Jorge Santos

Los pueblos que habitan los distintos territorios de esta República desde hace mucho tiempo han impulsado muchas resistencias y luchas encaminadas a construir una Nación que nos permitan vivir en dignidad y bajo lógicas muy distintas a las que históricamente nos han impuesto.  Sin lugar a dudas, estimo que la enorme mayoría de la población que salió a manifestarse durante 5 meses del 2015, lo hicieron con la esperanza puesta en la transformación de las Instituciones, del Estado en su conjunto y poder vivir en paz y dignidad. Y es que los recientes eventos en el país, nos dan muestra que construir una Nueva Nación requerirá de vastos y muchos esfuerzos ciudadanos y populares que impliquen provocar el cambio y la transformación de la Nación.

Cuando el miércoles se filtra la información de la visita de Jimmy Morales a Nueva York, con la intención de reunirse con el Secretario General de las Naciones Unidas, para solicitarle la destitución del doctor Iván Velásquez, Comisionado de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) se destapa una situación que aunque de conocimiento público, se hace muy evidente la lógica impune y corrupta del actual gobierno de FCN-Nación y de los actores cercanos a Jimmy Morales. Y es que a diferencia con los hechos que culminaron con la renuncia y captura del expresidente Otto Pérez Molina, es que a Jimmy Morales la ciudadanía con su voto le otorgó el mandato de encabezar las Reformas que requería este país, como una garantía de no repetición, sin embargo no fue así.

La gravedad de los hechos alrededor de esta pretensión de hacer culminar el mandato del Comisionado Iván Velásquez a mi juicio está en las siguientes consideraciones.  Primero, aunque el proceso electoral estuvo revestido por todo aquello que rechazamos en la plaza durante nuestras manifestaciones en 2015, la población tuvo a bien elegir a quien en su consideración representaba la posibilidad de encabezar el proyecto de transformación, sin embargo esta aspiración fue profundamente traicionada por Jimmy Morales y su partido político.  Fue traicionada en el momento en la que se constituye la “juntita militar” que como un cuerpo paralelo incide y toma decisiones que no les compete.  Traiciona desde el momento en el que su bancada se alimenta de los actores del Partido Patriota y Lider.  Traiciona las posibilidades de transformación del Estado cuando su partido político es el gran obstáculo para las Reformas Constitucionales.

Segundo, Jimmy Morales y FCN-Nación se constituyen en otra estructura criminal que asume el poder público y lo pervierte para la garantía de privilegios y la defensa de los intereses de sus financistas y de poderes ocultos.  Y es que la decisión de viajar a Nueva York trae detrás la intención de volver a colocar un manto de impunidad sobre los casos ya conocidos y los que sin lugar vienen en adelante.  De esa cuenta, es que los Pueblos y las y los ciudadanos conscientes debemos tener claro, que la construcción de una nueva Nación requerirá de todos nuestros esfuerzos en materia organizativa de lucha en las calles.

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