David y Manuel viven en situación de calle en el Centro Histórico de la ciudad de Guatemala. Ambos consumen drogas inhalantes para sobrellevar el día a día. “Nos quita el hambre y el frío”, asegura David mientras se lleva un trapo mojado a la nariz e inhala.
De acuerdo a la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Contra las Adicciones y el Tráfico Ilícito de Drogas (SECCATID), los solventes industriales en su mayoría contienen el componente llamado tolueno que se convierte en una droga para estas personas, ya que su efecto mitiga el hambre y quita el frío a sus consumidores.
FALSA SOLUCIÓN PARA SOBRELLEVAR EL DÍA
David cumplió 33 años el pasado mes de julio. Él deambula en la zona 1 durante el día, y en la noche duerme en la calle, a una cuadra de la Emergencia del Hospital General San Juan de Dios, junto a otros siete más. “Aquí nos conocemos y nos protegemos”, señalando que es su hogar.
Ahí conoció a su amigo Manuel, un joven de 21 años, que abandonó su casa a los 16 años por violencia intrafamiliar que atribuye a su padrastro. Las manos de David y Manuel lucen resecas por los solventes que tocan todos los días para consumirlo.
El consumo consiste en mojar un trapo o “wipe” en el solvente y llevarlo a la nariz para inhalarlo. Con unas cuantas veces será suficiente para que la droga haga el efecto de quitar el hambre y el frío. “Un cuarto de pachita (botella) me la venden por Q7, eso me alcanza para casi todo el día”, detalla David sobre el precio para mitigar su hambre.
Este diario les preguntó cómo comenzaron a consumir esta droga, a lo que respondieron que fue por necesidad ante la falta de empleo para poder alimentarse a diario y además, en las temporadas de invierno les ayuda a sobrellevar las bajas temperaturas de la noche.
SU VENTA ES LEGAL
Javier Ramírez Galindo, asesor en Reducción de la Demanda de la SECCATID, explica que entre las drogas legales en Guatemala se encuentran los solventes industriales. “Deja de ser una herramienta de uso industrial y se convierte en droga cuando ya se le da el uso como tal”, explicó.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) refiere que las drogas son “todas las sustancias de origen natural o químico que introducidas al organismo alteran su funcionamiento”.
“Los dos efectos por el cual las usan es para calmar el hambre y el frío. Además, los hace alucinar. Bloquea estas sensaciones y las personas en situación de calle la ven como una solución”, indicó.
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Cientos de gentes pasan a diario a la par de estas personas que viven en vulnerabilidad, pero los reflectores de esta droga no se encienden, como lo hace la cocaína y la marihuana, las dos drogas ilegales de mayor consumo en el país, según la Encuesta Nacional de Hogares 2021.
Los solventes son las drogas más fáciles de conseguir, las más baratas, y las que afectan a las poblaciones más vulnerables tanto en la ciudad como en zonas rurales. Al no ser ilegales, están a la venta y al alcance de cualquier persona, explica el experto.
El tolueno es el principal químico que sirve como aditivo en la gasolina y demás solventes. Este se usa para hacer “mojones”, que consisten en un pedazo de tela, papel, gasa u otra fibra humedecida (mojada) con esta sustancia para inhalarla.
El artículo 4 de la Ley contra la Narcoactividad regula que “los establecimientos que se dediquen legalmente al comercio de disolventes o sustancias que puedan ser utilizadas como precursoras deberán contar con autorización del Ministerio de Salud Pública y someterse a los controles y fiscalización que este realice”.
MATA DE FORMA PROGRESIVA
El Centro de Tratamiento Ambulatorio (CTA) de SECCATID atiende de manera gratuita a personas que presentan consumo problemático de alguna sustancia psicoactiva y que acuden a la institución de manera voluntaria; además, atiende usuarios que son remitidos por otros programas de gobierno, juzgados, ONG, entre otros.
Un profesional de la salud del CTA explicó que estos inhalantes tienen una peculiaridad, los químicos con los cuales son elaborados son “polvos nanomilimétricos” que cuando entran al cuerpo se adhieren a los órganos y “difícilmente salen del mismo”.
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De esa cuenta, se producen daños en el cerebro, riñones, hígado, pulmones, boca y páncreas. “Pasa el efecto, pero ya no sale el químico del cuerpo”, refirió. Además, da problemas relacionados con el habla, como lentitud al expresarse y/o dificultad para crear oraciones.
Ramírez coincidió con lo anterior y explicó que el origen del consumo es de forma experimental, “como cualquier otra droga”, y es muy probable que antes hayan consumido “alcohol, tabaco, cocaína, éxtasis, marihuana”, pero el acceso a estas adicciones es más costoso, mientras que los inhalantes son económicos.
“Ellos no lo hacen por un consumo recreativo o experimental, lo hacen porque son dependientes de ello. Recordemos que las adicciones se controlan, pero no se pueden curar”, enfatizó el asesor de SECCATID y explicó que los solventes pueden provocar la muerte de forma instantánea por intoxicación o la más común, de forma progresiva.
“A mí me ha afectado en que se me olvidan las cosas o a veces siento que me quedo ido por varios minutos. Pero eso lo reconocí hace poco”, contó David.
CONTINÚAN SIENDO PERSONAS
“Continúan siendo personas que en un momento tuvieron sueños y aspiraciones, pero muchas veces las situaciones de sus entornos familiares o falta de oportunidades los llevaron a esta condición”, subrayó Ramírez.
David alguna vez quiso ser futbolista profesional, cuenta que le apasionaba el deporte y su papá entre sus carencias lo apoyaba con los uniformes. Sin embargo, enfermó y dejó huérfano a su hijo a la edad de 13 años. El ahora hombre de 33, no tiene familia materna.
En cambio, Manuel busca ser un profesional del derecho, él no terminó el último año del bachillerato. “Yo quiero ser abogado para reclamar injusticias que aún sufre mi hermanita de cinco años”, sostuvo.
