La lamentable situación provocada por la enfermedad que afectó al magistrado Neftalí Aldana Herrera ha provocado la reacción de la cúpula empresarial del país que llama a resolver rápidamente el tema de la integración completa de la Corte de Constitucionalidad, misma que en pocos días ha sufrido dos importantes bajas, la del magistrado Bonerge Mejía Orellana y ahora la de Aldana, quien sufrió un accidente cerebrovascular. Y destacamos la petición empresarial porque la misma se produce luego de apañar la resistencia del Congreso a integrar el resto de las Cortes del país, tema que no les preocupa tanto porque en esas Cortes no se resolverá nada que les pueda afectar, mientras que la CC no se ha plegado a sus intereses y ahora puede pasar a estar, absolutamente, bajo el control de las fuerzas que coordinaba Gustavo Alejos para elegir magistrados “apalabrados”.
El pleno de la Corte de Constitucionalidad se integró el pasado fin de semana para conocer la solicitud que hace la familia de Aldana Herrera para que oficialmente se le suspenda de sus funciones por la especial condición en que se encuentra. La Ley de Amparo, Exhibición Personal y Constitucionalidad regula la forma en que ante la ausencia de algún magistrado se tiene que integrar el pleno y al momento, entre titulares y suplentes, la CC tiene tres bajas, la de los titulares Mejía y Aldana, además la de la suplente Consuelo Porras, quien pasó a prestar un servicio más útil a ciertos sectores del país en el Ministerio Público. La CC se tiene que integrar por cinco magistrados para la mayoría de los casos que conoce y eventualmente por siete en las condiciones específicas estipuladas por la ley.
De suerte que para actuar y resolver la Corte de Constitucionalidad no está desintegrada de conformidad con la ley y tanto el Colegio de Abogados como la Corte Suprema de Justicia deberán proceder a designar a quienes sustituyan a quien falleció (Mejía), a quien renunció (Porras) y al incapacitado por enfermedad (Aldana), proceso que se tiene que realizar con apego a lo que establece la legislación que regula la materia.
Por supuesto que es importante que la CC quede integrada y ello a pesar de que las nuevas designaciones rompan el equilibrio que hubo en esa instancia durante los últimos años, tema que es lo que más interesa a los que han cuestionado el papel de la CC como último valladar para atajar el plan del Pacto de Corruptos y que saben que ahora pueden acabar con ese obstáculo.
