Pedro Pablo Marroquín

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Esposo, papá, abogado y periodista. ¡Si usted siempre ha querido un mejor país, este es su momento de actuar!

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Pedro Pablo Marroquín Pérez
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@ppmp82

La gente que conoce al presidente Alejandro Giammattei sabe que es un hombre corto de paciencia y capaz de explotar cuando las cosas no son como él quiere. En otras palabras, es “de mecha corta” como se dice coloquialmente cuando alguien se sulfura con facilidad.

Entonces, ¿cómo es que el mandatario se ha mantenido tan pasivo con la timada que nos están dando los rusos con los fallidos envíos de la vacuna Sputnik V?

Sabiendo cómo funcionan las cosas en Guatemala y sabiendo que el Presidente tiene un enorme Consuelo en la fiscal general Porras, no se puede cerrar la posibilidad que en el tema de la vacuna haya habido sobra pero no obra.

Se sabe que el Presidente y el canciller Pedro Brolo fueron los que llevaron a Salud la opción de los rusos y que la Ministra, Amelia Flores, terminó firmando un contrato que ahora la tiene en apuros, no solo porque al estampar su firma se comprometió sino porque el Presidente poco parece hacer para resolver una crisis de proporciones grotescas, pero que la indiferencia chapina hace parecer como una cosa menor.

En medio del enorme problema que tenemos por la crisis en Salud, la estafa rusa y la falta de vacunas, llama la atención que la semana pasada Giammattei se reúne en secreto con Consuelo Porras y Silvia Patricia Valdés, presidenta del Organismo Judicial y no fue hasta que se hizo la consulta que la vocera del Presidente reconoció el hecho y dijo que era bueno preguntarle al MP porque la reunión había sido exitosa. ¿Si hay tanto éxito en algo, por qué no comunican?

No informar y tener todos los días a la Fiscal General en la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), hace pensar que anda buscando algo por encargo del Presidente y entonces surgen más sospechas porque si él no hace el gran escándalo por el tema de las vacunas y Porras anda averiguando cosas, ¿qué nos estamos perdiendo?

Conozco a Pedro Brolo y aunque no es un hombre con experiencia, creo que es lo suficientemente sensato para saber que su viaje y peor aún sus respuestas lo iban a dejar en ridículo, entonces ¿qué es realmente lo que están tratando de ocultar?.

Un hombre de carácter, por mucho que haya mafia rusa, ya habría montado en cólera por lo que le hacen a su país con el dinero de la gente y por eso es que cuesta entender cómo es que ese hombre “tan firme”, como algunos describían a Giammattei, no tiene un aire con remolino para resolver la timada que nos dan desde Rusia.

Siempre la diplomacia, a esos niveles, debe ser el camino pero Brolo dejó en claro que no hubo tales de diplomacia porque él no sabía ni de qué estaba hablando. Hoy publicamos un trabajo, en función de un memo al que tuvimos acceso, que el Gobierno dará un compás de espera en julio para ver si los rusos mandan 1 millón de dosis antes de pedir la devolución del dinero porque desean llevar la fiesta en paz.
Ojalá que este contrato no haya visto la luz porque algún aventajado ofreció mordida y alguien más, sabiendo que hay Consuelo, haya dicho que sí.

El problema de la vacunación es real en un momento de disparo en los contagios, cuando hay gente a la que el virus se está llevando y que a estas alturas ya deberían tener su esquema completo de vacunación.

En otras palabras, este desmadre ESTÁ COSTANDO VIDAS, pero tanto Consuelo hace que les termine valiendo enorme gorro.

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