Rostros de desesperación, molestia y resignación. Es un cúmulo de emociones el que se observa desde temprano en los pasillos de la Torre de Tribunales.
Es una escena que se repite día tras día, aunque se mantiene la esperanza que «por arte de magia los elevadores funcionen» y se pueda llegar a tiempo a las judicaturas en los pisos más altos de la Torre.
Sin embargo, la realidad es otra. La semana pasada la noticia fue abrumadora, porque un letrero, escrito a mano, anunciaba: «Ascensores fuera de servicio».
Esto significaba una peregrinación por las gradas desde los sótanos y planta baja de la Torre. En el mejor de los casos, hasta los pisos tres y cuatro, donde se concentra la mayoría de juzgados de primera instancia penal, pero en otros, llegar hasta el 14 y 15, donde están los juzgados de mayor riesgo.
Este no es un problema reciente. El dilema de los elevadores inició en 2014, cuando las autoridades de turno decidieron cambiarlos, ya que los anteriores eran anticuados.
Por esa razón se dio inicio al proceso de renovación, que termina con la adquisición de los actuales aparatos.
Único ascensor funcional de Tribunales falla y crece temor de complicaciones
Algunas personas que ya no laboran en el Organismo Judicial (OJ) aseguran que, aunque se hizo una inauguración de esos elevadores, lo nuevo realmente eran en realidad las cabinas, pues el esquema interior seguía siendo el antiguo, pero este extremo nunca fue confirmado por alguna autoridad.
Lo que sí se comprueba es que, a pesar de la modernidad de los nuevos ascensores, luego de cinco años, comenzaron a fallar.
Desde puertas que no abren, que «se traban», hasta quedarse detenidos a mitad del edificio de 26 metros.
CAMBIO POR Q10 MILLONES
Estas fallas llevaron a que la Corte Suprema de Justicia (CSJ) en 2019 buscara un cambio en el sistema mientras las quejas iban en aumento y el sistema empezó a colapsar.
Fue tanto que uno de los cuatro elevadores se fundió ese mismo año. A la fecha, ese aparato no se pudo recuperar.
En ese momento, se inició un proceso de licitación para la adquisición de nuevos elevadores por un monto de Q10 millones, que incluía la compra de 12 a distribuirse entre la Torre de Tribunales, el Palacio de Justicia, el edificio Jade y el Centro de Justicia de Escuintla.
Esa licitación la ganó la empresa Técnicas Globales S.A., quienes debían desmontar y colocar los nuevos elevadores, que según la CSJ, presidida por Silvia Valdés, se iba a pagar contra entrega.
El problema es que en 2020, con la pandemia de covid-19, los trabajos se paralizaron, tanto por las restricciones, como la cancelación de los embarques, que impidieron, según la empresa, el traslado de los materiales para colocar los ascensores.
Fue en 2022 que el OJ rescindió el contrato. El organismo se quedó sin elevadores nuevos y con un problema más grande, porque quedó un foso sin elevador y dos aparatos más con serios problemas para funcionar.
NUEVA ADQUISICIÓN.
En 2023, nuevamente se hace una licitación, pero esta vez, una por cada centro que necesitaba cambiarlos.
Para la Torre de Tribunales se hizo un evento nuevo. Se adjudicó el trabajo a la empresa Elevadores OTIS, por un monto de Q7.8 millones.
Según el contrato, esa compañía debe cambiar, primero, dos elevadores, para así no dejar de prestar el servicio a la población y luego los otros dos restantes hasta finalizar la entrega.
Sin embargo, el mal estado de los elevadores restantes, no permiten el servicio eficaz que necesita el edificio público.
PARA DICIEMBRE
En reiteradas ocasiones, el todavía presidente del OJ, Óscar Cruz, afirmó que estaban agilizando los trabajos para que los ascensores estuvieran listos en diciembre de 2024, aunque esta magistratura ya no estuviera para hacer la entrega.
Según el calendario que ofreció la empresa OTIS, los dos elevadores que al momento están trabajando, estarían listos en febrero de 2025.
Posteriormente, se iniciará con el desmontaje de los otros dos ascensores en marzo de 2025 para finalizarlo en diciembre.
UNO FUNDIDO Y OTRO A MEDIA CAPACIDAD
De los dos elevadores que funcionan en la Torre, uno ya no es utilizable. En agosto pasado, y tras dos fugas de agua que afectaron el sistema eléctrico del aparato, y que averiaron el sistema de movimiento, este quedó fuera de servicio totalmente.
#AhoraLH l El único elevador que funciona en la Torre de Tribunales sigue colapsando. Constantemente ocurre esto y deja atrapados a usuarios del Organismo Judicial. Las autoridades prevén que para diciembre estén instalados dos ascensores.
📹: Cortesía pic.twitter.com/qdWhYsWTK3
— Diario La Hora (@lahoragt) October 9, 2024
Esto ocasionó que solo un elevador funcione y que al sobrecargarlo presente los mismos problemas que hace 10 años.
Los usuarios se quedan varados a medio edificio, o el sistema ya no responde, al grado que no queda más remedio que caminar para llegar a las judicaturas, según se ha podido constatar.
A pesar de que los usuarios urgen una solución al problema, las autoridades refieren que todo queda en manos de la empresa que tiene a su cargo el cambio, quienes a su vez indican que trabajan los 7 días de la semana para entregar lo más rápido posible al menos dos de los cuatro elevadores.
PALACIO MODERNIZADO
Pero mientras la Torre de Tribunales sufre del traslado de jueces, trabajadores, usuarios y reos a las diferentes judicaturas, la historia es diferente en el Palacio de Justicia, sede de la Corte Suprema.
En este lugar, está por cambiarse un tercer ascensor, mientras que al descubrir la existencia de un foso ya construido, se colocó un nuevo aparto, mientras que el de carga ya fue cambiado.
Así mismo, esto incluye el elevador privado de los magistrados, del que al momento se desconoce si ya fue cambiado.
Estos trabajos, según el sistema Guatecompras, tuvieron un costo de Q2.9 millones.
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