Información detallada a La Hora da cuenta que dos expedientes relacionados con el caso que se sigue en contra del exfiscal anticorrupción, Stuardo Campo, estuvieron desaparecidos por más de dos meses del despacho del juez noveno penal A, Guillermo Luna. Según un memorial, se supone que el fin sería perjudicar a los dos jueces del Juzgado Noveno Penal.
Se trata de los documentos que forman parte de la investigación en contra de Campo y dos exauxiliares fiscales del Ministerio Público (MP), quienes enfrentan a la justicia por una denuncia que la Fundación Contra el Terrorismo (FCT) presentó el 17 de noviembre de 2022.
El pasado 26 de mayo se ejecutó una orden de captura que fue girada en contra de Campo y tres personas más; sin embargo, una fue beneficiada con la falta de mérito de los cargos en su contra y quedó fuera del proceso.
El caso ha sido considerado tanto por los procesados como por organizaciones nacionales e internacionales uno más de la persecución política contra operadores de justicia por las pruebas que se han presentado en contra de los ex fiscales.
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DOS MESES EXTRAVIADOS
El juez Luna informó de este hecho al magistrado Josué Felipe Baquiax, presidente de la Cámara Penal, y dijo que el expediente 01073-2021-488 y una pequeña pieza del 1073-2023-199 estuvieron extraviados aproximadamente desde el 18 de agosto y que fueron encontrados hasta el 12 de octubre.
«Por este medio, me dirijo a usted, deseando el éxito en sus labores diarias. El motivo de la presente es para informar que en esta judicatura el día jueves 12 de octubre del año dos mil veintitrés, lastimosamente aparecieron dos expedientes que como Juez di la orden que fueran localizados por el personal a cargo del expediente«, se lee en el memorial al que esta Redacción tuvo acceso.
De acuerdo con Luna, los expedientes fueron movidos de su lugar, por lo cual no fueron localizados. De esa cuenta, el juez ordenó de forma verbal que se realizara una «búsqueda exhaustiva de los expedientes en la judicatura, por lo que esperé con esperanza y confianza de que en la judicatura no debe extraviarse nada».
Según el documento, las piezas «aparecieron de forma tan anómala y notoriamente con un dolo de causar agravio por alguna persona, al juez a cargo de los mismos, puesto que ambas piezas extraviadas aparecieron en el interior del Juzgado Noveno Pluripersonal, penal a mi cargo, pero en la parte interior del cielo falso del archivo».
Luna aseguró en la nota al magistrado que «alguien del interior o personas ajenas o personas externas a esta judicatura tienen interés en esos procesos y pretenden afectar principalmente al Juez A (Luna), que los tiene a su cargo o favorecer o perjudicar a algún sujeto procesal», refirió.
El juez también informó que ese mismo 12 de octubre denunció ante el MP acerca del hecho, y que fiscales «se presentaron a este juzgado con los técnicos profesionales y tomaron mi denuncia que quedó identificada como la denuncia número MP0001-2023-54099».
Juez Luna denuncia que expedientes aparecieron en el cielo falso de su juzgado
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— Diario La Hora (@lahoragt) November 14, 2023
SEÑALA A LA FCT Y PIDE SE LE INVESTIGUE
Luna está seguro de que lo sucedido en su despacho «no es casualidad», e indicó a Baquiax que la FCT, dirigida por Ricardo Méndez-Ruiz, emitió una serie de publicaciones en la red social X sobre supuestas anomalías en cuanto a la tramitación de los referidos expedientes.
«No es casualidad para el Juzgador que la FCT hubiere sacado publicaciones vía Twitter (X) que en el Juzgado Noveno Penal a mi cargo se estaban sacando o sustraendo documentos para afectar a la jueza B Marjorie Azpuru, y no es casualidad tampoco que meses anteriores la FCT había recusado a la jueza B y la atacaron por los medios de comunicación«, señaló Luna. (sic)
De esa cuenta, solicitó al magistrado Baquiax que hiciera de conocimiento del tema a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y que se investigue si la FCT «ha intentado coaccionar a los jueces (…) primero a uno luego al otro, A y B, poniendo en evidencia el interés de la referida Fundación en intimidar a juzgadores con uso de redes sociales», remitió.
La FCT es querellante adhesivo en el proceso que se sigue en contra del exfiscal anticorrupción, y presentó dos recusaciones con las cuales busca apartar a los jueces Luna y Azpuru del expediente.
En el caso de la jueza Azpuru argumentó que su expareja, Juan Francisco Solórzano Foppa, exjefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), es amigo de Campo y de esa cuenta podía beneficiar al exfiscal.
Y en el caso de Luna, la FCT previo a que el pasado 5 de octubre se discutiera si Campo y los otros dos exfuncionarios del MP debían ir a juicio, lo recusó asegurando que cerraría el caso para los tres sindicados y lo señaló de supuestamente extraer documentos de dicho expediente. Siete días después, aparecieron las piezas.
#URGENTE
El juez Noveno Penal, Guillermo Alfredo Luna Arriola (el mismo que dictó falta de mérito a favor de Aldo Dávila), íntimo amigo de Mayra Veliz, va a intentar cerrar el jueves próximo el proceso en contra del ex fiscal Stuardo Campo, a pesar que el fiscal de Asuntos… pic.twitter.com/X29hd3Wc1k— Ricardo Mendez Ruiz (@RMendezRuiz) October 4, 2023
«Haber acusado a la honorable jueza B (Azpuru) de esta judicatura la pone en una situación de posible afectada ante actos que el juez A (Luna) podría realizar, lo que evidentemente deja mucho que pensar, pero deja muy claro que esa entidad (FCT) es perniciosa para la correcta e independiente administración de justicia«, subaryó Luna.
Juez recusado en caso de Campo pide al MP investigar a presidente de la FCT
PIDE TRASLADO
Por lo anterior, el juez Luna informó a la Cámara Penal que la FCT supuestamente «intenta presionarme para lograr sus objetivos», tras la recusación del caso contra Campo y una solicitud de retiro de antejuico por haberle otorgado arresto domiciliario al exfiscal anticorrupción.
«Solicitando de ser posible por razones de seguridad personal se me considere para ser trasladado a una judicatura en materia de familia o civil más tercera. Muy respetuosamente, atento a sus órdenes e instrucciones«, finalizó el memorial que el juez Luna envió a Baquiax, cuya segunda hoja está en poder de esta redacción.
PROCESO EN PAUSA
El pasado 5 de octubre, el proceso penal en contra de Campo y los otros dos extrabajadores del MP quedó suspendido hasta que una Sala de Apelaciones establezca si Azpurú o Luna pueden seguir conociendo el caso, o en su defecto, se debe cambiar de Juzgado para darle continuidad.
¿JUEZ A LA MEDIDA?
Una fuente judicial explicó a La Hora que si se acepta la recusación contra los jueces, el expediente sería trasladado al Juzgado Décimo Penal, en donde las opciones para darle continuidad al caso son los jueces Víctor Cruz y Jimi Bremer, ambos sancionados por el Departamento de Estado de Estados Unidos al incluirlos en la Lista Engel, como supuestos «actores corruptos y antidemocráticos«.
Cruz y Bremer han conocido procesos de alto impacto que involucran a exoperadores de justicia, los cuales aseguran que existe una instrumentalización de los procesos penales en contra de quienes trabajaron en contra de la corrupción.
EL CASO
Campo dirigió la Fiscalía contra la Corrupción hasta que por orden de la Fiscal General, María Consuelo Porras, fue trasladado a la Fiscalía contra el Tráfico Ilícito de Migrantes. El MP lo señala de supuestamente desviar una investigación que estuvo a su cargo en 2021, además de emitir una orden de captura de manera equivocada.
De acuerdo con la investigación del MP, en este caso se efectuaron acciones que causaron que una persona de 70 años fuera aprehendida injustamente y estuviera en un centro privativo de libertad por 27 días en espera de resolver su situación jurídica.
A Campo se le señala por sus actuaciones en los casos Bitkov, Tamaulipas y Alfa Siete.
El exfiscal, con 12 años de experiencia trabajando en el MP, investigó a algunos ministros de Gobierno y jueces cuando fungió como jefe de la Fiscalía contra la Corrupción, previo a ser transferido a la Fiscalía contra el Tráfico Ilícito de Migrantes en abril de 2021.
FCT RESPONDE
La Hora se comunicó con Méndez-Ruiz, presidente de la FCT, para conocer su postura sobre los señalamientos y exposición del juez Luna en contra de la organización que encabeza, para lo cual se hicieron dos llamadas telefónicas.
En la primera llamada, efectuaada por este diario, refirió que contestaría únicamente si se le enviaban los documentos enviados por el juez a Baquiax, y sostuvo no hacerlos públicos hasta que esta nota fuera divulgada.
Se le indicó que se le consultaría a la jefatura de esta Redacción acerca de su solicitus. Minutos más tarde devolvió una llamada, y se acordó enviarle el texto que le fue remitido al magistrado.
Luego de leer el memorial, Méndez-Ruiz indicó: «se confirma lo que nosotros denunciamos en fecha 3 de octubre ante el Ministerio Público, en el sentido que este señor, juez Luna, está relacionado con graves actos de corrupción en su judicatura«.
«Él habla de unos documentos que milagrosamente aparecieron en el cielo (falso) de su oficina. Si esos documentos hubieran aparecido en la oficina de la Fundación contra el Terrorismo, otro cantar sería. Estamos hablando de un desorden en el Juzgado de este señor Luna«, destacó.
El presidente de la referida organización agregó que la «reacción de Luna se debe a que el caso, me imagino yo, estará caminado en el Ministerio Público y eso a él lo tiene asustado«, y refirió «existen varias versiones que recibe dinero para resolver de determinada manera».
Méndez-Ruiz calificó de «desesperadas» las acciones del juzgador, e indicó que no tenía conocimiento de la existencia del memorial que Luna trasladó al presidente de la Cámara Penal de la Corte Suprema de Justicia.
«Me complace que exista y lo haya presentado, porque evidencia lo que nosotros expresamos ante el MP«, sostuvo.
«Este señor lo que quiere es un traslado y nos está usando a nosotros (FCT) como un chivo expiatorio. Tenemos conocimiento que Luna y Azpuru tienen una enemistad. Imagínese un juez A y un juez B que no se hablen, está clarísimo», justificó sobre los argumentos del juez Luna.
Méndez-Ruiz figura entre los guatemaltecos que fueron sancionados por el Departamento de Estado de EE. UU. al incluirlos en la Lista Engel, como supuestos «actores corruptos y antidemocráticos» y los exjueces Miguel Ángel Gálvez y Carlos Ruano se fueron al exilio argumentado una persecución política a manos de la FCT.