Por Denis Aguilar
daguilar@lahora.com.gt
Los médicos del Comité Ad Hoc anunciaron hoy un endurecimiento de su postura en la atención de los pacientes debido a que no se han alcanzado acuerdos en la dignificación salarial que están exigiendo al Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS). En tanto, el titular de esa cartera, Carlos Soto, advirtió sobre consecuencias legales por dichas medidas.
Ante la negativa del MSPAS, los médicos del Hospital General San Juan de Dios y el Hospital Roosevelt anunciaron una paralización total de los servicios, a excepción de la emergencia, afuera de la sede del Ministerio de Salud. Además, hicieron un llamado para que los hospitales del interior del país se sumen a la medida adoptada hoy.
“Acabamos de decidir atender única y exclusivamente las emergencias, quedan cerrados los demás servicios”, aseguró Zagreb Zea, integrante del Comité de Médicos Ad Hoc, que está exigiendo la dignificación salarial para los profesionales de la salud.
“Pedimos el apoyo de todos los hospitales departamentales, todos los centros de salud y de todos los centros regionales, por favor que se unan al apoyo”, agregó Zea.
A decir de Zea, “El Sistema de Salud está de luto porque las autoridades, empezando por el Presidente y el Vicepresidente que no se han preocupado por el Sistema de Salud a lo largo de este período que llevan, entonces creemos que no nos prestan la atención debida.
Ante la situación de los dos hospitales grandes del país, los médicos aseguraron que las personas que requieran atención médica pueden acudir al área de emergencia, la cual es la única que estará en funcionamiento.
MINISTRO ADVIERTE
El titular de la cartera de Salud, Carlos Soto, advirtió a los médicos sobre las consecuencias legales que puede conllevar la paralización de los servicios y aseguró que esto no se trata de una amenaza a los médicos.
“Esta es una advertencia clara, no es intimidatoria, no es amenazadora, es una advertencia clara; si algún paciente fallece porque no se le atiende, yo sí me voy a preocupar y ocupar realmente, a que esa persona que no atendió al paciente se vaya presa”, dijo Soto.
Soto enfatizó que tomará esas medidas no importando las consecuencias contra él mismo y aseguró que “ningún salario vale la vida de un paciente”.
“Si ellos están tocándole aquellas cosas al león, ojo, porque no pueden estar jugando con la vida de la gente”, mencionó Soto. “Yo no estoy en contra de ellos, pero sí me puedo poner en contra”, agregó.
El funcionario explicó que las peticiones de los médicos se salen de las condiciones presupuestarias, ya que se requerirían al menos 1 mil 690 millones de quetzales para otorgarles el aumento correspondiente a ochos salarios mínimos.
Soto denunció que estudiantes de medicina que realizan prácticas en los hospitales han sido manipulados para adherirse al movimiento de los médicos, algo que los galenos negaron rotundamente.
