Flaminio Bonilla Valdizón
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En la historia casi 25 años, el –Movimiento Cívico Democrático– se conformó con la idea de aglutinar a los diversos sectores progresistas, que cada uno por su lado, formulaban propuestas y hacían esfuerzos por participar en la implementación de una forma política verdaderamente democrática en nuestro País y presentar a los guatemaltecos un proyecto viable de Nación.
Ahora Giammattei en su laberinto está sólo con su fachada preponte, abusivo, insolente, mentiroso y bipolar; y el Vicepresidente que no hace nada con el gobierno, los dos son totalmente derecha fascista ultranza macartismo los reaccionarios. Los sistemas: Organismo Judicial y el Legislativo tienen capturado y engrilletado al Estado, con este gobierno con impunidad, comprometido con protector y cohabitante y fiador del crimen organizado que tiene sumido al País en su más grave inestabilidad, deshonestos y rapaces políticos cometan a diarios acciones infames y vituperables contra la dignidad de todos los guatemaltecos. En política los escenarios cambian de momento a momento, pero cuando hay crisis y un casi vacío de poder por la absoluta deslegitimación, que tiene Giammattei vivimos entre oscuridades y sombras.
El Presidente está tan inepto y estúpido, sin carente de inteligencia hablo de un -Golpe de Estado-, y quiso hacer una trampa abyecto y burdo, que seguramente los militares con su trasfondo revela una concepción macabra de la doctrina de la seguridad nacional. El mismo Giammattei está acusación contra el Estado de Guatemala, porque que se ha cometido fue un Crimen de Estado, una política nacional con el Ministro de Gobernación Gendri Rocael Reyes Mazariegos y Policía Nacional Civil (PNC) con agentes del Estado –vestidos de negro y con unos bates con mangos de goma y punta de metal- agentes de la Fuerzas Especiales de la de la Policía. Con mayor indignación porque ahora viviendo bajo una dictadura como autoritarismo policial y criminalización de la protesta social, con la represiva que vulneró hasta los cimientos a la institucional de este débil y resquebrajado edificio institucional; este es el sarcasmo y patraña, decir que fue un Golpe de Estado. Por ello debemos surgieron coyunturalmente movimientos multisectoriales, pluralistas, no totalmente ideológicos, de amplia participación con una Asamblea Plurinacional Constituyente con la Sociedad Civil, con un proyecto político-ideológico una represente socialdemocracia con las grandes adalides popular que encarnan las mejores tradiciones revolucionarias de la historia guatemalteca. Con una movimiento democrática ciudadanos representativos con organizaciones campesinos, obreros, sectores académicos, sindicales, pueblo maya, estudiantes con intelectuales de avanzada sectores sociales, sectores culturales, grupos humanitarios, organizaciones campesinos, de entes políticos no comprometidos, organizaciones cívicas etc.
Con instancias todas estas que practicaron la democracia real y lograron arribar a consensos y al planteamiento de alternativas y soluciones a diversos temas de la problemática nacional. Necesitamos una renacimiento de la verdadera organización popular y respetado en el país y el inicio del rescate de la dignidad para el Pueblo de Guatemala, con una estructura real de gobernabilidad con gobernanza surgimiento de esa nueva opción. Con “ante coyuntura actual y con objetivos comunes, surge el Movimiento Universitario”, forma organizaciones de estudiantes de la Universidad –USAC-, de la Universidad –URL- y de la Universidad del Valle de Guatemala –UVG-. Los ciudadana debemos analizábamos dentro de ese movimiento cívico político, pero no enquistarse grupos tradicionales y sujetos poco recomendables que tienen un pasado muy comprometido con la negra historia de esta Nación. Y ello porque algunos dirigentes del movimiento siguieron con la tradicional forma de hacer política, violando compromisos y acuerdos tomados consensualmente. Así las cosas, quienes si respetan acuerdos y buscan una forma honesta de hacer política toman decisiones sobre su participación y tener un líder sin personalismos y protagonismos, pero busca un «mejor destino para Guatemala«.
Este movimiento deberá es multisectorial, pluricultural, eminentemente pluralista, no ideológico, en el cual se arribó a consensos conciliando intereses políticos e ideológicos para estructurar un proyecto de Nación. Un movimiento amplio con asistencia cívica de actores sociales no comprometidos con el pasado, que planteó una forma de buscar acuerdos sobre la base de la participación y el consentimiento, en la búsqueda de encontrar la gobernabilidad del País con la concertación de todos esos sectores sociales. Se busca formular un proyecto de Nación concreto, participativo, orgánico, definido, serio. Una alternativa real y creíble para arribar a estadios sociales en donde la fuerza y la represión no mantengan la bandera que a través de décadas han tenido, porque los sectores progresistas han estado siempre desarticulados y confrontados, por ello hemos sufrido gobiernos con corruptela e impunidad con venalidad y represivos.
Se trata de alcanzar un proyecto de Nación en donde todos los actores sociales que han sido relegados en el pasado, implementen una estructura para articular a nuestra inorgánica y fragmentada sociedad. Si se quiere seguir en el oscurantismo y en el negro pasado, eso que lo busquen los grupos tradicionales y los conservadores, aquellos que seguirán con el conservadurismo de aceptar el Poder Real, el poder oculto, al inquilino de piedra del Palacio Nacional: el poder militar y el poder del gran capital.
Debemos desterrar de las estructuras de poder y decisión a todos aquellos que por décadas han saqueado, desangrado y degradado a la nación guatemalteca. Debemos crear una forma política que organice las fuerzas dispersas de la comunidad, para llegar a vertebrar el cuerpo informe de la sociedad guatemalteca.
Hombre y mujeres de Guatemala, tenemos una actitud posibilita la izquierda democrática. Para muchos con quienes hemos analizado de las fuerzas verdaderamente progresistas del país, y nunca más «mano peluda y con cachucha«, de aquellos que siempre han comprado voluntades y conciencias. Queremos en Guatemala otro 1944-1954 con “Los Diez años de Primavera”.
La Hora.
Diciembre de 2020.
