Por Grecia Ortiz
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Roberta S. Jacobson, asesora especial del presidente de Estados Unidos, Joe Biden y Coordinadora para la Frontera Sudoccidental desde el 20 de enero de 2021, conversó con medios de comunicación para hacer énfasis en la política migratoria y los pilares de ese gobierno, que incluyen la mejora de la gobernanza, reducción de la corrupción, además del fortalecimiento de seguridad y estado de derecho.
Según explicó la experimentada diplomática estadounidense, la administración Biden buscará implementar un plan comprensivo y de largo plazo para enfrentar los retos migratorios en todo el Hemisferio Occidental, incluyendo los del propio sistema.
“Nuestro plan tiene cuatro pilares y esos son muy importantes, son para trabajar en reducir las causas fundamentales que obligan a las personas a migrar, mejorando la gobernanza, reduciendo la corrupción para ofrecer una base para inversión y oportunidad económico y fortaleciendo seguridad y el sistema de derecho, expandiendo el acceso a protección internacional por aumentar el reasentamiento de refugiados, repensar y reconfigurar el proceso de asilo”, mencionó.
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De ese modo, indicó que también buscan trabajar en la reunificación de familias y en programas de migración laboral, así como la protección nacional fronteriza a fin de adoptar políticas de aplicación civil que cumplan con el proceso debido.
“Nuestro objetivo es restaurar orden y justicia en el proceso de asilo, mientras priorizamos la salud pública”, aseguró.
BUSCAN ATACAR LAS CAUSAS QUE GENERAN LA MIGRACIÓN
En ese orden, mencionó que buscan un sistema justo y humano que asegure que las familias se mantengan juntas.
Uno de los aspectos que destacó, es que la administración Biden busca atacar las causas estructurales que generan la migración, porque si no se atiende la pobreza, corrupción, inseguridad, “no podemos realmente cambiar la situación de los migrantes, para que ellos puedan tener una vida en sus países y un futuro para sus niños”.
Jakobson destacó que muchos de los programas que iniciaron al final de la administración del presidente Barack Obama, eran un esfuerzo bastante fuerte, pero que fueron interrumpidos durante el gobierno de Donald Trump.
“Él corto los programas en América Central en medio de 2018 o 2017, no me acuerdo, pero eso fue el momento de los programas que quizás estaban a punto de ayudar a las comunidades en el Triángulo del Norte y esos programas fueron cortados y bastante de los fondos estaban cambiados a otros destinos”, dijo.
En la administración de Obama, dijo que se aprendió “bastante”, de cómo se pueden enfocar las asistencias en comunidades que mandan migrantes por motivos de seguridad o económicos y de cómo trabajar en estos lugares asegurando que la asistencia llega a las personas que lo necesitan.
“Obviamente nuestra asistencia no es suficiente y toma bastante tiempo para tener efecto, es por eso que necesitamos conformar realmente socios en la sociedad civil y especialmente en el sector privado. A mí me parece que el sector privado en esos países no ha contribuido suficientemente al bienestar de estas áreas”, aseguró.
ES NECESARIO ASEGURAR QUE LOS FONDOS DE AYUDA SEAN USADOS DE MANERA EFICAZ
Jakobson refirió que es necesario crear condiciones para no solo dar fondos a los Gobiernos, sino también cambios y reformas contra la corrupción, para asegurar que la ayuda pueda ser utilizada de manera eficaz y efectiva.
“No podemos decir que esos programas no fueron exitosos, porque todavía estamos esperando los resultados y vamos a empezar de manera tan rápido posible con nuestro Congreso dar fondos destinados a las comunidades mismas para asegurar de mejorar la situación en sus comunidades y asegurar que tenemos una respuesta para las necesidades en las comunidades”, afirmó.
