Amari Cooper, receptor de los Cowboys de Dallas. Foto la hora: Michael Ainsworth/AP.

Por SCHUYLER DIXON
FRISCO, Texas, EE. UU.
Agencia (AP)

Los Cowboys promedian 32 puntos y 481 yardas por encuentro, y han comenzado la campaña con una foja de 3-0, algo que no se veía desde 2008. Así, los campeones defensores del Este de la Conferencia Nacional ostentan ya una ventaja de dos juegos en su división.

Dado que Dallas ha ganado cada uno de sus partidos por una ventaja de al menos 10 puntos, el equipo se asemeja un poco más al de 2007, la única vez en los últimos 35 años que los Cowboys comenzaron con cinco encuentros sin perder. La hazaña ni siquiera fue conseguida por los Cowboys que se coronaron en tres ediciones del Super Bowl durante la década de 1990.

“Sé que he pensado que perdimos una gran oportunidad en 2007, cuando no tocamos a la puerta del Super Bowl”, recordó el dueño Jerry Jones tras la victoria del domingo por 31-6 sobre los Dolphins de Miami. “Cuando las cosas te están saliendo y todo está funcionando, de verdad tienes que apretar el paso y lograrlo. Pienso que somos tan talentosos como lo éramos en aquellas épocas”.

Hace 12 años, Dallas logró un récord de 13-3 y descansó en la primera ronda de los playoffs, antes de caer ante los Giants de Nueva York en la fase divisional. El quarterback Dak Prescott y el corredor Ezekiel Elliott lograron lo mismo como novatos en 2016, y sucumbieron en la ronda divisional frente a Green Bay.

Pero Prescott, el Novato Ofensivo del Año 2016 en la NFL, tiene ahora tres años más de experiencia, pese a que no lo demostró en un pase muy precipitado que le interceptaron los Dolphins. Y Elliott ha ganado dos títulos como el mejor corredor de la liga.

En la segunda mitad ante Miami, la defensa se pareció un poco más a la de 2018, que tuvo el mayor mérito para llevar a Dallas a los playoffs. Los Dolphins no anotaron, y consiguieron apenas 67 yardas después del medio tiempo.

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