La aceptación de la tarjeta de crédito en los comercios como la cotidianidad, a partir de la pandemia, de parte de los consumidores ha hecho que las transacciones y los saldos de las tarjetas de crédito vayan en aumento. Durante 2023, en comparación con el año anterior, los guatemaltecos utilizaron más sus tarjetas de crédito para realizar consumo. Esto según la Superintendencia de Bancos (SIB).
De acuerdo con la información proporcionada por la referida entidad, se reportó un incremento del 12.57% en consumos con tarjeta de crédito con respecto a 2022. Al 31 de diciembre de 2022, se contabilizaron saldos Q22 mil 217 millones en transacciones efectuadas con ese método de pago.
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Mientras que al final de diciembre de 2023, el saldo fue de Q30 mil 570 millones, lo cual representa un aumento de Q8 mil 353 millones entre uno y otro año. Lo anterior representa un aumento del 37.6% en el último año. El saldo bajo esta modalidad de financiamiento ha mantenido su dinamismo, toda vez que en 2022 aumentó 38.8%, y en 2021, 23.4%. Al 31 de diciembre de 2023, el saldo de la tarjeta de crédito representa el 9.8% del total de préstamos del sistema bancario y el 23.5% del total del crédito que los bancos destinan al consumo.
Los gastos por consumo son el tipo de deudor con mayor dinamismo en créditos bancarios del país, según la SIB.
TIPOS DE CONSUMO
Durante 2023 se registró una actividad de créditos:
Por consumo: 24.1 por ciento.
Créditos empresariales mayores: 12.9 por ciento.
Créditos empresariales menores o microcréditos: 11.2 por ciento.
Crédito hipotecario: 7.9 por ciento.
Mientras que el consumo marcó crecimientos del 25.1 por ciento en 2022 y 24.1 por ciento en 2023. Los demás tipos de deudor muestran crecimientos del 12 por ciento o menores.
En este tipo de créditos, las tasas de interés suelen ser altas. La SIB reportó tasas promedio ponderadas desde 47.8 por ciento al 51 por ciento, dependiendo del rango de monto correspondiente al consumo que realice el usuario de la tarjeta de crédito.
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