OS DEJO MI CASA *
Bernardo Solares Revolorio
Dejadme, pues, partir,
que llegado es mi tiempo.
Que mi último aliento
etéreo retoce por la casa
y recorra el ambiente
para que en ella
pueda descansar mi alma.
Tomadlo con calma
y no lloréis mi partida.
Pronto todo habrá pasado.
Yo me voy resignado
y os dejo mi presencia
en las cosas que amé,
para que mi nombre perdure.
Aunque para negarlo jure
y me arrepienta,
sabéis bien que pequé
por maldad, por ignorancia,
por placeres ¡yo que sé!
Ah, lástima de la infancia
que envejeció rauda y voló,
y me involucró en la vida,
sin entender que muere uno
un poco cada hora, cada día,
cada noche que pasa.
Os dejo mi humilde casa,
no sé por cuanto tiempo,
que si la muerte es vivir
pronto quizás sea mi regreso.
Decidme adiós por eso,
pero en silencio,
que yo sabré comprender
vuestro sentimiento.
Hombres y mujeres,
cuidad estos rincones
y los patios de mi casa
y ved que broten claveles,
y rosas y limones.
Que no se acaben las palmeras.
Pero sed sinceros,
despedidme sin llanto.
Después de todo, no es para tanto,
pues yo me quedo con vosotros,
os lo prometo,
como sentado a la mesa.
Por favor no llorar, que no haya tristeza.
No es que la vida pase:
pasamos nosotros por ella
y algunos ¡pobres! sin dejar huella.
Yo me voy, pero queda mi casa
y en cada esquina mi presencia
que os dejo con amor.
Que no nos consuma el dolor.
Digámonos adiós
sin que la distancia nos separe.
Total, este viaje es incierto,
pero para emprenderlo
sé que debo estar muerto.
Sólo os ruego ser sinceros;
pues mucho odio la hipocresía
y no quiero el cínico llanto
de quienes fingieron estimarme
mientras sus aceros afilados
me hundían al voltearme.
Os dejo mi casa,
que no es un espacio simple
de paredes y ventanas;
es Escuintla, mi tierra pipil
sembrada de volcanes.
Este es uno de cuatro poemas que, integrados en un solo trabajo, merecieron el primer lugar en el Certamen Nacional «Canto de Golondrinas – 2017».
