POR JOSÉ PABLO DEL ÁGUILA
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La Fiscalía de Derechos Humanos del Ministerio Público (MP) solicitó penas que alcanzan los 112.5 años de prisión contra cinco militares en situación de retiro acusados de la desaparición de Marco Antonio Molina Theissen y las violaciones contra su hermana, Emma Guadalupe Molina Theissen. Sin embargo, aún falta el veredicto del tribunal.
Esta mañana, el Ministerio Público (MP) presentó ante el Tribunal de Mayor Riesgo “C”, presidido por el juez Pablo Xitumul, las conclusiones del caso.
Por los agravios causados a Emma Guadalupe Molina Theissen, la Fiscalía solicitó penas de 30 años de prisión por delitos contra los deberes de la humanidad, y 20 años por el delito de violación con agravación de la pena para los acusados: Manuel Benedicto Lucas García, exjefe del Estado Mayor del Ejército; Manuel Antonio Callejas, General de División; Francisco Gordillo Martínez, comandante de la zona militar General Manuel Lizandro Barillas (GMLB); Edilberto Letona Linares, segundo comandante, y Hugo Ramiro Zaldaña Rojas, oficial del Estado Mayor del Ejército.
Por el delito de desaparición forzada, en agravio de Marco Antonio Molina Theissen, la Fiscalía solicitó penas de 40 años de prisión en contra de: Lucas García, Callejas Callejas y Zaldaña Rojas.
Sin embargo, por los daños causados, la Fiscalía solicitó que cada una de las penas fuera aumentada en una cuarta parte, por lo que, en el caso de Lucas García y Zaldaña Rojas, sus condenas podrían alcanzar hasta los 112.5 años de prisión.
La Fiscalía acusa a los militares de dos hechos. El primero es la detención de Emma Guadalupe Molina Theissen el 27 de septiembre de 1981 en Santa Lucía Utatlán, Sololá, por portar documentos calificados como “propaganda de estudio y de discusión política”. Tras su captura fue llevada al comando militar GMLB, donde fue víctima de violencia sexual. Finalmente logró escapar el 5 de octubre, nueve días después de su detención.
El segundo hecho imputado ocurrió un día después de que Emma escapara. Tres elementos del Ejército, vestidos de particular, se presentaron a la casa de la familia Molina Theissen en la zona 19 capitalina para recapturarla. Sin embargo, no la localizaron y, en represalia, capturaron a su hermano, Marco Antonio, quien desde ese día permanece desaparecido.
