POR JOSÉ PABLO DEL ÁGUILA
jaguila@lahora.com.gt

El juez Mynor Moto, titular del Juzgado Tercero de Primera Instancia Penal, quien ha sido severamente criticado por la sociedad civil y por el tándem Ministerio Público-CICIG, pasará a dirigir en las próximas semanas la Asociación de Jueces y Magistrados del Organismo Judicial (AJMOJ). Fuentes del OJ entrevistadas dieron a conocer cuál es la trascendencia de esta agrupación.

Moto fue electo el pasado fin de semana como presidente de la AJMOJ. Su trayectoria jurisdiccional ha sido criticada porque en múltiples ocasiones ha beneficiado con sus fallos a funcionarios sindicados de corrupción.

Entre los funcionarios que han sido favorecidos por Moto están la exdiputada Mirza Arreaga, el exalcalde Arnoldo Medrano, el diputado Orlando Blanco y la jueza Marta Sierra de Stalling, sindicada en el Caso Bufete de la Impunidad.

Un juez que fue consultado, pero que pidió no ser citado para evitar problemas, explicó que la AJMOJ es un “pedestal para que a los jueces los vean” porque es la Asociación que representa a jueces y magistrados en congresos y eventos nacionales e internacionales, además de tener la atención mediática para hacer pronunciamientos públicos.

Según el entrevistado, la AJMOJ es una agrupación “presidencialista”, esto quiere decir que la decisión de a qué jueces se apoya o qué postura se asume en torno a un determinado tema queda a discreción del Presidente. “No es un cuerpo colegiado en donde una Junta Directiva discuta, las decisiones las toma el Presidente”, dijo.

Asimismo, la notoriedad que otorga la presidencia de la AJMOJ hace que la Asociación sea utilizada como “bungie” para poder saltar a una magistratura de Corte de Apelaciones, Corte Suprema de Justicia o incluso de Corte de Constitucionalidad, comentó.

Entre quienes han ejercido la presidencia de la AJMOJ está la actual presidenta de la CC, Dina Ochoa y la magistrada de la Sala de Apelaciones de Mayor Riesgo, Anabella Cardona.

Otra funcionaria del Organismo Judicial explicó que el Presidente de la AJMOJ tiene un mayor acercamiento con autoridades de la Corte Suprema de Justicia, por lo que está en mejor posición para pedir medidas de seguridad o atender las necesidades de los jueces. Sin embargo, dijo, este acercamiento privilegiado podría ser utilizado de manera arbitraria y prestarse a favoritismos.

PLAN DE TRABAJO
Moto comentó que centrará sus esfuerzos en la capacitación constante, profesional y objetiva de jueces y magistrados. Dijo que buscará mejores condiciones para los jueces de paz ya que, a menudo, atienden videoconferencias en los centros de privación de libertad.

Además, aseguró que gestionará apoyos para los jueces de instancia y de paz suplentes para que se les brinden viáticos cuando, en ejercicio de su función jurisdiccional, se tengan que desplazar dentro del territorio nacional.

El juez tercero también fue consultado sobre las críticas que se le hacen por sus fallos. Sobre esto, comentó que como servidor público siempre estará sujeto al escrutinio social y dijo estar consciente que, con frecuencia, se le ha señalado de ser parte del Pacto de Corruptos. Al respecto, comentó:

“(Dicen) que el juez es del Pacto de Corruptos o de Impunidad, pero no se trata de eso. Solo es una resolución judicial y si la misma está motivada, fundamentada y explicada, a los sujetos procesales no les queda otra salida que acudir al debido proceso y tratar de revertir ese fallo”, comentó.

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