Roberto Arias

Las raíces de la imparable pobreza y violencia son las causas de las estampidas migratorias que empujan a los niños hacia las fronteras del Norte, lo que deriva del rol pasado y presente que han jugado las políticas de los EE. UU., tanto dentro de su territorio como en nuestros países, en comunión con las grandes mafias transnacionales y las mafias bilaterales, entre cuyos tentáculos se mueven las supercúpulas económicas guatemaltecas y los gobernantes.

Debe considerarse dentro de estos elementos la desinformación existente en los medios estadounidenses sobre la realidad centroamericana. Pero si vamos más al fondo, veremos que en las mismas escuelas de los EE. UU. han ignorado totalmente la enseñanza sobre la historia de estos países vecinos que son sustentablemente coadyuvantes a su opulento modus vivendi a costas de la generación de su pobreza y violencia. Los libros de texto en los EE. UU., si en alguna oportunidad mencionan a la región, excluyen la mención del involucramiento de los Estados Unidos y otros poderes mundiales con sus gobiernos y en sus sistemas agrícolas y comerciales.

Por consiguiente, en las mínimas menciones en los textos escolares estadounidenses, cuando las hay, el caso del estado del “subdesarrollo” en Centroamérica y sus enormes tasas de pobreza las reducen a la pobreza de su clima y a fallas o haraganería de su gente, en lugar de reconocer que es producto de los sistemas económicos y políticos globales, basados en siglos de colonización y desmedida explotación.

Los Estados Unidos ahora se victimizan, en lugar de reconocer que ellos son los victimarios debido a sus políticas de garrote y represión utilizados desde siempre por medio de los gobiernos y sistemas legislativos y judiciales que ellos mismos designan casi a dedo en Centroamérica. Los gobiernos estadounidenses deberían informar correctamente a sus ciudadanos para que se formen juicios correctos y encontrar soluciones reales basadas en las causas radicales de esta crisis humanitaria que golpea a la región.

Si los Estados Unidos quieren cambiar la masiva migración a su territorio, deberían iniciar una campaña de enseñanza en su país para cerrar este agujero y asegurarse de que los estudiantes sean informados correctamente sobre el contexto de esta crisis y sobre la historia y cultura centroamericana en general.

“Los EE. UU. ´sugirieron´ reducir salarios de la United Fruit Company (UFCO) en Guatemala y Ubico, ni lerdo ni perezoso, dijo que ´La barriga llena es madre de los malos pensamientos´ y mandó a reducir a la mitad los salarios de los empleados de la UFCO.

Castigó el ocio ´Padre de los malos pensamientos´, obligando a los culpables a trabajar gratis las tierras de su propiedad. Para arrancar ´los malos pensamientos´ a los revolucionarios, inventó una corona de acero que les estrujaba la cabeza en los sótanos de la policía.” (Cardoza y Aragón)

Observamos así que los EE. UU. indujeron al abuso oligárquico al militar Jorge Ubico; uno de los modernos precursores de lo que persiste en Guatemala: Pobreza e ignorancia.

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