Edith González.

“Un héroe lo es en todos sentidos, ante todo en el corazón y en el alma”.
Thomas Carlyle
Ensayista inglés

“El Cambray II”, Santa Catarina Pinula, Guatemala, uno de octubre un escenario de tragedia, muerte, dolor y cargas sentimentales inolvidables ante un alud que bajó del cerro y arrasó con las viviendas y sus moradores, permanecerá en la mente de muchos guatemaltecos
Hombres y mujeres se convirtieron en héroes, que hora tras hora fueron poniendo en práctica su conocimiento sobre el rescate y abonando con sus lágrimas los escenarios de la muerte. Bomberos Municipales, Voluntarios, Municipales Departamentales, soldados, policías, personal de Conred, llegaron en el cumplimiento del deber, de acuerdo a la filosofía de su institución.
Al final de la jornada, cuando los cuerpos y restos de los habitantes del lugar habían sido rescatados, estos héroes del silencio se doblegaron ante la realidad que les ha tocado vivir, en el cumplimiento del deber. Al final de cuentas, ellos también son seres humanos.
Osman Roel Gaitán, un coronel forjado en la magnitud de las misiones diversas del ejército, ahora comanda la Unidad Humanitaria de Rescate, (UHR), que se involucró en las labores de búsqueda, rescate y evacuación de las víctimas de la tragedia de “El Cambray II”.
Durante estas operaciones su personal pudo rescatar 37 cadáveres de todas las edades. Hombres, mujeres y también mascotas que se encontraron a veces despedazadas por el brutal impacto del alud.
Este duro militar, ahora, guarda en su memoria una imagen que le impactó al igual que a su personal, en una de las tantas salidas al aérea del conflicto.
Fue como ver una imagen del surrealismo, comenta. Sentados en un sofá de lo que era la sala, de lo que fue una casa, un joven hombre y una joven mujer, en apariencia estaban viendo televisión cuando sobrevino la tragedia. Encontramos sus cuerpos. Y cuando las lámparas de mano alumbraron la escena… Al lado izquierdo de la mujer, estaba muerto un perrito y al lado derecho del varón, un segundo perro muerto. La pareja, estaba abrazada entre sí y con las manos libres sostenían a las mascotas.
Todo el grupo quedó sobrecogido. Silencio. Nadie dijo nada. A más de alguien se le rodó una lágrima. El equipo se reunió y elevó una oración luego, seguir con las labores fue la consigna
El general Bor Illescas, que ahora mantiene su despacho en la zona de “El Cambray II”, tiene la certeza que el ejército ha cumplido con una misión. “Fue una misión cargada de sentimientos encontrados, del nada saber en las primeras horas del desastre, pero con la mística del ejército, su profesionalismo y la innegable entrega de los hombres y mujeres que visten el uniforme militar se puede decir MISIÓN CUMPLIDA.
Mientras tanto, en los Bomberos Municipales Departamentales el  bombero Wilson Estuardo García Per, integrante de la Patrulla Especial de Rescate, expresa que esta tragedia no se compara con ninguna otra atendida por lo que junto a sus compañeros, continúan duramente impactados.

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