Un total de 23 binomios presidenciales competirán el próximo domingo 25 de junio en la primera ronda de las elecciones 2023. Si ninguno alcanza la mitad más uno de los votos válidos, los que obtengan los mayores porcentajes pasarán a la segunda votación, programada para el domingo 20 de agosto. Pese al poco tiempo que queda para definir al próximo gobernante, los partidos punteros ni el oficialismo detallan qué personas integrarían sus equipos para formar sus respectivos gabinetes de gobierno.
Ante el silencio y la indiferencia al tema por parte de las agrupaciones políticas, analistas en materia política explican la complejidad de establecer cómo se elige a quienes formarán parte del gobierno en cargos de ministros y viceministros, así como los favores y compromisos por pagar realizados en tiempo de campaña, y políticos de amplia trayectoria resumen la falta de transparencia, según las respuestas que fueron dadas a La Hora.
Los cuatro presidenciables que lideran la intención de voto, según distintas encuestas, son: Carlos Pineda, de Prosperidad Ciudadana (PC); Sandra Torres, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE); Edmond Mulet, de Cabal; Zury Ríos, de la coalición Valor-Unionista; así como el poder que el oficialismo genera a Manuel Conde, candidato de VAMOS, en ese orden respectivo.
DOS CÍRCULOS CERCANOS AL PRÓXIMO MANDATARIO
El Consejo de Ministros, también conocido como gabinete de gobierno, está conformado por el presidente, el vicepresidente y los ministros de Estado, quienes se encargan de los asuntos específicos sometidos por el mandatario a su consideración. El jefe del Organismo Ejecutivo es quien encabeza este cónclave.
De esa cuenta, el próximo presidente deberá nombrar a 14 ministros, que son personas de su confianza, quienes estarán a cargo de las distintas carteras del país. Este se definiría como el primer círculo de mando más cercano al mandatario.
Por otra parte, el segundo círculo está conformado por 56 viceministros, quienes compartirán una relación de cercanía con quien sea elegido como próximo jefe de Estado en distintas actividades.
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PROSPERIDAD CIUDADANA
Carlos Pineda, el presidenciable del partido del lápiz, se mantiene posicionado en el primer lugar de intención de voto en la contienda electoral. La Hora consultó con su equipo de comunicación ¿cuál será su equipo de trabajo?, en el caso de que resulte electo para dirigir el gobierno.
La respuesta obtenida refiere que Pineda “ha expresado en diferentes medios, que hará convocatoria para que se postulen profesionales para los diferentes puestos que existen en el gobierno, y que en un proceso de oposición se seleccione a los mejores para trabajar por Guatemala”.
UNE
De la misma forma se consultó con el equipo de comunicación social de la UNE, el cual indicó que durante las conferencias de prensa que realizan los lunes de cada semana se informará al respecto.
“Se estará realizando durante las conferencias de prensa”, respondieron, pero a la fecha el partido verde aún no da detalles con respecto al tema.
CABAL, VALOR-UNIONISTA Y VAMOS SIN RESPONDER
Asimismo, se le remitió la misma interrogante a los dos partidos punteros restantes y al oficialismo. Sin embargo, al cierre de esta nota no se obtuvo una respuesta. La consulta se realizó desde el pasado 12 de abril, y cada cierto tiempo se fue reiterando la solicitud de información.
Cabal, que promueve la candidatura de Mulet, indicó que se debía “dar tiempo” para realizar la consulta, pero no se recibió más información.
La misma situación ocurrió con la coalición que impulsa a Ríos, Valor-Unionista. “Voy a preguntar. Con gusto”, fue lo indicado, pero a la fecha no remitieron otra respuesta.
En tanto, VAMOS, que posicionó al actual presidente, Alejandro Giammattei, y busca ganar estos comicios con Manuel Conde, no respondió a la consulta, y dejó en visto el mensaje enviado por medio de WhatsApp.
UN GABINETE DE GOBIERNO PARA PAGAR FAVORES
Pablo Rangel, catedrático de la Escuela de Ciencia Política de la Universidad San Carlos (Usac), tiene claro algo que compartir esa información no es una práctica de ninguna agrupación política.
“Ningún partido que se respete ha hecho eso (compartir la integración de su eventual gabinete de gobierno) en ningún momento, por una situación puntual”, dijo.
Rangel explicó que por lo regular quienes llegan a ocupar los puestos de ministro “son personas de confianza”, pero la realidad es que utilizan los referidos cargos “para pagar favores hechos en campaña”.
¿Pero cuáles son estos favores? A palabras del catedrático universitario, entregar estos puestos consiste en saldar una deuda realizada como favor durante la campaña electoral. “Son hechos en especie, en trabajo, moviendo alianzas, y la otra es financiando al partido”, dijo.
“Se sabe de personas que han hecho aportes gigantescos a campañas políticas y que después reciben un puesto como ministros o embajadores”, recordó.
Además, el profesional indicó que en su mayoría son los mandos medios quienes mueven la administración pública y no los altos mandos. “Los ministros por lo regular tienen un desconocimiento brutal de lo que sucede en sus carteras, no tienen claridad”.
También dijo que “es poco probable que un partido político diga cuál va a ser su gabinete de gobierno con antelación, si a veces ni el mismo partido sabe”, destacó Rangel.
AÚN SE ENCUENTRAN NEGOCIANDO O NO SABEN A QUIÉN PONER
Marielos Chang, analista política, indicó que pueden ser tres las causas por las cuales los partidos políticos no contestan a la interrogante. La primera es que a la fecha no tienen a nadie para optar a los cargos. “Como en el caso de PC que va a convocar, está diciendo directamente que no tiene a nadie ahorita. Muchos partidos llegan a improvisar y a ver qué sucede si ganan las elecciones”, dijo.
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La segunda opción, a criterio de Chang, es que no existen “partidos políticos institucionalizados”. Es decir, no hay personas en su misma agrupación política que puedan optar a esos “puestos tan importantes”. Refirió que “poco o nada sirve una buena propuesta si no hay nadie que la pueda poner en marcha”.
Por último, consideró que pueden continuar negociando las convocatorias a posibles personas que optarían a dirigir los distintos ministerios, pero que no son partícipes del partido, sino personas externas. “Puede resultar bueno, malo o al azar, porque no están formados con los principios del plan o partido”.
VIEJAS FIGURAS POLÍTICAS PODRÍAN GENERAR ANIMADVERSIÓN
Jahir Dabroy, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies), consideró que el primer factor que influye en que los partidos políticos no den esta información tiene que ver con el hecho de que la ciudadanía no lo demanda.
“No hay una demanda de los ciudadanos de conocer a los equipos de gobierno, los partidos evitan presentar a sus potenciales miembros”, aseguró.
Para Dabroy, al presentar a los posibles ministros podría causar una animadversión. “Estos potenciales personajes les causaría rechazo si hubiera alguna propuesta de funcionario cuestionado, ligada a una actividad criminal o de corrupción”, sostuvo.
Además, subrayó que evitan mostrar a sus equipos por algún tipo de limitante que los partidos pudieran tener como producto de la inexperiencia o malas experiencias que se tenga de ellos en administraciones públicas anteriores.
