Bomberos reportan el hallazgo de cadáveres envueltos en sábanas. (Foto: Bomberos Departamentales)
Bomberos reportan el hallazgo de cadáveres envueltos en sábanas. (Foto: Bomberos Departamentales)

El hallazgo de cadáveres envueltos en sábanas o en bolsas en diferentes puntos del país resalta durante esta semana, lo cual podría estar relacionado con ataques entre pandillas. Esa es la hipótesis por la que se inclinan analistas así como las autoridades. Sin embargo, se descarta que sea un aumento de homicidios.

Las señales de violencia que presentan los cuerpos impactan en la percepción de la violencia. No obstante, según las estadísticas, los homicidios muestran una tendencia a la baja.

El ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, indicó que «derivado de las acciones implementadas por el Ministerio de Gobernación, las pandillas han tenido un desequilibrio en sus organizaciones y eso ha llevado a que se genere una dinámica de violencia interna. Que hasta el momento no ha afectado a la población, sin embargo, la crudeza de los casos, ha generado alerta.

 

«Pero es un tema interno de cada pandilla y lo tenemos identificado. Que lo tengamos identificado y que sea focalizado, no significa que no se vaya a investigar, en cada caso hay personal de DEIC que está trabajando. Es importante mencionar que hay otros casos que tienen dinámicas diferentes como el de la zona 13, este caso también se está investigando desde otra perspectiva y con la misma celeridad», agregó.

MENCHÚ: ENTRE PANDILLEROS

El consultor de temas de seguridad y macroeconomía del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), Walter Menchú opina que «por el tipo de violencia utilizada, es muy probable que los autores sean pandilleros. Según algunas notas dejadas en los cadáveres, también es probable que sean ataques entre pandilleros, aunque esto puede ser usado solo para desviar la atención».

Menchú considera que hay una posibilidad de la intención de desestabilizar al gobierno, «aunque hay que considerar la probabilidad de que, aunque los pandilleros sean los autores, hayan sido reclutados por otros grupos de crimen organizado u otros grupos de interés para desestabilizar al gobierno».

Así mismo, indicó que «hay que tomar en cuenta que solo en el primer trimestre de 2024 se ha incautado más cocaína (6,015 kilos) que en todo el año 2022 (5,950 kilos), por mencionar alguno de los otros grupos interesados en crear desestabilización. Los últimos hechos de violencia registrados en el país ameritan ser investigados a profundidad debido al nivel de violencia con los que se han cometido».

«Este tipo de actos pretenden desestabilizar al gobierno y tratan de enviar un mensaje negativo de inseguridad para amedrentar a la población y hacer creer con unos pocos hechos muy violentos lo contrario a lo que demuestran las cifras generales: que la violencia homicida se ha reducido en los últimos tres meses», agregó.

El analista recomienda que «se deben crear equipos especiales para investigar a profundidad y prontitud casos mediáticos, por ejemplo, como se hizo con el ataque a un bus del transporte público en Escuintla», opinó Menchú.

De acuerdo con el experto, «se han suscitado varios casos mediáticos en estos primeros meses del año (como el ataque a la Fiscal del MP), que ameritan una investigación profunda y poner a disponibilidad todos los recursos de investigación con los que cuentan las autoridades para llegar a los responsables intelectuales de estos hechos».

MÉRIDA: MARAS RENUEVAN CABECILLAS

El militar retirado y analista independiente en temas de seguridad, Mario Mérida, opina que no se ha hecho un análisis fenomenológico de las maras. A estos grupos se les relaciona con familias desintegradas, pero a juicio de Mérida las pandillas son estructuras organizadas que se dedican a delinquir, por ello estima la importancia de estudiar las causas actuales que provocan la formación de las pandillas.

«En ese sentido considero que lo que se está dando es una renovación de liderazgos dentro de las maras que se está reflejando con la eliminación de quienes podrían acceder a ese tipo de liderazgos o que lideraban antes a esas maras», expresa Mérida.

Esto, por ejemplo, si se relaciona con las ejecuciones que se dieron en el interior de una cárcel del país donde resultaron heridos dos de estos sujetos.

Por otro lado, Mérida refiere que el proceso de transición de las autoridades crea una especie de oportunidad para este tipo de situaciones que se dan de violencia, «por eso vemos hechos más violentos, pero no necesariamente afectan el balance que se tiene en cuanto a la reducción del número de homicidios».

«Pero cuando se dan aproximadamente 9 homicidios en un día, asusta y aumenta la incertidumbre de las personas, sobre todo por la difusión que se hace a través de las redes sociales», explicó.

Si bien, la posibilidad de que se tuviera la intención de desestabilizar al gobierno actual no la ve probable, el analista estima que los hechos generan incertidumbre que cuestionan la eficiencia del gobierno en cuanto a dar cobertura de seguridad. «También impacta a nivel internacional debido a la difusión que se hace de estos hechos».

Mérida recomienda tomar en cuenta la implementación de una política criminal con el fin de reducir los hechos de violencia y a la vez, atender el hacinamiento de las cárceles, especialmente los que están en condiciones de prisión preventiva.

ACUÑA: REACCIONAN A MEDIDAS

Por su parte, Lisandro Acuña, analista en materia de seguridad y justicia del Instituto de Análisis e Investigación de los Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (IPNUSAC), explica que las hipótesis planteadas por las autoridades deben considerarse.

Esto debido a las medidas tomadas en el control del sistema penitenciario como las diferentes requisas ejecutadas en las cárceles del país.

«Esto genera reacciones. A veces cuando se captura a líderes de pandillas existe lo que se llama fragmentación de dentro de las propias organizaciones criminales».

Acuña ejemplifica con el caso de «la muerte de un jefe de la mara 18, integrante de ‘La Rueda’ y esto según investigaciones de la PNC se atribuye esa disputa que se está dando en la colonia Carolingia en cuanto a la toma del control de los territorios entre estas pandillas».

«Hay que tomar en cuenta que cuando se implementan estrategias represivas contra el crimen organizado hay reacciones, pero hay otras aristas también», refiere el analista quien resalta la participación de mujeres en las extorsiones y el grado de violencia que se está implementando en contra de ellas.

Acuña explica que las estructuras criminales tienen una estructura dentro de su organización muy misógina que no permite los poderes jerárquicos dentro de las organizaciones criminales. «Tanto menores de edad como mujeres son muy expuestos en el tema del cobro de la extorsión y lamentablemente ellos pagan las consecuencias», expresó.

Respecto a una posible intención de desestabilización del gobierno, Acuña también desestima esta probabilidad, pero considera que podría haber una estrategia muy planificada de inteligencia de las pandillas para medir el grado de inteligencia que tiene el Estado a través de sus instituciones en cuanto a la investigación y esclarecimiento de estos hechos.

El analista estima que uno de los retos es el trabajo articulado para la prevención del delito, además atender la rehabilitación de los privados de libertad, así como el hacinamiento de estos.

A juicio de Acuña, es necesaria la instalación de una comisión donde todas las instituciones del Estado afines y organizaciones de sociedad civil hagan una recopilación de las propuestas sobre medidas represivas en contra del crimen organizado, la prevención de la violencia y una reforma al sistema penitenciario.

ESTADÍSTICAS MUESTRAN BAJA DE HOMICIDIOS

El presidente Bernardo Arévalo fue consultado, durante su visita en Alta Verapaz donde se reunió con alcaldes, sobre los hechos de violencia.

Al respecto Arévalo respondió que «las estadísticas oficiales evidencian que hay descenso en el número de extorsiones y un descenso en el número de asesinatos, eso evidencia que se está haciendo una acción alrededor del tema».

«Nosotros hemos desplegado, en el caso de la capital, cuerpos de policías especializados alrededor del tema del combate a la extorsión que se está expandiendo a otros departamentos y hemos hecho varias requisas en los distintos centros penitenciarios para precisamente hacer el secuestro del material electrónico que permite que estas bandas de extorsión estén operando desde las prisiones dando instrucciones a los que están afuera», agregó.

 

Heidi Loarca Oliva
Soy periodista apasionada por los temas políticos, económicos y sociales. A través de las noticias se guarda un registro de lo que acontece a lo largo de la historia del país.
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