Luis Fernando Bermejo Quiñónez

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Lic. Luis Fernando Bermejo Quiñónez
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Continuo con la serie de columnas donde relato nuestra historia política de los últimos 30 años donde busco ayudar al lector hacer memoria de los actores políticos del pasado, del presente y meditar su voto adecuadamente. En semanas anteriores abordé, el gobierno del PAN (1996-2000), el gobierno del FRG (2000-2004, el gobierno de la GANA (2004-2008), el gobierno de la UNE (2008-2012) y la semana pasada el gobierno del Partido Patriota (2012-2016). En esta abordo el gobierno de Jimmy Morales, como Presidente, y a Jafeth Cabrera, como Vicepresidente del Partido FCN-Nación en los años 2016 a enero 2020.

Como se recordará, en el frenesí de la lucha contra la corrupción desatado por el caso La Línea de abril 2015, Jimmy Morales de la nada apareció como candidato presidencial con su lema “Ni corrupto, ni ladrón”. El descontento de la población con los partidos políticos tradicionales y aunado a la campaña del “No le toca” contra Baldizón que se apreciaba posiblemente como el próximo presidente, llevó a la población a votar por Jimmy Morales, un “outsider” del sistema político corrupto que estaba desmoronándose frente a todos con cada caso de la CICIG y Ministerio Público (MP). Lo cierto es que en 2ª vuelta el binomio de Jimmy Morales venció a Sandra Torres con el 65.48% de los votos frente a los 34.52% que obtuvo el binomio de la UNE.

A nivel del Congreso el Partido FCN no logró mayoría en el Congreso, sino en cambio su bancada fue de 11 diputados. Las demás fuerzas políticas del Congreso representadas fueron Líder con 44 diputados, 36 de la UNE, 18 de Todos, 17 del PP, 7 de Encuentro por Guatemala, 6 de la Unión del Cambio Nacional (UCN), 5 de VIVA, 5 de la coalición CREO-Unionista y luego los siguientes partidos tuvieron 3 diputados, URNG, Convergencia, Partido Unionista y el PAN. FCN-Nación, al igual que los 3 gobiernos anteriores, continúo la tendencia de gobernar sin mayoría parlamentaria. Cabe mencionar que a pesar que fue crítico del transfuguismo en campaña, lo primero que hizo Jimmy Morales al empezar a gobernar fue aceptar en su bancada a todos los tránsfugas de Lider, PP y otros partidos afectados por el embate CICIG-MP.

Jimmy Morales inició su gobierno como un paladín anticorrupción. Apoyó al inicio decididamente a la Comisión. De la misma forma, apoyó con fuerza las reformas constitucionales del sector justicia que promovió el Ministerio Público (MP). Sin embargo, posteriormente dejó a la deriva esas reformas cuando le restó el apoyo al MP-CICIG.

Del gobierno de Jimmy Morales es poco lo que se puede destacar en materia de políticas públicas. Con poca experiencia e inmerso en un proceso convulso de lucha contra la corrupción en el cual no había actor político que no estuviere involucrado en actos cuestionables, su gobierno fue poco efectivo e incluso sufrió de una cuasi-parálisis del sector público en el 2016-2017 derivado a que ningún funcionario quería asumir responsabilidad para no ser sujeto de acusaciones posteriormente. Cada semana había un “Jueves de CICIG” distinto y el ambiente en la esfera política era de miedo e incertidumbre. Esto sin duda afectó la forma de funcionar el Estado en esa época.

Pero Jimmy Morales dejó de apoyar los esfuerzos anticorrupción. Poco a poco a medida que las acciones del MP-CICIG fueron tocando cada vez más actores, el poder de la Comisión en determinados casos fue perdiendo valor estratégico. Así las acusaciones contra el hijo del Presidente Jimmy Morales, aunado a la presentación de acusaciones contra Álvaro Arzú en el Caso Caja de Pandora, hizo de estos aliados para deshacerse de la Comisión. El alcalde de la Ciudad de Guatemala aglutinó a una generalidad de actores en torno a expulsar a la CICIG que no se había logrado anteriormente. Así alió al Presidente, al Congreso y a empresarios importantes en torno al esfuerzo de promover y financiar la expulsión de la Comisión, incluso con esfuerzos de lobby a nivel de la Administración Trump y congresistas republicanos. El empecinamiento del Gobierno de expulsar la Comisión – su única política de Estado – poco a poco ganó adeptos en Mariscal Zavala, en sectores militares y en sectores empresariales que se vieron amenazados y, aunado, a la tardía reacción en promover una continuidad de CICIG pero la remoción “ordenada” de Iván Velasquez, hizo que lo que en retórica era “remover a Iván” se tornara en expulsar la comisión y lo demás es historia. La CICIG, creada en la época de Berger con beneplácito del sector empresarial para contrarrestar las “mafias” militares que ascendieron al poder con el FRG, había llegado a su fin con el concierto de esos sectores antagónicos ahora “reconciliados”, se cerró el círculo.

En el ámbito de apoyo legislativo, es importante destacar el fracaso contundente de las reformas constitucionales al sector justicia. Inicialmente apoyada por el Presidente, Corte Suprema de Justicia y MP, diversos sectores reconocían y reconocen que dicha reforma es necesaria, pero la Comisión, alegan unos, hizo “oídos sordos” a las sugerencias efectuadas en el proceso y al rodearse de ciertos grupos de apoyo introdujo “Caballos de Troya” como el derecho indígena y la pluriculturalidad que causaron que sectores conservadores y no conservadores ejercieran una oposición férrea a la misma que, aún al ser retiradas por los sectores que buscaron incluirlas, ya habían desgastado el apoyo hacia las reformas en general. La Comisión al ir perdiendo poder político en Guatemala y en Washington comenzó a naufragar en sus esfuerzos de reformar el sector justicia y al final fracasó.

Lo cierto es que el 70% de apoyo en la población a la Comisión según una encuesta de CID-Gallup se fue volviendo “menos vocal” como en el 2015 o cuando aprobaron las leyes del “Pacto de Corruptos” y en el ínterin de septiembre 2017 a septiembre 2018 la plaza se vació. En el 2018 cabe mencionar que Thelma Aldana no corre para reelegirse como Fiscal General y resulta electa por Jimmy Morales la actual Fiscal General, Consuelo Porras, de la cual se han ido cuestionando mucho sus actuaciones desde su nombramiento.

Hoy el ex Presidente Morales corre como candidato a diputado por lista nacional de FCN-Nación. De los miembros de su Gabinete se puede mencionar que Sandra Jovel, su Ministra de Relaciones Exteriores, es candidata a diputada en la 1ª casilla por el Distrito Central en la coalición Valor-Unionista. Lo mismo Enrique Degenhart, su Ministro de Gobernación, quien corre en la 2ª casilla. Los dos anteriores fueron actores claves del esfuerzo por expulsar la CICIG y afectar su actuación. De la misma forma el ex Ministro de Finanzas Públicas de Jimmy Morales, Julio Héctor Estrada, es candidato a diputado por el listado nacional del Partido Cabal en la 1ª casilla.  Asimismo de la bancada de FCN-Nación de ese entonces, hoy corren como candidatos a diputados Javier Hernández (por FCN-Nación) y Patricia Sandoval (candidata a diputada por el Partido Humanista por Jutiapa). De otras agrupaciones políticas se puede mencionar de la UNE a Carlos Barreda y Oscar Argueta de la UNE (hoy vinculados al Partido Vos), Haroldo Quej diputado de Alta Verapaz (hoy vinculado al Partido Cabal) y a Carlos Santiago Nájera (candidato a diputado por Todos). De la misma forma Manuel Conde fue parte de esa legislatura por el partido PAN y ahora es candidato a presidente por el Partido Vamos.

Con esto finalizo la serie de columnas sobre gobiernos anteriores. Este esfuerzo iba encaminado a que los lectores pudieran identificar en la historia política reciente los actores relevantes que hoy, nuevamente, están pidiendo el voto y que reflexionen sobre ello. Es importante estar informado para ejercer el voto de forma responsable. El voto es un derecho que se ha ganado pulso a lo largo de la historia. Si bien han existido cuestionamientos del proceso electoral, lo cierto es que se quiera o no, se elegirán autoridades. ¡Votemos mejor!

 

 

 

 

 

 

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