Las supuestas anomalías en compras directas y de baja cuantía que se han denunciado para adquirir medicamentos es una tarea que debe revisar el jefe del Ministerio de Salud Pública. Las autoridades de esa dependencia esperan firmar en marzo un convenio con la Oficina de Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (ONUPS) para evitar el desabastecimiento de medicamentos básicos.
El ministro de Salud, Óscar Cordón, en una citación en el Congreso de la República, informó que los inventarios alcanzarían hasta marzo, por lo que han solicitado apoyo, entre ellos donaciones como emergencia, y además, en el convenio que se firmará se están priorizando 80 medicamentos para hospitales, 50 esenciales para centros de salud y 15 para puestos de salud.
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«El convenio va avanzando en la revisión, incluye áreas de compra de medicinas, otra es equipamiento, ambulancias y también infraestructura. Esperaríamos idealmente que el convenio estuviera firmado en marzo de tal manera que ya se pueda empezar a distribuir en abril», explicó Cordón.
El ministro enfatizó que detectó un exceso en compras directas y de baja cuantía, por lo que sospecha de anomalías y fraude, pero por la falta de un sistema de control se falsea y manipula el procedimiento.
No obstante, la viceministra Financiera Sandra Aparicio Sical, indicó que se eliminó una gerencia que estaba en dicho viceministerio, y solo funciona una dirección administrativa financiera.
Orlando Blanco, diputado de la bancada VOS, le recomendó al ministro tener cuidado en las compras con UNOPS y revisar la calidad, ya que cuando se inició con ese sistema hubo un ahorro, y solicitó información sobre las compras que se hicieron bajo esa modalidad, porque anteriormente se sistematizaba la información aunque estuviera descentralizada.
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REVISAN DEUDA EN HOSPITALES
Debido a que no hubo un presupuesto general para este periodo fiscal, los ministros solicitaron auditorías, especialmente por la deuda que encontraron, y así poder hacer ajustes en sus presupuestos.
Aparicio Sical calificó dicha deuda como ilegal porque no está entre los procedimientos establecidos de las normas de control de presupuesto, por lo que se realiza una auditoría interna y la Contraloría General de Cuentas revisa este aspecto.
«Estuve en unidades ejecutoras y precisamente se trabajó una reforma de ley porque a veces en las unidades ejecutoras lo que se dice es: o me quedo con deuda o se muere el paciente, entonces en algunos momentos tienen razón, solo que se tendría que establecer los controles para que eso no exista», respondió Aparicio.
La funcionaria respondió que hay una estimación de Q152 millones de deuda en el Hospital General San Juan de Dios y en el Roosevelt es mayor de Q200 millones.
