El Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV), durante la administración de Alejandro Giammattei, adjudicó cuatro contratos para la supervisión de la construcción de las Escuelas Bicentenario por un monto de Q12 millones 673 mil, según información que detalla el portal Guatecompras, sitio en el que se registran las contrataciones del Estado.
Los contratos fueron adjudicados para supervisar los avances de los edificios que se construyeron y que aún no finalizan, en Parramos, Chimaltenango; Esquipulas, Chiquimula; La Libertad, Petén; y en Palín, Escuintla.
Hasta hoy, según el mismo sitio, por estas supervisiones se ha pagado el 73 por ciento de los contratos, el equivalente a Q9 millones 209 mil. Las supervisoras que fueron beneficiadas con las adjudicaciones en mención son:
Escuela | Monto adjudicación (en quetzales) | Empresa |
Parramos |
2,780,000.00 |
Grupo ADC |
Esquipulas |
3,714,750.00 |
Servicios de Ingeniería Civil |
La Libertad |
3,180,000.00 |
Servicios de Ingeniería León Fajardo |
Palín |
2,999,100.00 |
Ingeniería y Avalúos, S.A. |
Total |
12,673,850.00 |
|
Fuente:
Guatecompras |
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OBLIGACIONES DE EMPRESA
El expresidente Giammattei ofreció como uno de sus proyectos estelares la construcción de 16 Escuelas Bicentenario, llamadas así a propósito de que en 2021 se cumplieron 200 años de la firma de la Independencia de Guatemala.
Al final de su mandato, de las 16 se adjudicaron 13. De estas, según las actuales autoridades del CIV, solo tres llevan avances, entre el 80 y 90 por ciento, mientras que el resto ni siquiera empiezan a construirse.
Además, de las que ya muestran avances, medios han reportado que se están deteriorando. Por ejemplo, en la que se ubica en el Parcelamiento Las Nubes, zona 3 de Villa Nueva, solo se han colocado algunos parales y se observan promontorios de piedrín y arena.
La de Parramos, Chimaltenango, lleva escaso avance, aunque ya se pagó el 90%, según la titular del CIV, Jazmín de la Vega. En una visita que la funcionaria efectuó a ese lugar declaró a medios que la construcción es «un proyecto abandonado», con «infraestructura oxidada, y paredes de PVC».
Las empresas que supervisan juegan un papel importante a la hora de hacer los desembolsos a las constructoras, puesto que son las que estiman las medidas y las evaluaciones de los materiales utilizados antes de hacer los pagos, de acuerdo con los contratos de construcción.
Asimismo, es el que acepta, verifica, cuantifica y aprueba las estimaciones de trabajo ejecutado y los materiales utilizados en la obra. Los contratos de construcción dicen que se pagarán los renglones y subrenglones «que hayan sido previamente ejecutados, aceptados y aprobados por el supervisor».
Además, las compañías supervisoras tienen, entre otras obligaciones, velar porque el contratista cumpla con todas las estipulaciones de las bases de licitación, del contrato y sus anexos, aprobar los cronogramas físicos y financieros para la ejecución de las obras y presentar informes mensuales técnicos y financieros con información sobre los pagos efectuados y saldos por ejecutar.
Además el supervisor es el encargado de inspeccionar y hacer las observaciones necesarias de la obra, previo a que el CIV las reciba, asimismo, debe comprobar que se han cumplido con las correcciones que se formulen, antes de emitir la certificación definitiva para la aceptación de los trabajos.
De igual forma, el contrato obliga al supervisor a llevar controles diarios y en caso de constatar algún incumplimiento debe notificar al contratista. También debe entregar un informe mensual sobre el progreso del proyecto y otros que sean solicitados para el pago del producto.
PROGRAMA DUDOSO
El pasado 11 de abril, el CIV denunció al Ministerio Público a las anteriores autoridades de esa cartera debido a una serie de inconsistencias que se han descubierto en la revisión de las escuelas bicentenario.
Entre estas, resalta que desde la Unidad de Construcción de Edificios de Estado (UCEE) se habría fraguado un plan para beneficiar a una sola empresa que proveería a los contratistas el material para construir las escuelas, debido a que las bases de licitación se exigía que estas se debían construir exclusivamente con lego PVC.
En Guatemala, solo la compañía Fame Sistema Constructivo, S. A. distribuye dicho material, lo que hace sospechar a las autoridades que los procesos de licitación fueron dirigidos para beneficiar a esta empresa.
Por tal motivo, De la Vega dijo que la denuncia se dirigió en contra de el exdirector y exsubdirector de la UCEE, que estuvo a cargo de la construcción de los proyectos, aunque también a los que pudieron estar involucrados o tener participación.
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