Claudia Virginia Samayoa
Cartas de una Lechuza
@tucurclaux

¿Estaremos ya en el infierno o cabe la posibilidad que cambiemos el rumbo y nos dirigimos al cielo?  Días como hoy, confirmo que para algunas cosas aún estamos en el purgatorio, tal vez hay alguna esperanza.

El purgatorio es, según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, “… [El] estado de quienes, habiendo muerto en gracia de Dios, necesitan aún purificarse para alcanzar la gloria”.  Aunque estas categorías de pensamiento religioso han sido superadas en la teología contemporánea; para ejemplificar lo político y social, como lo hizo Dante, aún son útiles.

La pregunta es si estamos purgando realmente las ofensas y desviaciones del ejercicio político y social de Guatemala o sencillamente actuando para bajar hacia el infierno en breve.   Analicemos dos situaciones experimentadas el jueves 21 de abril, ayer, que muestran posibles procesos de purga.

  1. La selección de la nómina de seis candidatos para Fiscal General: De forma sorpresiva, la predicción de que la Fiscal General sería colocada en la lista de seis contra viento y marea fue frustrada cuando 7 decanos tomaron la decisión de no darle su voto imposibilitando, así, su participación. Esta decisión de los decanos profundizó el desgaste del ya viciado proceso.  Luego que quedara sin decisión el sexto escaño, el proceso se ha repetido 10 veces sin poder mover la posición de los que se oponen a la reelección de la actual Fiscal General.

Ni para atrás ni para adelante, el proceso se encuentra en el purgatorio.  El Pacto de Corruptos ha tenido que invocar a la Corte de Constitucionalidad para ver cómo esta ordena que elijan a Consuelo Porras.  El purgatorio de los decanos opositores se profundiza porque no tienen el valor a decir de frente la verdadera naturaleza de su oposición.  Para mientras la cínica transparencia de la maquinaria del Pacto avanza, por lo que tarde o temprano, veremos la inclusión de la Sra. Porras en el listado acabando con ello con cualquier credibilidad en torno del proceso de Comisiones de Postulación, dando el paso al infierno.

  1. En el Día de la Tierra: Ayer fue el Día Internacional de la Tierra y el primer aniversario de la entrada en vigencia del Acuerdo de Escazú.   Este Acuerdo latinoamericano es el primer tratado vinculante que reconoce que el desarrollo no puede ocurrir sin la defensa del agua, la tierra, el medio ambiente y la madre naturaleza.   Para que nos adaptemos al cambio climático y exista algún futuro para la humanidad debe garantizarse la participación de todas y todos en el desarrollo, particularmente la de los pueblos indígenas, las mujeres y diversos grupos vulnerables que son afectados por el impulso de acciones y políticas que impactan en el equilibrio ecológico.  Para que exista la participación debe haber acceso a la información, protección a las personas que defienden derechos humanos y acceso a la justicia ambiental.

No tengo que repetir acá los impactos que la creciente deforestación, los desvíos de ríos, las sequías y tormentas prolongados tiene en el aumento de la pobreza y pobreza extrema.  Mientras la lucha por buscar soluciones es criminalizada en Guatemala, hoy se vio una inusual alianza multisectorial para impulsar que el Acuerdo de Escazú sea ratificado por Guatemala.  Tal vez podemos demostrar que podemos unirnos para proteger al planeta y construir el buen vivir.  Tal vez encontremos el camino para salir del purgatorio a través de la unidad. Para más información vaya a www.alianzaescazugt.org.

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