Pedro Pablo Marroquín Pérez
pmarroquin@mra-legal.com
@ppmp82
Cada vez es más la gente que tiene plena conciencia de lo que está ocurriendo alrededor de los esfuerzos en contra de la democracia.
La cara más visible de este esfuerzo en contra de la democracia es el Ministerio Público (MP) y en ella Consuelo Porras dirige pero es Ángel Pineda quien termina dirigiendo muchos de los hilos de todo lo que pasa en el ente investigador. La denuncia del diputado Enrique Montano hay que entenderla en su justa dimensión.
Las acciones en contra de lo expresado en las urnas son apoyadas por todos aquellos que saben que si se da la transferencia de mando en favor de Bernardo Arévalo y Karin Herrera, su modelo queda comprometido y ahí es donde encontramos actores de los 3 poderes del Estado, contratistas, operadores de la mafia y aquellos gestores que han hecho mucho dinero con el sistema como está, operando en conjunto.
Necesitan los antejuicios en contra del vicepresidente Guillermo Castillo para tener a quien dejar en una “presidencia de transición”, en contra de los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE) para nombrar nuevos y que los entrantes se “anime” a anular las elecciones.
Por eso, Blanca Alfaro hoy vuelve a repetir que los resultados son inalterables.
Buscan quién de los tres jueces se anima, en caso no logren nada con los antejuicios, a emitir una resolución que anule las elecciones para dar paso a los planes que tienen en el sentido que no desean que Semilla asuma el poder.
En el camino, han ido entendiendo que para lograr su objetivo tienen que actuar a la nicaragüense y deben ir en contra de todo aquello que sientan como amenaza, incluso si eso implica ir en contra de la legalidad misma, incluyendo la libertad de expresión en todo el sentido de la palabra.
Hay quienes habían expresado que toda advertencia era una signo de exageración pero dadas las recientes acciones, derivado de algunas investigaciones que enderezan en contra de actores que les son incómodos, en función de los ataques por medio de los Netcenters que apoyan al MP y a los actores que buscar desconocer los resultados, muchos han tenido que abrir los ojos e ir aceptando algo que no querían.
La desesperación es tanta y el miedo es tan abrumador que seguirán haciendo burdas ilegalidades porque sienten que solo así conseguirán su objetivo.
No comentamos el error que le pasó a la sociedad nicaragüense: cuando eran otros los que caían en manos de las ilegalidades del régimen sentían que el problema no era de ellos y cuando se dieron cuenta, ya era muy tarde porque Ortega y Murillo tenían el control de todo.
Ese control incluye, para el caso de Nicaragua, la democracia y por eso es que no podemos dejar que aquí acaben el anhelo democrático de millones de guatemaltecos.
Las acciones firmes en favor de la democracia, del Estado de Derecho y el respeto de los derechos debe ser el primer paso para no perder la democracia, pero además, para empezar a enfrentar y corregir los vicios de años que han tenido que sufrir miles de personas.
La determinación que tengamos para preservarnos como una democracia, será la clave y por eso siempre he dicho que de nosotros depende que las mafias no se salgan con la suya, pero más importante que eso, de nosotros depende que podamos diseñar la nueva Guatemala de los acuerdos.
