Walter Juárez Estrada
Soplan vientos muy fuertes que atrás del antejuicio que declaró con lugar la Corte Suprema de Justicia contra el Vicepresidente Guillermo Castillo, podría estar un alto funcionario del gobierno con quien el vice gobernante ha tenido distanciamiento y se pone a prueba de qué lado están los diputados a quienes corresponde decir si desafora al ex gerente de la Cámara de Comercio.
Giammattei tiene carácter irritable y a como dé lugar quiere imponer sus decisiones que no son compartidas por sus ministros, máxime en los actuales momentos cuando el país está sumergido en una crisis con la pandemia que ha dejado secuelas imborrables en los guatemaltecos, especialmente los que prematuramente han fallecido y médicos no reciben un salario justo, a pesar que están en “primera línea” y varios han muerto.
Extraña que los magistrados de factos de la CSJ hayan tramitado el antejuicio contra Castillo. Las acciones contra el alto funcionario fueron promovidas por el abogado Nimrod Estévez González, que podría ser un testaferro, que incrimina al imputado la comisión de hechos que el sindicado dice son espurios y asienta en su defensa, que nombro interinamente a una profesional en la jefatura de Senabed, que llenaba los perfiles y preocupa que el tribunal, haya dado tramite a la petición cuando en 6 ocasiones con prueba tasada ha rechazado antejuicios contra el diputado Felipe Alejos, al ex presidente Jimmy Morales… Es aquí, donde se sospecha que fuerzas muy poderosas del ejecutivo podrían estar manipulando tras bambalinas desaforar al ex gobernante, aunque Giammattei dijo “que se sorprendió” de la acción de su compañero de fórmula.
La política en Guatemala ha llegado a corromperse con los pactos de corruptos que siempre buscan acomodarse y acoplarse a las decisiones de quienes tienen el control de los organismos del estado. Los diputados tienen la responsabilidad de hacer un análisis objetivo si Castillo es culpable. En la legislatura pasada no se dio trámite a quien fue una “caricatura de gobernante”, a pesar que habían pruebas en su contra, quien aceleró su incorporación al Parlacen, para gozar de inmunidad.
En el correr de los meses que Giammattei dirige el país, varios sectores lo cuestionan. Eso le ha valido que su perfil de aceptación se haya derrumbado y es aconsejable que de la cara y diga si él esta atrás de la maniobra para enjuiciar al vicepresidente. No estamos haciendo una defensa oficiosa de Castillo a quien conocimos en el pasado, en la incursión en los tribunales, cuando fue magistrado. Es aberrante que el presidente se haya valido de un tercero para buscar la forma de separarse de quien dice ser “su amigo”. Esa división entre los altos jefes del Ejecutivo si es verdad lo que se ha dicho, no es la primera vez que hay pugna entre funcionarios de alto rango, al no compartir cómo se dirige la tambaleante nave del Ejecutivo.
El Presidente lucha por desaforar a magistrados de la CC, al procurador de la PDH y una CSJ a su entorno… se escuchan pisadas de dictador… La CC amparo a Castillo y suspendió el antejuicio provisionalmente.
