El embajador de Estados Unidos, Luis Arreaga recibió un reconocimiento donde se refirió al tema de la justicia en Guatemala. Foto La Hora/@usembassyguate

Nada más y nada menos que el Embajador de Estados Unidos en Guatemala, Luis Arreaga, lanza un tremendo y soberano reto a la ciudadanía ante lo que él reconoce como un esfuerzo de las redes criminales (que incluyen al narco pero también a otros grupos más encopetados y de políticos), diciendo que existe ese esfuerzo pero que su futuro depende de si los guatemaltecos, al fin, nos decidimos a tomar cartas en el asunto. Arreaga hizo la aseveración durante un acto en su honor en la Universidad Rafael Landívar y luego la Embajada, citando al diplomático, publicó un Twitter que textualmente dice así: «En los últimos meses hemos visto la amenaza de las redes criminales de tomar el sistema de justicia. Pienso que #GUA -Guatemala- puede salir de esta crisis si los guatemaltecos deciden tomar cartas en el asunto”.

Y es que Estados Unidos tiene bien claro lo que está pasando en Guatemala. El empeño que dirigió Gustavo Alejos para controlar a las Cortes, que no se limita a la CSJ y las de apelaciones sino que incluyó al Tribunal Supremo Electoral y apunta también al control de la futura Corte de Constitucionalidad, es todo un plan diabólico para colocar a magistrados que estén al servicio de la impunidad.

No se trata sólo de proteger a los corruptos y a quienes los apoyan desde encumbradas posiciones del sector privado, sino de tener jueces que en vez de administrar justicia administren impunidad.

Por supuesto que esa impunidad no será de gratis y los jueces que se prestan a la jugada saben que tendrán su ganancia porque podrán cobrar por sus servicios a todos los delincuentes habidos y por haber. Será el procedimiento normal porque para ello es que serán designados por el Congreso que ya cumplió la primera tarea, en forma silenciosa y solapada, con un TSE, compuesto por los seleccionados por el operador de las comisiones paralelas, Gustavo Alejos, razón que explica el por qué de resoluciones que apuntalan el poder de los señalados de corrupción y financiamiento electoral ilícito.

Así como el TSE se hace de la vista gorda y asegura a Sandra Torres el control del partido político, así todos los magistrados de Salas y de la Corte Suprema de Justicia, descaradamente seguirán prácticas como las que ya implantaron en casos sonoros como el del otro Alejos, escudándolo sin rubor ni escrúpulos para protegerlo de las investigaciones penales en su contra. Pero bien dice el Embajador: finalmente no dependemos de EUA sino que lo que decidamos hacer los guatemaltecos.

Redacción La Hora

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