17 niños o adolescentes han desaparecido a diario este año; ¿Cuáles son las causas?

En promedio 17 niñas, niños o adolescentes fueron reportados desaparecidos solo en los primeros 46 días del 2022, agravando el flagelo de la desaparición de los menores en Guatemala que continúa imparable.

Según el reporte de la Unidad Operativa del Sistema de Alerta Alba-Keneth, de la Procuraduría General de la Nación (PGN), del 1 de enero al 15 de febrero del presente año, se recibió el reporte de 795 niños o niñas, adolescentes desaparecidos, de los cuales 107 son niños o niñas de 0 a 4 años y 109 adolescentes.

De ese total, al 15 de febrero habían sido localizados 420 menores, mientras 375 siguen con paradero desconocido.

El año pasado el promedio diario de desapariciones fue de 20 menores, de acuerdo con el registro oficial de 7,303 en el año, de los que finalmente 5,106 fueron ubicados, mientras 2,197 lamentablemente no tiene información.

El año pasado el promedio diario de desapariciones fue de 20 menores, de acuerdo con el registro oficial de 7,303 en el año. Foto La Hora.

El reporte estadístico 2022 y 2021 de niños, niñas y adolescentes de Alertas Alba – Kenneth, muestran los datos:

 

 

 

 

En total 375 niños, niñas y adolescentes están sin localizar durante lo que va del 2022, de los cuales 244 son niñas y 131 niños.

Mientras que el 2021 culminó con 2,197 niños o niñas, adolescentes, que siguen sin ser encontrados o sin regresar, de los cuales, 662 niños o niñas de 0 a 4 años continúan sin ser localizados.

Los 5 departamentos que predominan con más alertas activas:   

 

FACTOR DE DESAPARICIONES: MANIPULACIÓN Y ENGAÑO

Erik Maldonado, director jurídico del Refugio de la Niñez, institución que cuenta con centros de atención especializada a víctimas de violencia sexual, explotación y trata de personas comentó que para esa institución es de mucha preocupación el alto número de casos Alba Keneth que fueron activados durante el 2021, y además darse cuenta que en el presente año continúa con la misma cantidad de desapariciones.

Agregó que entre las principales causas de desaparición de los adolescentes es la vulneración de los derechos, distintas formas de violencia que han padecido en su núcleo familiar que los ha llevado a tomar una decisión. Además de las vinculaciones afectivas puede ser por migración y migración interna de las áreas rurales a las urbanas.

Erik Maldonado, director jurídico del Refugio de la Niñez, institución que cuenta con centros de atención especializada a víctimas de violencia sexual. Foto La Hora / Emisoras Unidas.

También hizo mención de las causas estructurales como pobreza, miseria, marginación y que no hay un desarrollo económico y social.

Ante la situación de que los niños huyen de la violencia de sus hogares, comentó que caen a una situación de vulnerabilidad, no se cuenta con un sistema social de protección integral; algunos pueden ir a otras comunidades o relacionarse con organizaciones al margen de la ley.

Así como en algunos casos han sido engañados o manipulados para ser explotados de forma laboral, sexual y llegan al Refugio con alerta activada.

ESTRATEGIAS UTILIZADAS PARA ENGAÑAR A MENORES

Sobre las estrategias de engaño utilizadas para extraer a los menores de edad de sus hogares, Maldonado explicó que les hablan de ofertas económicas y ellos, en su inexperiencia se dejan atraer, siendo llevados a una ubicación laboral de servicios domésticos, como dependiente en un centro de comercio donde son explotados.

También señaló que muchas veces estos engaños se dan a través de las redes sociales y no solo para explotación sexual, sino otras formas como trata laboral.

Dado que durante el año pasado en los niños de 0 a 4 años predominó en cantidad de desapariciones. Foto La Hora.

Maldonado aclaró que cuando los jueces les entregan a los menores de edad, el Refugio lleva a cabo un proceso de investigación con lo cual muchas veces han comprobado que los agresores son los progenitores, volviéndose un caso más complejo por lo que deben buscar otro recurso familiar.

Además, hay casos en donde los progenitores no son agresores; sin embargo, han caído en negligencia por lo que ellos intervienen con acompañamiento de terapia, escuela de padres y sesión psicológica.

CASOS COMPLEJOS

Maldonado hizo mención que los casos más complejos son cuando la propia familia está involucrada en propiciar esa violencia sexual, y que según la cantidad de menores que ellos reciben, corresponden al 90% en donde se implica a un familiar directo o a un integrante de la familia cercana a la víctima.

Añadió que en ese tipo de casos puede ser el progenitor o el conviviente de la madre de la víctima, que es lo más común, además de hermanos y tíos.

En la comunicación también es necesario escuchar a los menores de edad, que pueden ser víctimas de alguna vulneración a sus derechos humanos. Foto La Hora.

Mientras que en el otro 10%, el abusador puede ser el maestro, líder religioso o personas ajenas a la familia que no guarda una relación directa, pero igual incurre en el abuso.

CORTAR EL PATRÓN DE ABUSO SEXUAL

Ante el contexto de hablar a los padres para hacerles conciencia, Maldonado hizo un llamado a rechazar cualquier forma de violencia contra la niñez y adolescencia, tomando conciencia que muchos de los agresores también fueron agredidos, por lo que es necesario cortar el círculo vicioso, paradigmas o patrones.

Explicó que esto se debe realizar a través de una denuncia, “sea quien sea el agresor” ya que muchas veces por dependencia económica, emocional, afectiva no se acude, además de que es necesario creerle a la víctima.

En total 375 niños, niñas y adolescentes están sin localizar durante lo que va del 2022, de los cuales 244 son niñas y 131 niños. Foto La Hora.

Puntualizó que lo peor para una víctima es que el sistema de justicia, la familia y las comunidades no crean su historia o en sus declaraciones y además, se les criminaliza, haciéndolas caer en mala fama, tanto a ellas, como al familiar que presenta la denuncia.

Aunque también reconoce que el país sigue rigiéndose por una normativa en materia de niñez y adolescencia que hace mucho tiempo ha dejado de responder a la realidad social; sin embargo, hay que realizar la reclamación de los derechos.

OTRAS RAZONES POR LAS QUE UN NIÑO, NIÑA PUEDE TENER ACTIVA UNA ALERTA

Según Celia García, abogada de la Unidad Operativa del Sistema de Alerta Alba-Keneth, de la PGN, durante el año 2021 las causas más frecuentes de desaparición son:

Rebeldía
Conflictos familiares
Abandonos de residencias de protección
Alertas que se giran por orden judicial
Niñez migrante, acompañados y no acompañados
Trata de personas en sus distintas modalidades 

NIÑOS DE 0 A 4 AÑOS

Dado que durante el año pasado en los niños de 0 a 4 años predominó en cantidad de desapariciones, García explicó que la mayoría de estos casos son por conflictos familiares, por lo que llama al uso adecuado del sistema, ya que han detectado que muchas veces los papás al estar en conflicto, uno de ellos se lleva a los niños y el otro activa la alerta.

SOBRE LAS DENUNCIAS

Explicó que la PGN establece en las denuncias los factores personales y los externos, que es el contexto en el cual ocurrió la desaparición, lo que ayuda a establecer las estrategias de búsqueda con las instituciones de la coordinadora.

RED GLOBAL DE NIÑOS DESAPARECIDOS

También puntualizó que desde el 2017, ellos son parte de la Red Global de Niños Desaparecidos que tiene su sede en Washington.

COMUNICACIÓN COMO PREVENCIÓN

La abogada también recomendó tomar acciones que eviten desapariciones, como la comunicación asertiva con los adolescentes “porque se dan situaciones en donde se activa la alerta y papá y mamá no saben el contexto de sus hijos”, amistades, videojuegos, juegos en línea y sus redes sociales.

En la comunicación también es necesario escuchar a los menores de edad, que pueden ser víctimas de alguna vulneración a sus derechos humanos, ya sea física, emocional o de cualquier otra índole.

BOLETÍN DE DESAPARECIDOS

Mencionó que ante la desaparición, muchos padres generan boletines con número de teléfono, personal y que esta acción pone en situación de riesgo la vida del niño o niña desaparecidos, tergiversa el curso de la investigación que se pueda estar llevando a cabo, así como que puedan ser víctimas de extorsión.

También consideró necesario establecer plan de apoyo a nivel de comunidades, con lo cual al ver un carro o persona sospechosa, se pueda alertar a las autoridades.