Guatemala conserva la calificación crediticia en «BB» de Fitch y Ba1 de Moody´s, que la coloca en categoría estable a nivel de macroeconomía.
La calificadora Fitch, una de las tres más importantes del mundo junto a Moody’s, puntualiza que la calificación ‘BB’ que se le concede a Guatemala está respaldada por un historial de estabilidad macroeconómica, políticas fiscales conservadoras que han resultado en un bajo endeudamiento gubernamental y una sólida liquidez externa.
Sin embargo, Fitch advierte que pese a los elementos macroeconómicos positivos del país, hay debilidades en cuanto a la gobernabilidad y un estancamiento político.
«Estas fortalezas se equilibran con una baja relación ingresos/PIB que limita la flexibilidad fiscal, indicadores de gobernabilidad y desarrollo humano que se comparan desfavorablemente con los de sus pares de la categoría ‘BB’, y un estancamiento político que limita la capacidad del soberano para abordar estas debilidades», puntualizó la entidad.
Por su parte, Moody´s resalta que los principales desafíos crediticios del país incluyen una base de ingresos estrecha debido a una gran proporción de empleo en la economía informal, la cual es de aproximadamente el 70 por ciento de la población económicamente activa.
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Asimismo, Moody´s concuerda con Fitch en que Guatemala tiene un débil indicador de gobernabilidad. La relación deuda-Producto Interno Bruto (PIB) de Guatemala del 29% en 2022 se encuentra entre las más bajas de sus pares con calificación Ba, refiere Moody’s.
Además, según los parámetros presupuestarios actuales del gobierno Moody’s sostiene que no se requerirá que se obtenga la aprobación del Congreso para nuevas emisiones de bonos este año, como se preveía anteriormente en el presupuesto de 2024, el cual quedó en suspenso en diciembre 2023 por la Corte de Constitucionalidad.
De ese modo, Moodys indica que finalizó la revisión periódica de las calificaciones de Guatemala dentro de la metodología de Moody’s, que evalúa Fortaleza Económica, Fortaleza de Gobernanza, Susceptibilidad al riesgo de eventos y Fortaleza Fiscal.
ARÉVALO ANTE UN RETO POLÍTICO
El informe de Fitch explica que el presidente Bernardo Arévalo y el partido político que lo llevó al poder, Movimiento Semilla, enfrentan un panorama desafiante de gobernabilidad.
«Su éxito a la hora de avanzar en su agenda legislativa depende de su capacidad para gestionar dinámicas complejas y fluidas en el Congreso. Arévalo puede priorizar la vía ejecutiva para cumplir las promesas de la campaña anticorrupción», explicó.
Fitch refiere que las puntuaciones de gobernanza cayeron del percentil 31 en 2010 al 25 en 2023, lo cual está muy por debajo de la mediana de sus pares de 47.
Si bien, Arévalo se centra en abordar estas debilidades, la calificadora analiza que «el progreso concreto podría enfrentar desafíos debido a intereses creados y la fragmentación del Congreso».
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Fitch también resalta que el gobierno de Arévalo está siendo beneficiado del apoyo de Estados Unidos, a través de restricciones de visas contra sus detractores y actores implicados en corrupción, aunque esto resalta algunos riesgos para la dinámica política interna de un posible cambio en la administración estadounidense después de las elecciones presidenciales de 2024.
En el caso de Fitch se considera que la calificación corresponde a una acción de calificación en la cual deja sin variación la calificación de riesgo soberano de Guatemala en BB con perspectiva estable.