Factor Méndez Doninelli
Guatemala, 19/11/2021.
También quedan fuera Honduras y El Salvador dos países que junto con Guatemala integran el llamado Triángulo Norte, así mismo Bolivia, Venezuela, Cuba, Nicaragua y Haití. El mandatario estadounidense Joe Biden, será el anfitrión de la Cumbre por la Democracia que los días 9 y 10 de diciembre próximo, reunirá por conexión virtual a Gobernantes, Jefes de Estado, líderes de sociedad civil y empresarios para abordar temas sobre, Defensa contra el autoritarismo. Lucha contra la corrupción. Avances en el respeto por los derechos humanos (DD.HH.)
Siendo que los tres ejes de dicha cumbre son democracia, defensa de DD.HH. y lucha contra la corrupción, es de suponer que el imperio hegemónico del Norte ve a los países excluidos como Naciones con Gobiernos autoritarios, violadores de DD.HH. y plagados de redes de corrupción e impunidad.
Por cierto, estas últimas tres categorías autoritarismo, irrespeto a DD.HH. y corrupción, son características que se cumplen en Guatemala, por eso no extraña que aparezca en el grupo de países indeseables, ausentes por decisión del Gobierno estadounidense.
Como bien lo dice el adagio popular más claro no canta el gallo, los gringos marcan distancia, envían mensajes contundentes, precisos y progresivos, acompañados de acciones políticas, económicas y diplomáticas que incluyen retiro de visas, avisos públicos, embargo de bienes y depósitos bancarios, inclusión en la lista Engel, denuncias públicas contra Gobernantes, ministros, Fiscales Generales, Jueces, Magistrados, Diputados, empresarios, suspensión de cooperación y asistencia técnica, hasta excluirlos de la cumbre citada.
No sorprende entonces que Guatemala quede fuera, pues el Gobierno de EE,UU., ya ha inhabilitado a guatemaltecos tales como ex funcionarios públicos, jueces, diputados, políticos y hasta a la Fiscal General, Consuelo Porras citada en la lista Engel que como se sabe, incluye a quienes se considera comprometidos en actos de corrupción, obstrucción a la justicia o anti democráticos.
Para el Gobierno estadounidense esta cumbre es, “…una oportunidad para poner en marcha compromisos e iniciativas sobre tres ejes que van desde la defensa frente al autoritarismo, el combate a la corrupción y la promoción del respeto a los derechos humanos.”
En contraste, un cable de la agencia Xinhua fechado en Moscú el 12 noviembre 2021, informa que el Gobierno ruso califica a la cumbre como, “…otro instrumento quimérico dirigido a mostrar que Occidente tiene una agenda constructiva y de consolidación, pero una agenda de consolidación debe incluir medidas prácticas concretas, no solo especulaciones teóricas que acabarán en otro escándalo,” así lo indicó la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, María Zakharova durante entrevista en el canal de televisión Rossiya-1.
Zakharova agregó que “Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) saben que no sería correcto formar otra coalición militar después de sus fracasos incompetentes en Irak, Libia y Afganistán. Pero algo de escala global que infunda un sentido de unidad en el mundo occidental podría funcionar,» sostuvo la funcionaria.
| Por su parte, Sergei Lavrov, Ministro de Relaciones Exteriores ruso manifestó que,
“Al organizar la cumbre, Washington tiene el objetivo de dividir a los países en “democracias” y “no democracias,” luego en democracias “plenas” y “condicionadas.”
Lo único cierto es que esta decisión para los países excluidos entre ellos Guatemala, significa aislamiento internacional y la imagen de tener Gobiernos autoritarios, corruptos y violadores de DD.HH.
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