Fernando Mollinedo

mocajofer@gmail.com

Guatemalteco, Maestro de educación primaria, Profesor de segunda enseñanza, Periodista miembro de la Asociación de Periodistas de Guatemala, realizó estudios de leyes en la Universidad de San Carlos de Guatemala y de Historia en la Universidad Francisco Marroquín; columnista de Diario La Hora durante 26 años, aborda en sus temas aspectos históricos, educativos y de seguridad ciudadana. Su trabajo se distingue por manejar la palabra sencilla y coloquial, dando al lector la oportunidad de comprender de modo sencillo el universo que nos rodea. Analiza los difíciles problemas del país, con un criterio otorgado por su larga trayectoria.

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El decálogo que ahora presento resume hasta hoy el fracaso de todos los gobiernos desde la época independiente; circunstancia que, por ser de características humanas debemos de entenderla tal como ha sido, es decir, que todo lo malo que la sociedad guatemalteca ha recibido a través de los años fue y es por la ignorancia, estupidez, avaricia, analfabetismo, revanchismo político, pobreza económica y educativa de los gobernantes, aunque hayan sido o sean generales o doctores.

DECÁLOGO: Es un conjunto de normas o consejos que, aunque no sean diez, son básicos para el desarrollo de cualquier actividad. Es también el conjunto de los diez mandamientos de la Ley de Dios; esta palabra se origina del latín tardío decálogus y éste a su vez del griego bizantino dekálogos.

El presente decálogo representa todo aquello que se debe modificar de inmediato y que debe de tomar muy en cuenta la persona que asuma la Presidencia de la República para rescatar al país de: UNO: la quiebra económica de la mayoría de la población, debido a la ineficiencia de los funcionarios que tuvieron y tienen a su cargo la economía y su dependencia de los sectores económicamente pudientes del país. DOS: el desastroso o nulo nivel educativo y moral de las personas que dirigieron y dirigen los destinos del Estado de Guatemala, léase presidentes, vicepresidentes, diputados y alcaldes analfabetos y ladrones que no poseen el intelecto necesario para conocer y entender la realidad de la población y por ello les aflora su espíritu delictivo.

TRES: el malísimo estado del sistema de salud colapsado por los grandes hueveos de los funcionarios de salud y las farmacéuticas en todos los tiempos, especialmente durante la pandemia del Covid y como ejemplo hace pocos meses el nuevo hospital de Chimaltenango. La depredación en dicho sector ha orillado a la población a utilizar los servicios de farmacias y consultorios privados constituyéndose la privatización de los servicios de salud. La reconstrucción del sistema sanitario amerita atención inmediata.

CUATRO: el pésimo desarrollo en materia educativa, la cual ha sido dirigida por personas graduadas en universidades privadas que jamás trabajaron como maestros y no conocen la vida real del ejercicio docente magisterial por lo tanto se han dedicado a engrosar el rubro administrativo y realizar negocios legales, pero inmorales que les producen ganancias personales sin importarles el destino de millones de niños y adolescentes para que puedan ser hombres y mujeres cultos y productivos en la sociedad. 

CINCO: La distribución de las tierras nacionales y la creación de los Juzgados Agrarios son necesidades de atención inmediata, estos factores son de suma importancia en el desarrollo económico del país y la desatención gubernamental a los sectores rurales integrados en su mayoría por la población indígena, quienes son los más necesitados para evitar el incremento de la pobreza han sido olvidados. SEIS: la militarización casi ad perpetuam como modo esencial para el mantenimiento y guardianía del poder por parte de los sectores económicamente poderosos y en especial como elemento represor de las exigencias del pueblo para el ejercicio de sus derechos constitucionales. 

SIETE: las alianzas perversas de los gobernantes con las bandas criminales y los cárteles de la droga y compañías transnacionales que se apoderan del país y como consecuencia aumenta la violencia generalizada con el elevado número de muertes y más muertes, lo cual debilita la economía, provoca el cierre de empresas, el alza del desempleo y crecimiento de la pobreza. OCHO: la ingobernabilidad del país es uno de los problemas más graves que sufre la población en todos los rincones de Guatemala por la ausencia de las instituciones del Estado que incumplen las obligaciones básicas como salud, educación y seguridad. La población está más sola que nunca y las instituciones gubernamentales más debilitadas al extremo de que, casi no existen. 

NUEVE: el escandaloso endeudamiento público que los gobernantes han llevado a niveles históricos lo cual significa hipotecar el futuro de la población por los próximos cincuenta o más años, lo que representa que la deuda pública prácticamente será impagable. DIEZ: empoderamiento de las mujeres rurales e indígenas puesto que es imperativo reconocer y valorar el papel protagónico que desempeñan las mujeres en los sistemas agroalimentarios. Desde la agricultura hasta la distribución, comercialización y consumo: las mujeres están en el corazón de la cadena de suministro alimenticio. Ojalá que estas letras sirvan en un futuro cercano.

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