Debido a la alerta que se tiene ante la cercanía al país de miembros de los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación al territorio guatemalteco, el Ejército de Guatemala en conjunto con la Policía Nacional Civil (PNC), han redoblado la seguridad en las fronteras de San Marcos y Huehuetenango que colindan con ese país.
Desde el 21 de septiembre, los pobladores reportan fuerte cantidad de elementos policiales y militares en las fronteras guatemaltecas, mientras que las autoridades informaron sobre el aumento de fuerzas de seguridad, durante el fin de semana, esto debido a un aumento de actividad de estos grupos en estados de México, como Chiapas.
El marte 26 de septiembre, el Ejército, el Consejo Nacional de Seguridad y el jefe del Estado Mayor, William López Chay, viajaron al área para realizar supervisiones en el sitio. López Chay, según una nota de La Hora, no ha sido removido de su cargo pese a que ya cumplió su tiempo de servicio en la institución castrense.
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CUMPLIÓ TIEMPO DE SERVICIO
La nota de La Hora: “Giammattei aún no cambia a jefe del Estado Mayor y levanta cuestionamientos”, detalla que el cambio que no se ha dado, ha generado cuestionamientos en contra del presidente Alejandro Giammattei.
La nota explica que, López Chay superó el tiempo de servicio el pasado 21 de junio y según confirmó el vocero del Ejército, Rubén Téllez, lleva 33 años de servicio.
“De acuerdo con el artículo 84 de la referida normativa, existen 12 circunstancias que hacen que los oficiales superiores y oficiales subalternos causen baja. La primera es haber llegado al tiempo de servicio y la segunda, cumplir la edad de retiro”, cita la nota.
En su momento, el Ejército señaló que la remoción de jefe del Estado Mayor, “lo decide el Presidente de la República”.
Giammattei aún no cambia a jefe del Estado Mayor y levanta cuestionamientos
VISITA OPERATIVOS EN FRONTERA
El 26 de septiembre, Wiliam Arnulfo López Chay, jefe del Estado Mayor y el representante del Consejo Nacional de Seguridad, Héctor Orellana, empezaron su visita en la frontera de Huehuetenango y se desplegarán hacia la frontera de San Marcos, para dar seguimiento a los procedimientos que se realizarán en el lugar.
“Esta visita busca obtener información de primera mano, por parte de los comandantes de las unidades responsables, sobre la situación de seguridad en el área”, resaltó Rubén Téllez, vocero del Ejército.
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AMENAZA DE CÁRTELES
Desde la semana pasada, las autoridades guatemaltecas han reforzado la seguridad en las fronteras con el vecino país, con 50 mil agentes adicionales a cada una de las fronteras, para el resguardo de las áreas, debido a una alerta por el ingreso de cárteles mexicanos a territorio guatemalteco.
Los patrullajes se realizan en los municipios de La Democracia, Huehuetenango, y Ayutla, San Marcos, lo que ha dado como resultado una reducción de la criminalización. Las fuerzas de seguridad estarán en el lugar durante tres semanas.
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REFUERZAN FRONTERAS
El Ministro de Gobernación, informó que PNC continúa con el desarrollo de operativos de seguridad y prevención en puntos estratégicos de San Marcos y Huehuetenango, “como parte de la lucha frontal contra el narcotráfico y el crimen organizado”
Según indicó el ministro Napoleón Barrientos, “desde la implementación de estos operativos se reporta cero incidencia criminal donde se realizan las acciones conjuntas con la PNC y el Ejército de Guatemala”.
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Asimismo, destacó, que durante los operativos, “se han incautado más de Q100 mil, drogas y armas de fuego, entre otros objetos ilícitos”,
Asimismo, el titular de la Cartera del Interior afirmó que, hasta el momento, “no hay amenaza de ingreso de presuntos narcotraficantes mexicanos al país y continuarán con estos operativos estratégicos el tiempo que sea necesario para garantizar la seguridad de la ciudadanía y prevenir el ingreso de ese tipo de estructuras criminales al territorio”.
Mientras que el Ejército de Guatemala, informó que “se destinaron alrededor de 400 soldados a Tacaná, a solicitud de las autoridades locales, por supuestas amenazas de un posible ingreso de miembros de cárteles mexicanos para tomar control de esa región.
