POR HEDY QUINO
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Tras conocerse que el Ministerio de Finanzas no estuvo en la discusión de la readecuación presupuestaria 2021, la cual anunció en cadena nacional el presidente Alejandro Giammattei, distintos tanques de pensamiento han expresado su preocupación sobre esta situación; señalan que existen asuntos políticos de por medio.
AC: INTERESAN MÁS LAS NEGOCIACIONES CLIENTELARES
Manfredo Marroquín de Acción Ciudadana, indicó que esta situación no es extraña del Gobierno, ya que se ha caracterizado por ser desordenado y que no se coordina con los ministerios, lo cual evidencia que no se ve el rol del Presidente, puesto que una de sus funciones es mantener la coordinación. “Por eso no extraña que todo salga mal: la aprobación del presupuesto y la readecuación presupuestaria, cada proceso que sale es malísimo, por la ausencia de liderazgo y coordinación”, apuntó.
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Marroquín también resaltó que esta situación pone en evidencia que al Presidente le interesan más las negociaciones con los diputados que los aspectos técnicos que conlleva el presupuesto.
“Darle más espacio a la negociación clientelar de los diputados, es evidente que al Presidente le molestan los aspectos técnicos, porque él quiere manejar discrecionalmente todo, ahí viene mucho los choques que tiene con los equipos, no respeta los procesos técnicos, y se siente muy cómodo con un Congreso que aprueba cosas sin rigor técnico y con total discrecionalidad”, afirmó.
ASIES: ¿CON QUIÉN ESTÁ TRABAJANDO?
Para Luis Linares de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies), el hecho de que el Presidente no tome en cuenta al Ministro de Finanzas para el presupuesto, demuestra que hay un desorden en el Gobierno.
“No recuerdo un antecedente de este tipo, puesto que este asunto le compete al Ministerio de Finanzas, se supone que el Presidente debe resolverlo en conjunto con el ministro o darle instrucciones al ministro, pero no tomar la decisión a espaldas de él, es un hecho que evidencia que hay concentración de poder de decisión en el Presidente y no el de trabajar junto con sus ministros”, enfatizó.
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El consultor de Asies agregó, que de esta situación también surgen las interrogantes: “¿con quién está trabajando?, ¿con quién está haciendo este tipo de modificaciones?, ¿con quién está haciendo los arreglos presupuestarios sino lo hace con el ministro de Finanzas?”
“La parte presupuestaria es algo complejo que requiere de soporte técnico, ¿con quién lo está haciendo?, ¿está tomando decisiones en forma personal o con personas que no son parte del Ministerio de Finanzas?, como que el Presidente prescinde del Ministerio de Finanzas”, concluyó Linares.
ICEFI: HAY UNA DECISIÓN POLÍTICA OSCURA
En tanto, Ricardo Barrientos del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI) explicó, que el Ejecutivo está manejando dos números, un techo legal de Q107 millardos y uno operativo de Q94 millardos, lo cual no es transparente, por ello, lo ideal es que se haga una reducción a través de una aprobación en el Congreso.
“Ellos están diciendo que tiene una autorización para gastar de Q107.8 millardos y nos aseguran que van a gastar Q94 millardos; primero porque solo esos fondos tienen y segundo porque esa es la decisión del Presidente, pero eso no es transparente, todos los estándares internacionales dicen que el presupuesto que el gobierno tiene la intención de ejecutar tiene que ser el que dice la ley”, detalló.
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Esta situación deja entre ver que hay una decisión política de por medio, la cual es, no llevar el presupuesto al Congreso, para que se ajuste, añadió el entrevistado.
“El presidente no ha sido honesto ni transparente en decir cuál es la razón de esa decisión política: esto es porque ha llegado a un acuerdo con los diputados aliados, para no reducir el aporte extraordinario de más de Q600 millones que esta para los Consejos Departamentales de Desarrollo o teme que al llevar el presupuesto al Congreso se lo van alterar como lo hicieron en noviembre de 2020, entonces quiere evitar alguna manipulación maliciosa por parte de los diputados, hay dos formas de verlo, pero, por qué no dicen la razón real por la cual no quiere que vaya al Congreso”, subrayó
“Esa es una decisión política oscura, que es opaca, y no han podido explicar. La literal d) del artículo 171 de la Constitución, ahí dice claramente que el techo presupuestario solo lo puede modificar el Congreso”, afirmó Barrientos.
FINANZAS NO PARTICIPÓ EN READECUACIÓN
Ayer, en una citación de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), el viceministro de Finanzas, Edwin Martínez, dio a conocer que el Ministerio de Finanzas no participó en los ajustes al presupuesto 2021 que anunció la semana pasada en cadena nacional el presidente Alejandro Giammattei.
“Tal vez fue un equipo de la Presidencia, desconozco quienes lo integran, al ministro le dieron una información el miércoles, le dieron un juego de cuadros”, dijo Martínez.
En otra citación de la UNE, del 28 de enero, el ministro de Finanzas Álvaro González Ricci declaró que hubo un error en la redacción del comunicado emitido por la Presidencia en el que anunciaba que el techo presupuestario 2021 será de Q94,354 millones, ya que este se mantiene en Q107 mil millones.
