El tiempo de reacción en situaciones de emergencia es vital y lo ocurrido con la nadadora estadounidense, Anita Álvarez es la muestra de cómo la determinación y rapidez con la que actuó su entrenadora al saltar inmediatamente para su rescate le salvó la vida. Un salvavidas entrevistado por La Hora recomienda en especial evitar el sobre esfuerzo para no ponerse en riesgo.
Las imágenes del heroico acto le dieron la vuelta al mundo y aunque esto ocurrió en una competición con profesionales, puede pasarle a cualquier persona que practique la natación o este disfrutando de un momento de relajamiento en una piscina.
Cristian Benavente, salvavidas de la Federación de Natación desde hace ocho años e integrante del Cuerpo de Salvamento del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), dijo en una entrevista a La Hora que ha experimentado en su profesión varias situaciones similares, aunque remarcó que han sido muy pocos casos por las medidas de prevención que asumen.
“Previamente a que los usuarios hagan uso de las instalaciones se les pide un examen médico para que un doctor de fe de que ellos están en condiciones de realizar el deporte. Esto no quiere decir que ellos no van a estar en algún momento en riesgo, pero es una garantía que nosotros tenemos como Federación de Natación”, anotó.
HAY RIESGOS
El salvavidas explicó que todos pueden estar en riesgo, desde los niños más pequeños en clases de enseñanzas, hasta un atleta de alto rendimiento como se pudo observar en el mundial de Budapest en Natación Artística.
Los riesgos con niños son:
Explicó que no manejan grupos mayores a diez alumnos por catedrático para evitar cualquier tipo de accidentes y que así los instructores tengan mayor capacidad de acción.
A nivel competitivo:
Puede darse un sobreesfuerzo y llegar al límite de lo que el cuerpo permite al momento de una competencia.
EN UN ESCENARIO COMO EL DE ANITA
Agregó que pueden llegar a ocurrir escenarios como el de Anita, quien tenía aproximadamente cuarenta segundos bajo el agua en su rutina y trato de hacer más de lo que podía, lo que pudo suceder fue un paro respiratorio, así que se desvaneció y empezó a tragar agua.
“Si la entrenadora no se hubiera dado a cuenta a tiempo se hubiera puesto en una situación más grave porque le hubiera dado un paro cardio respiratorio que ya era un caso más grave”, dijo.
PUEDE OCURRIR FUERA DE UNA COMPETENCIA
Nuevamente, Benavente hace énfasis en que esto puede ocurrir tanto a un nadador que no esté en una competencia y a quienes practican a nivel profesional, ya que están propensos porque permanecen más tiempo bajo el agua.
Para el entrevistado, en el caso de Anita y para evitar una tragedia, el tiempo de reacción fue vital desde que estaba empezando su rutina hasta que le ocurrió el paro respiratorio, si se hubiera tardado más, incluso se habría ocasionado una embolia pulmonar parcial; un panorama más complejo.
Su consejo para los atletas es tratar de controlar que se quiere hacer en una competencia y conocer sus límites.
Como entrenador y salvavidas, Benavente afirmó que en la Federación están al pendiente de los atletas en todo momento y recordó que hace unos años ocurrió un accidente similar al de Anita en nado sincronizado.
“Una de las atletas Josseline me recuerdo estaba haciendo su rutina de dueto entonces al momento de estar haciendo su rutina salió una y ella ya no salió y una compañera la sacó… no perdió el conocimiento, pero sí se estaba ahogando entonces nosotros ingresamos”, recordó.
En competiciones mencionó que hay dos salvavidas uno de cada lado de la piscina y quienes están atentos a las orillas, y aunque hay un reglamento en el que un juez es quien debe dar autorización para el ingreso de un rescatista, en casos extremos esa regla se ha roto.
#OpiniónEnLH
La gente honrada de este país, la que genera a pesar de los bemoles, la que se “mata” por sus hijos verá el sol salir de forma sostenible y será posible sí y solo sí no nos rendimos. https://t.co/gm5R97Aekk— Diario La Hora (@lahoragt) June 25, 2022
CONSIDERE UNA REVISIÓN MÉDICA DE RUTINA
Recomendaciones para quienes no son nadadores profesionales, pero lo hacen como un deporte:
Es necesario hacerse una revisión médica antes estar sometidos a alguna rutina de natación, para evitar este tipo de accidentes.
Benavente indicó que en la Federación los nadadores que usan las instalaciones son de diferentes edades, desde los más pequeños hasta adultos mayores y siempre hay salvavidas al pendiente de cualquier incidente.
