Por Lourdes Arana
lcarana@lahora.com.gt
Este lunes se llevará a cabo la audiencia de primera declaración de Ángel Raúl Reyes Arias de 18 años y de Douglas Estuardo Cuéllar Quesada, de 24 años, dos de las personas capturadas en la manifestación del pasado 28 de noviembre y a quienes puede observarse en videos y fotografías quemando el bus de Transurbano a un costado del Palacio Nacional de la Cultura.
La Fiscalía de Distrito Metropolitano del Ministerio Público (MP) dio a conocer que al momento de la aprehensión de Ángel Reyes se le incautó un encendedor, el cual, podría haber sido utilizado para provocar el incendio de la unidad de transporte. El MP le imputa a Reyes Arias los delitos de incendio agravado y atentado contra otros medios de transporte.
Ángel Reyes Arias, reconoció abiertamente haber participado en la quema del autobús el pasado sábado.
Lea: El Gobierno acusa al PDH de no mediar con turba que actuó sin intervención policial
“Sí, lo quemamos porque queríamos ver y para que se comportaran los policías, para que nos dejaran de estar fregando”, indicó.
Reyes Arias aseguró que no se infiltró en la protesta y que vende dulces en el sector, aseguró que nadie les pagó por prenderle fuego a la unidad de transporte.
Ayer La Hora relató el pasado de este joven en la nota “Ángel, detenido ayer en manifestación, tenía 20 días de haber salido de un hogar de SBSP”.
DIJO SER MALABARISTA EN LAS CALLES DEL CENTRO HISTÓRICO
Por otro lado, Douglas Estuardo Cuéllar Quesada, de nacionalidad hondureña, indicó que trabaja como malabarista en las calles del Centro Histórico y que los agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) le habían pegado a uno de sus compañeros con quienes trabaja por lo que quisieron “tomar un poco de acción en parte”, como represalia en contra de los uniformados.
Lea: Ángel, detenido ayer en manifestación, tenía 20 días de haber salido de un hogar de SBSP
El MP le imputa tres delitos, incendio agravado, atentado contra otros medios de transporte y atentado contra servicios de utilidad pública.
LOS HECHOS
Entrada la noche del sábado 28 de noviembre, cuando miles de manifestantes estaban por retirarse de la Plaza de la Constitución, un grupo de encapuchados llevó un bus de Transurbano a un costado del Palacio Nacional de la Cultura, en donde luego de destrozarlo con palos, le lanzaron una bomba casera con la intención de incendiarlo; sin embargo, socorristas sofocaron las llamas.
Minutos más tarde ese mismo grupo, arremetió contra semáforos de la Sexta Avenida y calles siguientes, lanzaron toda clase de objetos a la Casa Presidencial, hicieron pintas con aerosol en el Palacio Nacional, agredieron a policías, periodistas y otros civiles, y nuevamente al autobús fue incendiado.
