito el niño de las manifestaciones en Guatemala
LH BIENESTAR: ¿Cuál es el mensaje final que le dejas a los lectores de La Hora?
Pepe Barbero: Todos tenemos un legado, cuando nosotros ya no estemos en este mundo, ¿qué van a decir de nosotros?, ¿cómo nos recordarán otros?
Yo creo que lo mejor que podemos hacer es dejar ese legado y sobre todo tomados de la mano de Dios. Recuerda, si estás pasando adversidades, nada es para siempre, solo confía.
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