Por: Santos Barrientos

El lenguaje en sus dimensiones poéticas nos muestra que la palabra precisa crea una balanza con escrúpulos entre lo imaginado y lo real. La lectura de “Don Quijote y las memorias de Ixmukané”, ganador del Premio de Poesía Editorial Praxis (México, 2020), nos recuerda que el poder de la poesía, pese a las incomprensiones de nuestro tiempo —y de cualquier otro, porque las distracciones y los derroteros de la memoria están presente en cualquier época—, proporciona el aliento para la comprensión humana desde diferentes alcances.

No es arbitrario afirmar que las alturas poéticas alcanzadas en este libro constituyen las más rigurosas tentativas de lo que va de este siglo. Y esto se debe, pues, a que muy pocos se atreven a aventurarse en la geometría de la palabra con la seriedad y compromiso que asume Giovanni Coxolcá, jugando con el lenguaje para dar cuenta de memorias infinitas que se entrelazan entre los versos. Se trenzan ideas que justifican la pasión, el amor, el beso deseado, la soledad, el hastío de la época, hasta llegar a la decadencia humana y sus contradicciones. Todo es vívido y a la vez irreal, la conjugación de la armonía y el sueño, la sonrisa y la tristeza: voces que nos hablan desde la intimidad de los deseos.

“Don Quijote y las memorias de Ixmukané” seduce y envuelve, atiza las cenizas de la memoria y nos recuerda la realidad. El asombro con que nos contempla es parecido al enamoramiento por vez primera. Es difícil encontrar la dualidad de almas que buscan su centro en la esperanza. ¿Esperanza de qué? Del ser humano, de la especie. Hay versos que nos parten, nos destruyen y, a la vez, nos encuentran; se trazan con la tinta indeleble de la identidad, que es amor y apreciación.

En el libro de Coxolcá, la poesía es el corazón de la memoria, el reloj que detiene el tiempo: nos muestra el camino de dos mundos que se escinden. Esa compleja estructura, rica y variada de imágenes, se logra observar en autores como José Saramago, quien construye universos paralelos y los recrea. Algo parecido sucede con los versos de “Don Quijote y las memorias de Ixmukané; su estética es la comunión, la búsqueda —no de sí mismo, sino de los “otros”—y el recuerdo. Es un imán vital que nos atrae y nos encuentra. Giovany enlaza dos culturas en donde la oralidad y la tradición son permanentes. Se puede asegurar que es la búsqueda de “La articulación de las diferencias…”, —libro de Mario Roberto Morales, quien en vida sostuvo una amistad muy cercana con el autor—. Cuando se comienza a leer el libro ocurre una atracción que cautiva hasta las últimas páginas, es una suerte de esplendor que ilumina los más íntimos deseos; pájaros que migran a nuestros ojos y se conectan con el misterio. No es vano afirmar que se lee de un tirón, porque las palabras dotadas de luz detonan nuestros pensamientos.

Soledad y silencio hablan desde las voces enterradas por el tiempo. Las memorias —sí, en plural— de Ixmukané perviven y Don Quijote encuentra entre las sombras un libro pequeño que ilumina el mundo. Es, por tanto, que la invitación a leer el libro es un elogio a la palabra, al lenguaje. El tiempo dará la razón.

El autor se ha formado entre intelectuales y campesinos. No es exagerado afirmar que hoy puede estar leyendo a Joseph Conrad, Wisława Szymborska o Danilo Kiš y mañana puede estar preparando la bomba para ir a fumigar o afilando el hacha y el machete para ir a buscar leña.

El libro ha sido difundido por diferentes medios nacionales trascendiendo las fronteras. Esto demuestra que la poesía en sus diferentes manifestaciones sigue estando presente en países como los nuestros —olvidados en las telarañas del tiempo—. Sin embargo, no debemos contagiarnos por la emoción mediata, el proceso de creación literaria es una apuesta arriesgada en donde coexisten los componentes de ética, moralidad y el compromiso —con la palabra, claro.

En cualquier caso, la honestidad —en su sentido más puro— es un valor que confluye en la obra de Giovany. Es, por tanto, un autor al que debe volverse con frecuencia. Recuerde que esta y otras novedades puede adquirirlas consultando en www.fceguatemalaenlinea.com y a través de WhatsApp: 5017-3130 o por mensaje directo en redes sociales: FCE Guatemala. El envío es gratis en compras mayores de Q200, dentro del perímetro de la Ciudad de Guatemala y Q300 en los departamentos. Aplican restricciones. Puede visitarnos en 11 calle 6-50 zona 1, de la Ciudad de Guatemala.

Suku’un Felipe, de Armando Bartra
Suku´un Felipe presenta una biografía novelada de Felipe Carrillo Puerto, gobernador de Yucatán y luchador incansable por la justicia social. A lo largo de este libro, Armando Bartra narra con don literario la vida de este personaje, quien sin importar qué hiciera o dónde estuviera, tenía presente el deseo de mejorar las condiciones de vida de los mayas. Esta relación inquebrantable entre él y los mayas le valió el apodo de Suku´un, es decir «hermano”.

Una tierra para sembrar sueños, de Jan de Vos
El autor narra la historia de la selva a través de los sueños de ocho personajes que son representativos de cada tema: la explotación maderera, la colonización campesina, la iniciativa finquera, la intervención gubernamental, la unión ejidal, la evangelización autóctona, el refugio guatemalteco y el alzamiento zapatista. Jan De Vos fue un historiador belga afincado en México, ?? en la ciudad de San Cristóbal de las Casas, que hizo importantes y numerosas contribuciones al estudio y la difusión de la historia de Chiapas.

¿Cómo te sientes?, de Anthony Browne
Willy es un chimpancé muy cambiante: a veces se siente muy feliz, y a veces triste; en ocasiones se enoja o se aburre, pero también puede sentirse culpable. ¡Las emociones pueden ser complicadas! Willy te invita a explorarlas con él y tú, ¿cómo te sientes? Anthony Edward Tudor Browne?, ? es un autor e ilustrador de libros infantiles con reconocimiento internacional que tiene casi cuarenta títulos publicados.?

Artículo anteriorSin avance interpelación al titular del MEM; por falta de quórum se levanta sesión
Artículo siguienteFaltando 2 meses remesas superan monto recibido en 2020