El tema emocional y el bienestar mental de la población queda rezagado en la lista de prioridades y se convierte en una preocupación, pero también un reto para Guatemala. Foto: La Hora/José Orozco

En medio de un contexto de precariedad y limitaciones en cuanto a salud pública, mercado laboral, seguridad e infraestructura, el tema emocional y el bienestar mental de la población queda rezagado en la lista de prioridades y se convierte en una preocupación, pero también un reto para Guatemala.

Lo anterior, se refleja en los casos de guatemaltecos que han intentado terminar con su vida o alejarse por tiempo indefinido de su cotidianidad, ante problemas personales que afectan su salud psíquica.

El pasado 25 de noviembre un hombre intentó lanzarse desde el puente El Incienso, en zona 7 de la Ciudad de Guatemala, un lugar que, a criterio del psicólogo social de la Liga Guatemalteca de Higiene Mental, Marco Antonio Garavito, se ha convertido en un “símbolo” respecto al suicidio en los últimos años.

De acuerdo con el oficial de los Bomberos Voluntarios, Hans Lemus, en el mes de noviembre alrededor de 4 a 5 personas buscaron quitarse la vida en el lugar, mientras que una logró su cometido.

Además, durante el transcurso del 2022, bomberos han registrado un aproximado de 20 casos similares en el puente El Incienso.

Pero el emblemático puente no es el único sitio sujeto a estos fenómenos, el 20 de noviembre la 85 Compañía de los Bomberos Voluntarios evitó que una mujer se lanzara de un puente, ubicado en ruta al Atlántico, junto a una menor de edad.

 

Garavito cuenta que, desde los limitados recursos de la Liga, ha realizado estudios sobre el tema y todos los resultados coinciden en un punto: “al Estado no le preocupa”.

GARAVITO: GOBIERNOS PROVOCAN REALIDADES FRUSTRANTES

Para Garavito, pensar que los guatemaltecos están exentos de depresión y ansiedad “es iluso”, pues se trata de seres humanos que reaccionan emocionalmente a partir de la realidad, con matices grises.

Según el académico, el actual Estado y Gobierno, así como los que lo anteceden, son provocadores de este tipo de realidades en la población, ya que convivimos en un sistema social “terriblemente frustrante”.

El psicólogo social de la Liga Guatemalteca de Higiene Mental, Marco Antonio Garavito. Foto: La Hora / Archivo

“Como esperar que alguien no ande deprimido o ansioso si no tiene trabajo o tiene un miserable salario o bien se enferma y no tiene donde asistir o simplemente la educación y la seguridad no le dan respuesta”, recalcó.

ESME LA CHAPINA: “ME SENTÍA MUY CANSADA”

La presencia de frustraciones no discrimina, incluso personas cuyo oficio es el entretener también están expuestas. Tal es el caso de la famosa youtuber Esmeralda Sanabria, mejor conocida como «Esme la Chapina», a quien se le activó una alerta de búsqueda Isabel-Claudina el pasado 24 de noviembre.

Afortunadamente se logró localizar a Sanabria, la guatemalteca decidió retirarse temporalmente de la mirada pública tras atravesar una serie de problemas personales.

«Yo además de ser Esme la Chapina, soy mamá, tengo problemas, responsabilidades, soy Esmeralda Sanabria y llegué al punto donde me sentía muy cansada y donde no estoy bien emocionalmente», explicó en un video.

La creadora de contenido reconoció que en algún momento sí pensó en terminar con su vida, pero aferrada a su maternidad decidió darse un tiempo para relajarse “y no cometer ninguna locura” al sentirse tan triste.

Esmeralda Sanabria, mejor conocida como «Esme la Chapina». Foto: La Hora / Archivo

«El sábado me toca trabajar, y estos días han sido muy frustrantes para mí, como muchos saben he sido muy independiente desde mis 13 años y desde siempre he tenido muchos cargos encima y tengo que estar bien para mi hijo, trabajar y seguir ganando mi dinero para mi casa», explicó.

CONDICIONES NORMALES EN UN SISTEMA ANORMAL

De acuerdo con Garavito, a pesar de los prejuicios que existen en torno al tema mental, conductas como la de Esme la Chapina y otros ciudadanos se reconocen como “normales” en un sistema social “anormal”.

 

“Es imposible vivir en un marco de relativa tranquilidad humana cuando hay que estar pensando qué vender para agarrar un coyote e irse a Estados Unidos a ver si se resuelve la vida”, subrayó.

Para el psicólogo, de contar con un Estado que cumpla con sus funciones se tornan en comportamientos “comprensibles”.

CIFRAS VAN EN AUMENTO

En septiembre de este año, el diputado Edgar Batres, presidente de la Comisión del Menor y de la Familia del Congreso de la República dio a conocer durante un taller con diversas entidades del Estado, que las estadísticas de suicidios en el país van en aumento.

Los datos indican que actualmente se cuenta con el reporte de 51 suicidios en Santa Rosa, 33 en Jalapa, 23 en Baja Verapaz, 20 en San Marcos y 10 en Izabal; la causa principal es la ingesta de la pastilla del maíz (Fosfuro de aluminio).

El diputado Edgar Batres. Foto: La Hora / Redes Sociales

Haroldo Oquendo, de la Asociación Nacional contra el Maltrato Infantil (Conacmi), informó que el 69% de los casos ocurren en 13 departamentos, entre ellos San Marcos, Jalapa, Santa Rosa, entre otros.

Además, el 74% es de género masculino y el 16% femenino; el mayor riesgo de edad está entre los 44 a 49 años, así como entre los nueve y 14 años.

Dentro de los factores de riesgo se encuentra el consumo de bebidas alcohólicas, sustancias ilícitas, pérdida de un familiar, la no aceptación de su identidad por parte de la familia, antecedentes de familiares que se suicidan y sentirse con ansiedad o depresión.

¿Y EL ESTADO?

Ante la nula preocupación por parte del Estado, reflejada en los estudios realizados por Garavito, se desconocen las cifras exactas de suicidios y sus motivos, pero principalmente se carece de una cultura de prevención.

Según el profesional, en el país hay departamentos como Jutiapa y Jalapa, donde los suicidios son muy recurrentes, pero no existen acciones concretas para atender el fenómeno, pues solo suelen cubrirse mediáticamente los casos de puentes, aunque incluso estos son desatendidos.

“Yo que trabajo en el campo sé que los suicidios se dan mucho y muy seguido en el área rural”, agregó, pero al tratarse de áreas discriminadas y marginadas “no entran en la lógica” estatal.

MÁS ABORDAJE PSICOLÓGICO QUE RELIGIOSO

A criterio del profesional, la depresión y las tendencias suicidas deben abordarse desde la salud mental y psicológica, más que desde la perspectiva religiosa, pues esta tiende a utilizar el miedo y la culpabilidad.

Años atrás Garavito “luchó” porque se colocara una malla metálica en el puente El Incienso, ya que estas son “disuasivas” y eso permite que alguien ayude o la gente se arrepienta. Mientras que un gobierno pretendía resolver el tema colocando a dos soldados con fusiles en cada extremo del lugar.

“Con la malla los suicidios decayeron mucho, sin embargo, aún con eso la gente podía irse a tirar otros puentes, pero no lo hacían porque ese puente se convirtió en un símbolo”, recalcó.

 

Según Garavito, a raíz de que se colocó la malla se colocaron mantas pero estas “no son preventivas, son represivas”, pues desde la doctrina religiosa en lugar de educar, amenazan. En particular, en las mantas se observan imágenes de personas al borde de un precipicio a punto de caer en lo que parece ser “los fuegos del infierno”.

PREVENIR ES LA CLAVE

La propuesta de Garavito es impulsar, desde las políticas públicas, acciones de carácter preventivo, como realizar campañas masivas que expliquen qué es el suicidio y qué medidas se pueden tomar cuando alguien presenta síntomas de depresión, además de realizar una investigación científica a nivel nacional.

Asimismo, enfatiza la importancia de crear una política pública orientada a la prevención del alcoholismo, una enfermedad que “está destruyendo” al país y puede derivar en el suicidio, pero que poco se aborda.

MSPAS: ESTAMOS TRABAJANDO EN PROMOCIÓN DE LA SALUD MENTAL

Sobre lo señalado por Garavito y la Liga de Higiene Mental, de un estado al que no le preocupa la salud mental de los guatemaltecos, La Hora consultó al Ministerio de Salud y Asistencia Social, quienes aseguraron que la depresión, la conducta suicida (ideación, intento y suicidio), incluyendo el consumo de sustancias psicoactivas (alcohol, tabaco u otras drogas) son los abordajes prioritarios por medio del Programa de Salud Mental que atienden a nivel nacional.

Aseguran que se está trabajando en el proceso que garantice el acceso a la promoción de la salud mental, prevención de la enfermedad mental, atención de salud mental y apoyo psicosocial, tratamiento y dotación de medicamentos psiquiátricos y la recuperación de forma progresiva a nivel nacional, a manera de disminuir las brechas en salud mental.

Además, indican que, según etapas del curso de vida, con enfoque de derechos humanos, ahorrando a la población guatemalteca la movilización física en búsqueda de atención e incurrir en gastos para la obtención de medicamentos, centralizados en la ciudad capital, aunque no precisaron sobre los avances o cifras a detalles de este proceso.

 

La información más reciente relacionada con el tema psicológico por parte del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) data de junio de este año. Con el apoyo de la cooperación internacional, la cartera realizó una reunión técnica para la revisión y validación de la Guía Práctica para la Evaluación e Intervención de Apoyo Psicosocial y de Salud Mental en Situaciones de Emergencia y Desastres con Enfoque Multiamenazas.

Por otra parte, La Hora consultó con el ministerio las acciones más recientes que han ejecutado para atender los casos de depresión e intentos de suicidio y respondió que por medio del Programa de Salud Mental, ha elaborado herramientas técnicas normativas, dirigidas a proveedores de salud de atención directa a la población, en el abordaje a los principales trastornos mentales, especialmente ansiedad y depresión, lo que ha permitido el acceso a medicamentos psiquiátricos a nivel nacional.

Asimismo, se estructuraron normativas para la prevención y atención en las temáticas de consumo de sustancias psicoactivas, con énfasis en alcohol y las conductas suicidas, las cuales incluyen abordajes tanto para la niñez, adolescencia, adultos y adultos mayores.

LA ATENCIÓN MENTAL

La Liga Guatemalteca de Higiene Mental, es una organización privada sin fines de lucro que ofrece servicios psicológicos con costos baratos. De acuerdo con Garavito, atienden a casi 300 pacientes mensuales de forma presencial y virtual.

Durante la pandemia la institución atendió a más de 700 personas en todo el territorio nacional de forma virtual. “Se comprobó que no es que la gente no quiera ir al psicólogo, no va porque no existen psicólogos en muchas áreas o son muy caros, y el Estado no tiene atención psicológica en los hospitales”.

Finalmente, el psicólogo destaca que no solo personas con enfermedades mentales patológicas necesitan atención profesional, sino también aquellos cuyos problemas se presentan en la cotidianidad.

“El mejor síntoma de salud mental es saber que uno necesita ayuda”, concluyó. Para agendar una cita puedes llamar al 2232- 6269 o al 2238- 3739.

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