La mayor parte de la población y de la niñez vive en absoluto abandono, señaló Rodenas. Foto: La Hora / Gobierno

El director ejecutivo de la Oficina de los Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala (ODHAG), Nery Rodenas señaló que durante los 25 años que tienen de publicar el informe sobre la situación de la niñez y adolescencia, solo confirma que los guatemaltecos viven en un país enfermo.

“Los indicadores en estos 25 años del informe confirman que seguimos viviendo en un país enfermo. Un pequeño grupo en Guatemala vive bien, pero es mínimo. La mayor parte de la población y de la niñez vive en absoluto abandono. Monseñor Gerardi hubiera lamentado que a pesar de todos los esfuerzos, el Estado no garantiza unas condiciones dignas para las niñas y niños”, señaló Rodenas.

El director ejecutivo de la Oficina de los Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala (ODHAG), Nery Rodenas. Foto La Hora El País

Por lo anterior, indicó que la niñez y adolescencia guatemalteca sigue condenada a seguir sufriendo y una mejora no está a la vista, ya que el Estado no asume su rol de garante de derechos.

Cabe mencionar que la ODHAG desde 1996 inició con la investigación y denuncia, en la cual la institución ha señalado que la niñez guatemalteca enfrenta a diario maltrato infantil, abuso sexual, trata de personas, desnutrición crónica y aguda, trabajo infantil, embarazos en niñas y adolescentes, etc.

CONDICIONES DE VIDA HAN EMPEORADO

Por medio de un comunicado, la ODHAG afirmó que en el ámbito legislativo se dieron algunos avances con la aprobación de leyes, especialmente en la década del 2000, sin embargo, aseguró que la situación para los más desprotegidos y abandonados, que son el 41% de la población, no ha cambiado y para la pandemia del Covid-19 empeoró las condiciones aún más.

“Monseñor Gerardi fue una persona bastante inteligente, pero sobre todo muy humano. Él dijo: ‘Quizás no hay indicadores sociales más claros que hablen sobre el desarrollo de un país, que aquellos referidos a la niñez, en ellos se traslucen la salud o la enfermedad de un pueblo, en ellos quedan claramente reflejados los equilibrios o desequilibrios de una sociedad’”, puntualizó Rodenas.

SEÑALAN CRUZADA POR LA NUTRICIÓN INFANTIL

En el escrito, la ODHAG señaló que en el comienzo del mandato, el presidente Alejandro Giammattei, anunció eufóricamente la Gran Cruzada Nacional por la Nutrición Infantil, pero lamentablemente nunca fue una prioridad y que más bien se dio en el marco de un fuerte debilitamiento de la democracia y de la institucionalidad del país.

La responsable del programa de Derechos de Niñez y Adolescencia de la ODHAG, Ninfa Alarcón, resaltó que hoy como hace más de 20 años, Guatemala es el país con los más altos índices de desnutrición infantil crónica en Latinoamérica y en el mundo, así como en corrupción e impunidad.

 

“La corrupción mata, y mata a través de la desnutrición, a través de la violencia y por la falta de programas estatales que prioricen acciones en favor de las niñas, niños y adolescentes. La corrupción desvía todos los recursos que deberían atender las necesidades de las poblaciones más vulnerables. Hoy en día tenemos el 50% de la niñez con desnutrición crónica. En zonas del corredor seco y del altiplano la desnutrición oscila entre 70 y 90 por ciento”, afirmó.

Por ello, la ODHAG enfatizó que un Estado que crea muros para impedir un desarrollo integral de los más jóvenes es un verdugo del futuro, prolonga el sufrimiento, la violencia para la niñez y adolescencia en Guatemala.

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