Por: Santos Barrientos

El Fondo de Cultura Económica publicó en 2016 el libro que le da nombre al presente texto, coordinado por Paulina Rivero Weber; en el que se realiza un ejercicio arriesgado para el entendimiento de la filosofía de uno de los críticos más grandes del pensamiento moral de Occidente.

De entero se sabe la perspicacia crítica que formula el pensamiento de Friedrich Nietzsche en torno a la filosofía y doctrinas imperantes en su época. Principalmente la crítica relacionada a las orientaciones dogmáticas de la moral, comprendiendo, en su manifestación pragmática, los valores intelectuales y morales, declarando la guerra a pensamientos de la irreflexividad irracionalista. Sin embargo, también es de hacer notar que sus concepciones no parten de la reflexividad abstracta, sino que incumben a su pensamiento el pragmatismo y el dolor. El dolor como forma de abstracción del mundo vital. Un dolor no pensado sino sentido para expresar su “eterno retorno” o una vida como repetición, como pensaba en “La voluntad de poder”, al imaginarse la muerte como algo liberador, pero a la vez verse representado en la ilusión del espejo, la repetición como forma de vida. La vida dividida en la incierta, pero contemplativa, brevedad del tiempo. Y que esa brevedad se transforma en eternidad cuando se pregunta ¿qué pasaría si debiera vivirse la misma vida en otro momento? Bastaría con mirarse al espejo del alma e imaginarse. ¿El dolor sería eterno? Aunque en realidad, la idea de la eternidad nos la planteamos pensando que todo dolor es eterno. Pero aquí conviene adentrarse a esa idea de “vivir el instante como si fuera el último”.

De cualquier manera, pensar incluso en el instante conlleva a creer en la inmortalidad del momento; el instante ya es una idea cuando lo pensamos, pero que al pensar en el instante ya ha transcurrido pluralidad de momentos. El pensamiento nietzscheano es pragmático y proyecta la vida como un encuentro a sí misma. El Yo como conocimiento de lo otro. Es decir, la independencia del Ser en sí para mutar en la Nada. En el tercer tratado de la “Genealogía de la moral”, Nietzsche critica a los que creen practicar el ideal ascético y al final mantienen una creencia: la verdad. Al final del Tratado se percibe que la Nada es el ideal que se debe abrazar, pues es lo que se debe creer o en palabras del autor: “el hombre prefiere querer la nada a no querer”.

Por lo anterior, la reflexión filosófica de Nietzsche da cuenta de la realidad del ser humano ante el mundo sensible que le rodea. Mostrando los más bajos instintos que convergen en el sentimiento de la “animalidad racional”, sujetos al ente externo que nos percibe o que percibimos. Entonces, sus planteamientos filosóficos construyen al ser humano del mundo actual, la sociedad y sus contradicciones morales. La vida y la obra de Nietzsche se entremezclan. Su vida de dolor le permitió —de alguna manera— proponer ideas perceptibles y sentidas al sentirse solo ante el mundo. Es decir, su sentida vida provocó que sus pensamientos elucubraran los sentimientos más hondos de su espíritu.

Hoy, la presencia de sus obras nos transporta a través de sus expresiones fuertes, desde la inmensidad de las palabras, con imágenes certeras del mundo contemporáneo. Sus reflexiones, a veces hirientes, conducen el hilo de la transformación humana. Así, se concluye, que los pensamientos se traslucen a través de explorar la propia alma humana: de la filosofía experimental y la preocupación por la “otredad”. Friedrich Nietzsche murió el 25 de agosto de 1900. Se recuerdan los 120 años de partida.

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La teoría de occidente ante el futuro, de John Dunn
John Dunn sostiene que las técnicas con que los gobernantes actuales retienen el poder son más modernas que las utilizadas por Maquiavelo, pero se hallan concebidas en los mismos términos prepotentes de forzar un equilibrio mañoso con base en la represión y utilidad del poder mismo.

Intimidación, una guía para combatir el miedo en las escuelas, de Michele Elliot
Se centra en proporcionar a docentes métodos probados para enfrentar el creciente problema del acoso. Este práctico libro contiene secciones actualizadas en torno al apoyo entre compañeros, las actividades de clase, el ausentismo escolar, la capacidad de los maestros para lograr cambios al respecto, los efectos a largo plazo de la intimidación.

Mares de invierno, de Francesca Massai
¿Qué pasa por la mente de un niño cuando se enfada con alguien muy cercano y querido? El niño de esta historia está aprendiendo a reconocer una serie de emociones y sentimientos que surgen de su corazón, se reflejan en sus labios, explotan en sus mejillas y en todo su cuerpo cuando se enfada con su padre. Su ira se libera y aparece en forma de personajes temibles en escenarios marinos. El libro nos llevará desde el enojo más potente hasta el momento en el que todo es calma.

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