Jesús Alvizurez

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Jesús Alvizures
chus@tribunadelaverdad.com

Adiós año viejo 2021 que a tu paso dejaste muerte, pobreza y algunos millonarios que se aprovecharon del débil sistema infectado de corrupción y muchos dineros de préstamos y donaciones fueron a parar a su cuenta bancaria, sin importar las necesidades de la clase obrera, de empleados en diferentes áreas de desarrollo cotidiano y campesinado. Este año nos dejó en la calle, las entidades e instituciones civiles y gobiernistas que no gestaron el renglón de prevención con visión anterior a la pandemia, tomaron dividendos económicos de reserva que otros dirigentes dejaron y lo gastaron en mantenimiento dijeron, uno de estos casos AGAYC.

Secundo IPSA Instituto de Previsión Social del artista (IPSA) que se hacía llamar en tiempo normal brazo social del artista; pero en la necesidad del artista por la pandemia el eslogan no funcionó y fue o es brazo manco del artista porque tampoco practicaron la prevención para paliar cualquier emergencia, aquí han muerto muchos jubilados sin tener cobertura y el instituto solo dice EN PAZ DESCANSE, se ha hecho llamado a las autoridades para que sean cuestionados sus dirigentes, pero al parecer gozan de inmunidad como muchos funcionarios de gobierno que alfombran el camino. Ahora se sabe que IPSA prevé para 2022 firmar el documento de supervivencia, pidiendo que los asociados estén al día con sus cuotas en su organización ¿para qué? es la pregunta.

El Ministerio de Cultura hizo un cacareo de subvención al artista, no especificando a qué grupo de artistas se refería y consignó los requisitos:

1.- Fotocopia de DPI ampliada de ambos lados. 2- Constancia de inventario de cuentas, adicional cuenta bancaria. 3- Q90.00 de timbres fiscales. 4-Portafolio Artístico-Comunicado del 8 de Octubre de 2021. Hubo varias revisiones del portafolio y dijeron que todo estaba en orden. Lo de los timbres es mañosería, esto sirve para engrosar el fisco; lo correcto hubiera sido que al ser confirmado como beneficiado con la subvención se solicitara los timbres no anticipados.

A última hora se les dijo a los aspirantes que tenían que tener registro de actividades 3 meses antes de la pandemia y estar activos en 2021, algo que no figura en los primeros requisitos. Esto se llevó a efecto después de largas colas y tediosas horas aguantando hambre, al final a algunos les entregaron un Código para continuar las gestiones de lo que en su momento se ofreció y se tergiversa lo requerido. Siendo esto falso porque nada se logrará y para qué seguir en la necedad.

En otro orden se requiere que se actúe con la verdad y no con falsedades como la reciente experiencia donde hay espacios oscuros que sacrifican al artista por su necesidad. Artículo 63: Derecho a la expresión creadora. El Estado garantiza la libre expresión creadora, apoya y estimula al científico, al intelectual y al artista nacional, promoviendo su formación y superación profesional y económica. Algo que es cuestionable porque en nuestro medio chapín no se cumple, se manipula al antojo de los dirigentes y ministros. Estamos en las cuatro esquinas, desnudos de apoyo para la mejora del artista en Guatemala. El artista por falta de apoyo se dedica a otras labores fuera de su campo que no es la línea de su inspiración. Jimmy Morales en una entrevista internacional dijo: En Guatemala la corrupción es normal. ¿Qué dicen ustedes? Bienvenido año 2022.

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