Una uña encarnada puede ser molesta y hasta infecciosa, pero para eso debemos saber qué hacer y a quién acudir, la mejor opción es con un profesional que sepa del tema, como un podólogo o un médico, evite ir con manicuristas o personas que no tengan la preparación adecuada.
La uña encarnada podría tener varios factores de por qué sucede.
Según el podólogo Marvin Fuentes, este padecimiento, en su mayoría, es porque las personas se cortan mal las uñas, lo que debe evitarse.
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«Si se corta demasiado las uñas de los pies, la presión de los zapatos en los dedos del pie puede hacer que la uña crezca dentro del tejido», aseguró el profesional.
Otra de las situaciones es que el calzado apriete o haga demasiada presión en los dedos del pie, lo que puede hacer que la uña crezca dentro de la piel.
Para evitar que la situación empeore se debe diagnosticar una uña encarnada a partir de los síntomas y de un examen físico de la uña y la piel alrededor de esta.
¿CUÁLES SON LOS PASOS PARA MEJORAR?
Levantamiento de la uña
En el caso de una uña levemente encarnada, el proveedor de atención médica podría levantar cuidadosamente el borde de la uña y colocar algodón, hilo dental o una pequeña férula debajo.
Esto separa la uña de la piel que la cubre y ayuda a que la uña crezca por encima del borde de la piel, en general en unas 2 a 12 semanas.
Colocación de una venda en la uña
Con este método, el doctor separa la piel de la uña encarnada con una venda.
Se coloca una férula de canalización debajo de la uña.
Se adormece el dedo del pie y desliza un pequeño tubo con una hendidura debajo de la uña encarnada. Esta férula permanece en su sitio hasta que la uña haya crecido por encima del borde de la piel.
Extracción parcial de la uña
Para un caso más grave de uña encarnada, en donde se observe piel inflamada, dolor y pus, el doctor podría anestesiar el dedo del pie y recortar o extirpar la parte encarnada de la uña. La uña del pie puede demorar de 2 a 4 meses en volver a crecer.
Extracción de la uña y el tejido
Si tiene este problema de manera reiterada en el mismo dedo, el médico podría sugerirle extraer una parte de la uña junto con el tejido subyacente (lecho de la uña). Este procedimiento podría evitar que esa parte de la uña vuelva a crecer.
