POR JOSÉ DEL ÁGUILA
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El titular del Juzgado Tercero de Primera Instancia Penal, Mynor Motto, tenía programado revocar la libertad condicional que actualmente goza la jueza Marta Sierra González de Stalling, tal como lo ordenó una sala de apelaciones. Sin embargo, la sindicada no se presentó a la audiencia argumentando quebrantos de salud.
Desde diciembre del 2015, la Sala Primera de la Corte de Apelaciones ordenó que Sierra de Stalling regresara a la prisión preventiva. Sin embargo, debido a atrasos en el proceso, no se ha podido ejecutar la resolución.
Según expuso el juez Motto durante la audiencia, la sindicada presentó un informe médico, en el que se exponen quebrantos en su salud.
«No es mi responsabilidad que Marta Josefina Sierra González no esté presente acá, sino que hay un informe médico, y en eso cualquier abogado en su sano juicio que estuviera como juez acá presente no va a obligar a que esta persona comparezca hoy», expresó Motto.
Motto dijo que estaba en la disposición de solicitar el apoyo del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) para que evaluara la salud de la sindicada y así determinar si es válida su inasistencia.
«Lo que sí puedo realizar, desde luego, es ratificarlo a través de Inacif para que el juez ya determine si es válida la ausencia de hoy o no», dijo Motto.
La jueza será citada nuevamente para el próximo 6 de junio, a las 8:05 horas, para darle cumplimiento a lo ordenado por la sala.
MÁS SINDICADOS VOLVERÁN A PRISIÓN
De igual manera, en junio de 2016, la Sala Cuarta de la Corte de Apelaciones ordenó que los sindicados José Arturo Morales Rodríguez, Ruth Emilsa Higueros Alay, Jorge Luis Escobar Gómez, José Luis Montenegro Santos y Luis Fernando Mendoza Zapata regresaran a la prisión preventiva.
Los sindicados habían sido beneficiados por el juez Motto a cambio del pago de una fianza, no obstante, los magistrados de la sala consideraron que no era prudente que permanecieran en libertad.
Hasta el cierre de esta edición, el juez no había ordenado la prisión para los procesados debido a que Morales Rodríguez presentó una recusación en su contra, con la cual pretende separarlo del proceso penal por dudar de su imparcialidad.
CASO
La jueza Sierra de Stalling es señalada de obtener beneficios económicos por parte de sindicados en el Caso «La Línea», a cambio de favorecerlos con una medida sustitutiva.
Según las investigaciones, las personas que sobornaron a la jueza para obtener fallos favorables eran representadas por el bufete de Morales Rodríguez.
