
El incremento salarial aprobado el año pasado por el Congreso de la República para los 160 diputados ha levantado una ola de indignación en todo el país, sin que esto haya movido a los legisladores a recular en su decisión.
El 26 de noviembre de 2024, un grupo de 87 diputados avaló con su voto el presupuesto 2025 del Organismo Legislativo, que llevaba implícito un incremento del 126% de sus ingresos. La ley se aprobó al filo de la medianoche y de prisa, como queriendo pasar desapercibidos.
En esa sesión, no hubo posturas en contra de los legisladores que no votaron a favor, ni siquiera de los 23 que fueron electos por Movimiento Semilla, que no pueden integrar una bancada por que el partido se encuentra suspendido, y que en campaña ofrecieron ser una alternativa diferente, austera y transparente. El aumento se dio en medio de las negociaciones de la bancada oficialista por la reforma del artículo 82 de la Ley de Delincuencia Organizada.
El incremento salarial se concretó a finales de febrero. Cada legislador recibió por lo menos —si no es miembro de la Junta Directiva— Q66 mil —menos deducciones—, compuesto de la siguiente forma: Q46 mil 700 de salario base; Q9 mil 600, en concepto de dietas por asistir a sesiones plenarias; Q5 mil, también por dietas, pero por asistir a sesiones de comisiones de trabajo; y otros Q5 mil, por gastos de representación.
En tendencia:
La devolución que beneficia a Alejandro Sinibaldi a pesar de informes que fueron públicos y una condena
Mujer muere tras ataque armado en el kilómetro 13 de la ruta al Atlántico
Diputados de Guatemala toman la delantera en Centroamérica con el incremento recetado
Redadas en Estados Unidos ahora se enfocarán en familias migrantes y menores no acompañados
Marcha se vuelve a ensañar en contra de la San Martín en la zona 1
Con la modificación al salario, los legisladores guatemaltecos pasaron a ser los que más ganan en Centroamérica, de acuerdo con una revisión que hizo La Hora.
COSTA RICA
Costa Rica, es —ahora— el segundo país de Centroamérica donde mejor ganan los diputados. Según información de la página de internet de Asamblea Legislativa, actualizada hasta febrero de 2025, el salario bruto de un asambleísta oscila entre los 3.286 millones y 4 millones de colones, entre dietas y gastos de representación.
En quetzales, este monto equivale a unos Q60 mil 989 mensuales.
PANAMÁ
Panamá ocupa el tercer puesto. De acuerdo con reportes de prensa que citan datos oficiales de la Contraloría General de la República, los congresistas tienen un sueldo de US$1 mil 800, más US$3 mil 200 por gastos de representación; US$1 mil para combustibles y otros US$1 mil por dietas.
En total, cada uno de los 72 legisladores panameños recibe por lo menos US$7 mil al mes, unos Q54 mil, si se aplica el tipo de cambio del 7 de marzo que es de Q7.72 por US$1.
EL SALVADOR
En el caso del congreso de El Salvador, que cuenta con 60 diputados. El ingreso establecido para cada diputado, de acuerdo con el portal de transparencia de la Asamblea Legislativa, es de US$4 mil 25 por mes, los cuales se integran así: US$2 mil 311 de sueldo; US$800 por gastos de representación, y US$914 de gastos por transporte y comunicación.
En quetzales, el total representa Q31 mil 78. En el Congreso salvadoreño, el diputado que más gana es el presidente que tiene ingresos establecidos por US$5 mil 781, unos Q44 mil 629.
NICARAGUA
En el caso de Nicaragua, la Asamblea Nacional está integrada por 92 diputados. Desde 2017, mitad son hombres y mitad mujeres.
No fue posible hallar un sitio oficial en donde se detallaran los sueldos de los legisladores nicaragüenses; sin embargo, una nota de 2020 del medio Nicaragua Investiga detalla que los ingresos netos de los diputados es de 102 mil 103 córdobas, 96 mil 251 de sueldos y aproximadamente otros 5 mil 852 por combustible ya que tiene derecho a 190 galones mensuales.
En quetzales, el ingreso total de cada asambleísta es de Q21 mil 442.
HONDURAS
Finalmente, en el sexto lugar de los países centroamericanos, en cuanto al pago de sueldos a diputados se encuentra Honduras. Información oficial del Congreso Nacional da cuenta de que el sueldo para cada uno de los 128 diputados titulares para el periodo 2022-2026, es de 90 mil 892 lempiras.
En los seis países el sueldo es mayor para los miembros de la Junta Directiva, no obstante, para efectos de este trabajo periodístico se tomó en cuenta los ingresos de los diputados rasos.
CRÍTICAS
Las críticas se han dejado sentir en Guatemala, no solo por el aumento de salarios como tal, sino porque la Corte de Constitucionalidad (CC) emitió una resolución en la que decía que el ajuste salarial debía ser aprobado por el pleno.
Lo que legisladores avalaron con 87 votos, la medianoche del pasado 26 de noviembre fue el presupuesto del Organismo Legislativo, que incluía una orden para que la Junta Directiva hiciera las readecuaciones necesarias para «mejorar los salarios y retribuciones de los diputados» y que estos no debían ser menores a los de los magistrados de Salas de Apelaciones.
Luego de decretado el aumento, el diputado José Chic del partido Voluntad, Oportunidad y Solidaridad (VOS) presentó un amparo en la CC, el cual fue otorgado de manera provisional. La resolución prohibió que los congresistas recibiran indemnización, y ordenó que el incremento salarial debía ser aprobado por el pleno del Legislativo.
Pero seis de los nueve integrantes de la Junta Directiva del Congreso votaron porque no fuera así: Jorge Castro, de Visión con Valores (Viva), Jorge Ayala, de Valor, Kevyn Castillo, de Cabal, Mario Gálvez, de la UNE, Sabino Velásquez, de Bien, y José Pablo Mendoza, de Creo.

No obstante, esta decisión de la Junta Directiva podría contradecir lo resuelto por la CC, y acarrear consecuencias penales en contra de estos legisladores.
Pese a que el primer pago del aumento ya fue depositado en las cuentas de los legisladores, la CC todavía debe resolver una debida ejecutoria, acción legal presentada por la organización Acción Ciudadana, con la cual busca que el Congreso cumpla con la resolución de la máxima corte.
A pesar de que algunos diputados, como los electos por Movimiento Semilla, han dicho que donarán el incremento salarial, las muestras de rechazo aumentan día con día. Incluso se han convocado a protestas para presionar al Congreso a que desistan del aumento.
La acción ha causado especial indignación porque el incremento representa más de 15 salarios mínimos. En Guatemala la mitad de la población vive en situación de pobreza y en algunos municipios esta golpea a 9 de cada 10 personas.