Por Grecia Ortíz
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El analista y director estratégico de Diestra, Rodolfo Mendoza, explicó en un texto porqué considera que ahora hay más municipios en rojo, los casos en ascenso en el tablero de alertas, asegurado que tiene relación con el hecho que no se aumentan significativamente el número de pruebas a nivel nacional, añadiendo que por eso es muy fácil que muchos municipios se califiquen en rojo, aunque tengan pocos casos.
Además, el tablero de alertas se basa en un sistema de punteo que va desde el 2.5 hasta 10 para cada municipio, eso significa que de esos diez puntos posibles, 6 se relacionan directamente a la cantidad de pruebas que se implementa, así que el color del semáforo llega depender más de la gestión del gobierno en aumentarlas, que de la responsabilidad ciudadana para que no crezcan los casos.
Mendoza añadió, en un texto compartido en su cuenta de Facebook, que de acuerdo con el tablero son 66 municipios los que se añadieron a la alerta máxima, para hacer un total de 206, eso significa el 60 por ciento de municipios en el país y de esos 66 nuevos municipios en rojo, 20 eran color amarillo hace 15 días, así que escalaron dos peldaños de una vez.
Por otro lado, destaca que 29 municipios que estaban en color rojo dejaron de estar allí y que como más municipios subieron a rojo de los que se restaron, el saldo que se tiene es de 37 municipios más en alerta máxima.
Sobre lo anterior, el director estratégico de Diestra dice que al hacer un análisis salta a la vista la incidencia en el número de pruebas al calificar cada municipio, y que por lo general la forma más rápida de bajar de rojo a anaranjado, es ampliar la cantidad de pruebas y que al descender a amarillo si es indispensable bajar aún más los casos.
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EL CASO DE CHUARRANCHO
Como ejemplo, menciona a Chuarrancho, el único municipio del departamento de Guatemala que dice está en color naranja y que ayuda a ilustrar cómo se baja de color, en ese lugar explica que anteriormente se hicieron sólo 10 pruebas a pesar de que en dos semanas se encontraron tres casos.
Pero en las últimas dos semanas, se aumentaron 6 pruebas más para totalizar 16, y el resultado fue que se detectaron otra vez 3 casos.
Eso, de acuerdo con Mendoza, permitió que la calificación de positividad bajara de 30 por ciento a 18.7 por ciento, y por lo tanto descendió de color rojo a anaranjado.
“Gracias a que hicieron 6 pruebas más ahora las iglesias del lugar pueden iniciar servicios religiosos regularmente y los restaurantes pueden duplicar su aforo en las mesas de forma legal. ¿Me estas siguiendo? Seis pruebas más en catorce días determinaron un cambio en la actividad económica de muchos”, destacó Mendoza desde su cuenta de Facebook.
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DEBERÍAMOS LLEGAR A MÁS DE 16 MIL PRUEBAS PARA QUE ALERTAS DESCIENDAN FAVORABLEMENTE
Por eso enfatiza en que si se aumentaran las pruebas a nivel nacional y los casos se mantuvieran igual como ocurrió en Chuarrancho, muchos municipios descenderían del color rojo al naranja inmediatamente.
Destacó que actualmente se realizan unas cuatro mil pruebas diarias en todo el país, pero según los indicadores del semáforo “deberíamos llegar a 16,800 para que las alertas municipales descendieran favorablemente”.
Sobre el municipio de Guatemala, el analista dice que a pesar de que ya van siete semanas en las que se ha visto el descenso de casos, aun nos mantenemos en rojo porque las pruebas en vez de aumentar se han estancado.
“Durante 14 días se hicieron 12,509 diagnósticos, pero si se hubieran implementado unas 300 más al día, hoy estaríamos en anaranjado. No hemos descendido de color porque el gobierno ha sido incapaz de ampliar la cantidad de diagnósticos, no porque los ciudadanos hayan sido irresponsables”, anota Mendoza.
En el caso de San José el Ídolo, Suchitepéquez, el analista explicó que estaba en amarillo porque se hicieron 9 pruebas con un sólo positivo, pero ahora subieron de alerta porque se hicieron 16 pruebas y encontraron 6 casos.
Esta es la misma situación de Chinique, Quiché, que al realizarse pruebas por primera vez se encontraron 3 casos en dos semanas, por lo que pasó de amarillo a rojo.
“Así es como llegamos al crecimiento de municipios en color rojo, por la combinación de dos fenómenos. Por un lado hay municipios que han visto bajar sus casos drásticamente, como la capital, Mixco, Villa Nueva o Escuintla”, señaló Mendoza.
HAN SIDO INCAPACES DE AUMENTAR EL NÚMERO DE PRUEBAS
Mientras, expone hay otros municipios “pequeños” que registraron unos cuantos casos, y los indicadores los dispararon a color rojo porque no hay suficientes pruebas para mantener la positividad baja.
“Si esta inercia continúa, es probable que en quince días el Presidente vuelva a decir que vamos a la baja en casos, pero muestre un mapa pintado de rojo. Todo porque el gobierno ha sido incapaz de aumentar razonablemente el número de pruebas en un sistema que no hace sentido para muchos guatemaltecos”, afirmó.
Ayer en cadena nacional. el presidente Alejandro Giammattei, mostró una curva de casos a nivel nacional y destacó que ha descendido por siete semanas consecutivas, tendencia a la que Mendoza se ha referido en repetidas ocasiones.
La misma, a decir del analista, se refleja también en el porcentaje de pruebas positivas, en la ocupación hospitalaria y en los fallecidos diarios.
