Dra. Ana Cristina Morales
La lluvia, las calles con destrozos, la congestión vehicular, los posibles asaltos y otras conductas violentas mientras se está en el congestionamiento de tránsito; la poca educación vial, los policías de EMETRA parecen obstaculizarlo más que ayudar a liberarlo. Esto debido a una falta de coordinación entre ellos mismos. A las horas pico, donde más vehículos aparecen. Los conductores se dan permiso de ser intrépidos, groseros, y mal educados.
La calidad de vida de las personas que manejan un promedio de hasta cinco horas diarias disminuye. Es un alto estresor conducir por las calles y avenidas de Guatemala. Desde muy temprano el tráfico vehicular se instala en la ciudad. La gente busca vías alternas para ver si gana un poco de tiempo, pero esas vías en ocasiones son lugares de asalto y con pavimento descuidado en donde hay riesgo de irse dentro de un hoyo casi volcánico. Con la lluvia las calles se inundan y el guatemalteco tendría que tener un carro con la capacidad de convertirse en lancha. La gente enfrenta sus problemas vehiculares en inseguridad y con poca ayuda. Ya que también es peligroso ofrecer ayuda a los demás, puede ser una trampa para ser víctima de un asalto.
Se necesitan propuestas y soluciones concretas para este grave problema que involucra a toda la ciudad de Guatemala. Y también entiendo que los trazos de las calles y sistemas de drenaje del agua en el área rural tienen sus defectos y dificultades.
Este problema está robando vida a los guatemaltecos. Las personas podrían invertir mejor su tiempo, dedicarse a otras actividades, pero en su lugar, lo único que desean es llegar a su destino para lograr descansar un poco. Entonces, se aíslan de la convivencia familiar y social. Pensar en salir para algo más que ir al trabajo constituye una reflexión intensa por el enfrentamiento a más tráfico.
Sumemos todo lo anterior a que surja una manifestación o un bloqueo vial por cualquier motivo. Desde la caída de un árbol puede ser. Lo que incluso impide la realización de un día laboral. Así que este problema tiene consecuencias económicas, laborales, sociales, emocionales y familiares.
La gente transforma su cara y en variadas ocasiones se comporta en una modalidad distinta a su forma de ser. El monstruo verde aparece y conductores, transeúntes, agentes de policía. Todos se encuentran dispuestos a un enfrentamiento bélico. Cualquiera puede ser sospechoso de ladrón o asaltante.
También existe el problema que por las noches, quienes cuentan con un trabajo nocturno. Médicos, enfermeras, músicos, artistas y otras profesiones u oficios. Quedan desamparados de protección la misma policía nacional de manera arbitraria detiene a carros, sin que hayan retenes, sin que hayan transgredido ninguna ley, aun siendo mujeres que circulan solas. Con la finalidad de sacar una ventaja financiera, incluso se dan el trabajo de persecución de algún vehículo. El conductor temeroso a recibir un disparo detiene su automóvil o vehículo en lugares poco seguros.
Las multas de tránsito en ocasiones son realizadas con arbitrariedad y prepotencia. Teniendo la alternativa de ir a la oficina de EMETRA para manifestar el descontento. Sin embargo, esa oficina donde lo atienden y escuchan con amabilidad tiene parcialidad y mi experiencia personal, es que no resuelve e investiga las denuncias a profundidad. Incluso en los lugares en donde existen evidencias clave como las cámaras.
La impotencia se exacerba y con ello disminuye el nivel de tolerancia y aumentan las posibilidades de conductas hostiles o agresivas. Es apropiado reconocer la labor que realizan las estaciones de radio y los locutores que tienen entendido este problema. Proporcionan compañía, humorismo, música y palabras que ayudan a tolerar la situación intolerante de la congestión vehicular. Así que se les agradece.
Con este artículo deseo una reflexión de parte de todos y que surjan propuestas viables para dar solución a este problema. Con la esperanza de que no obtengamos mayores castigos por revelarlo. Conozco por una entrevista de radio que escuché hace algún tiempo, que existen personas con la especialización del manejo de la urbanización y el control del tráfico vehicular. Quienes considero deberían ser consultadas y escuchadas. Por favor no necesitamos alternativas tajantes que endurezcan más el problema. Quiero agradecer la colaboración y sugerencias de quienes lean el artículo, así como la ayuda que puedan brindar las autoridades correspondientes.
