La dirección de Epidemiologia y Gestión de Riesgo del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), por medio de un webinar, informó sobre los efectos y acciones de las altas temperaturas, acompañado de una serie de recomendaciones para prevenir los golpes de calor.
La actividad estuvo dirigida por la comunicadora del MSPAS, Linda Puente, junto al ingeniero Ricardo Rivas, del departamento de prevención de riesgo a la salud, y el médico internista Luis Nájera, del Hospital General San Juan de Dios.
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La reunión se realizó en seguimiento a la información proporcionada por el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología de Guatemala (Insivumeh), tras indicar que durante mayo se continuará con ambiente muy cálido, soleado y elevadas temperaturas máximas que oscilan entre los 30 a 40 grados Celsius, a nivel nacional.
RECOMENDACIONES
Durante la actividad, Rivas emitió una serie de recomendaciones para evitar golpes de calor, destacando las siguientes:
Por su parte, el doctor Nájera, expresó que el bloqueador solar se ha recomendado para prevención y protección, pero para prevenir el golpe de calor, este producto no tiene mayor incidencia.
Además, explicó que un golpe de calor, es un sobrecalentamiento en el cuerpo que causa temperaturas muy altas y que entre los tratamientos que se realizan al atenderlo están quitarle la ropa al paciente, disminuir la temperatura con agua tibia y hacer uso de ventiladores de forma directa.
SINTOMAS
El médico destacó que durante un golpe de calor, los primeros en identificarlo son las personas alrededor y los principales síntomas son:
- Temperatura alta de hasta 40.5 grados Celsius, acompañado de alteraciones neurológicas
- Pulso acelerado
- Respiración acelerada
- Presión baja
Asimismo, mencionó que la diferencia entre un golpe de calor y fiebre es la graduación de la temperatura.
TIPOS DE GOLPES
Nájera mencionó que hay dos tipos de golpe de calor, entre los que destacó el «Espontáneo», presentado en pacientes que no realizan esfuerzo físico, pero con enfermedades cardiovasculares o neurológicas, entre otras, y el «No Espontáneo», presentado en pacientes que hacen esfuerzos físicos.
Sin embargo, explicó que en ambos casos se observan los mismos síntomas y no existe varianza entre ellos.
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