El 27 de septiembre se confirmó que, por disposición del Ministerio de Educación (Mineduc), los graduandos del 2021 quedarán exentos de la evaluación sumativa general. Este será el segundo año consecutivo sin realizar la prueba a nivel nacional, la cual es utilizada para conocer el panorama de la educación en el país. Verónica Spross de Empresarios por la Educación lamentó esta decisión y opinó que la situación educativa nacional no se conocerá mientras la pandemia continúe.
La medida del Mineduc fue tomada con base en la protección de los estudiantes ante la pandemia; además, el semáforo de alertas sanitarias establece que un municipio en rojo no podrá optar por clases presenciales ni realizar actividades que impliquen aglomeraciones en un espacio cerrado, por lo cual no se podrá realizar la evaluación de graduandos.
SE DESCONOCE EL ESTADO DE LA EDUCACIÓN DURANTE LA PANDEMIA
La directora ejecutiva de Empresarios por la Educación detalló que la prueba a los graduandos es actualmente una medida para conocer las destrezas y dificultades en el sistema educativo; sin embargo, resaltó que desde antes de la pandemia existía una brecha en el aprendizaje. La última evaluación (2019) reflejó que el 37.03% de los evaluados obtuvieron los resultados esperados en la prueba de lectura y solo el 13.56% en matemáticas.
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Esta problemática, según Spross, fue agravada con la introducción de la pandemia. “Con la pandemia, a nivel internacional y los estudios del PIB reflejan que probablemente se esté dando menos aprendizaje que antes de la pandemia. Los resultados que podrían esperarse seguramente reflejarían las dificultades que se han tenido para continuar los procesos educativos porque a distancia no es lo mismo que teniendo presencialidad”, expuso.
Asimismo, comentó que la situación es bastante compleja y “la situación real de los aprendizajes no se va a saber sino hasta que concluya la pandemia”.
LAS ALTERNATIVAS DEBEN CONTEMPLAR DISTINTOS PERFILES
Reconoció que la pandemia ha tenido un gran impacto en la mayoría de los municipios, por lo cual pocos establecimientos han podido operar bajo la modalidad híbrida. Consiguientemente, Spross opinó que deben crearse alternativas para la educación y su proceso de evaluación.
La directora de Empresarios por la Educación enfatizó que en Guatemala existen distintos perfiles de estudiantes y aún en el 2021 hay quienes no cuentan con un dispositivo electrónico o conectividad. “Hay muchas dificultades para llevarla a cabo –la prueba de evaluación– porque no todos los estudiantes tienen tecnología aún en el país ni conectividad. Hay que hacer otras formas de evaluación que no sea la misma medición como se venía realizando de forma universal”, expresó.
En ese sentido, la profesional planteó que se pudo realizar la misma evaluación, pero en formato digital, o bien, mediante una muestra de alumnos por aula o grado.
LAS DOS ALTERNATIVAS DEL MINEDUC
El Mineduc a través de la Dirección General de Evaluación e Investigación Educativa (Digeduca) ha generado dos pruebas: una evaluación diagnóstica de graduandos y la prueba TER. Aunque aún no se conocen las medidas de ambas, Spross comentó que será indispensable conocer los resultados de las pruebas, ya que es una de las pocas métricas disponibles en la pandemia.
La prueba diagnóstica será realizada por cada establecimiento acorde a su disponibilidad y contempla destrezas en matemática y lectura, por lo cual, según la analista, podría ser una herramienta útil para conocer el status de la educación.
“Hay que ponerle atención ahorita a la evaluación diagnóstica que el Ministerio de Educación está promoviendo que se realice y esto es un instrumento que va a permitir distinguir si los estudiantes cumplen con las destrezas y competencias esperadas por grado. La prueba TER también es una herramienta que permite ir midiendo cómo están las competencias de los estudiantes”, sostuvo.
UNA CULTURA DE EVALUACIÓN
Por último, la directora de Empresarios por la Educación describió que es necesario inculcar una cultura de evaluación, la cual debe incluir alternativas que se acoplen a las dinámicas actuales. “Creo que a raíz de la pandemia es importante saber que la forma de evaluación tiene que cambiar; actualmente, expertos señalan que lo importante es que la evaluación sea de tipo formativo e identifique los vacíos que hay en el desarrollo de destrezas, para así ayudar a los estudiantes”, señaló.
Esta cultura de evaluación debe identificar las destrezas que faltan en desarrollarse y proponer soluciones con base en los hallazgos. “No se ve fácil, pero hay herramientas como videos de YouTube, Khan Academy, pero tenemos que hacer un esfuerzo como país para que los estudiantes tengan acceso a la tecnología”, agregó.
Adicionalmente, vio como factor importante la cooperación interinstitucional con universidades. Spross planteó que se podría consultar con las casas de estudio sobre los procesos de nuevo ingreso, ya que a partir de los resultados se puede conocer el nivel de preparación de los individuos al salir del diversificado.
Asimismo, podría tomarse en cuenta el aporte de la Asociación de Colegios Privados. “Recordemos que la mayoría de los graduandos son de instituciones privadas, ellos tienen sus propias evaluaciones y sería interesante conocer los resultados”, concretó.
