POR KIMBERLY LÓPEZ
klopez@lahora.com.gt

La ministra Lucrecia Hernández Mack aseguró que aunque la Cartera tiene serios problemas por falta de presupuesto, esta no es la única deficiencia pues existe una gran desorganización y falta de capacidades administrativas en las 83 unidades  ejecutoras del Ministerio de Salud.

_Nac30_4bDiferentes reacciones se generaron a partir de que ayer Hernández declarara que la Cartera que dirige no requería de más presupuesto, puesto que los problemas imperantes eran administrativos.

«Nosotros sí requerimos más financiamiento, pero debemos tener esta planificación y fortalecimiento institucional para que podamos solicitar un financiamiento, saber en qué lo vamos a gastar y saber gastarlo», aclaró hoy la funcionaria.

Hernández explicó que el presupuesto para Salud no es suficiente, es más, recordó que en términos generales es un presupuesto que nunca ha logrado superar más del 1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

A decir de la Ministra, con el actual presupuesto no se logran satisfacer las necesidades de salud de la población; sin embargo, paralelo a esto existen serios problemas de institucionalidad, incluso ha habido cierta inestabilidad política que se refleja en la variedad de ministros que han asumido durante un mismo gobierno.

“El ministerio de Salud tiene 83 unidades ejecutoras y las compras y contrataciones de alguna manera son descentralizadas y son 83 unidades que cuentan con un director ejecutivo y gerencias generales que de alguna manera también han sido inestables y tienen dificultades en manejo de recursos”, declaró Hernández.

Según la Ministra, este es el punto medular de uno de los problemas prioritarios: el desabastecimiento, que no depende únicamente de que el MSPAS no tenga dinero sino también de las capacidades de unidades ejecutoras, principalmente, directores y gerentes para poder hacer las compras, montar eventos y saber qué insumos comprar y en qué momento.

El problema que ha identificado, explicó, es que la dirección en unidades ejecutoras está muy debilitada, es decir, las capacidades o competencias de tomar decisiones de cómo utilizar el financiamiento no son las mejores. Lo anterior, expone una necesidad de hacer un fortalecimiento institucional integral.

“A la hora de solicitar más financiamiento también tenemos que tener mucha claridad de en qué se va gastar, y ese proceso de saber en qué se va gastar implica todo un proceso de planificación, es algo que no se ha llevado a cabo durante mucho tiempo, y por eso es que mantenemos presupuestos históricos”, concluyó la titular.

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