La Fundación Contra el Terrorismo (FCT), dirigida por Ricardo Méndez-Ruiz, busca que la jueza Marjorie Azpurú no conozca la audiencia de primera declaración del fiscal Stuardo Campo y otros trabajadores del Ministerio Público (MP) que fueron capturados de manera reciente. Por medio de un recurso legal se dejó en suspenso la diligencia.
Se informó que la referida organización, la cual denunció al fiscal, duda de la imparcialidad de la juzgadora, debido a que fue esposa de Juan Francisco Solórzano Foppa, quien es amigo de los sospechosos.
El caso se encuentra bajo reserva judicial, por lo cual se desconocen los detalles de la investigación que llevó a la detención de Campo y otros trabajadores de la Fiscalía.
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El fiscal es jefe de la Fiscalía contra el Tráfico Ilícito de Migrantes y antes fue titular de la Fiscalía contra la Corrupción.
Los otros señalados son Brayan Palencia, auxiliar fiscal, detenido el pasado viernes 26 de mayo, así como Gonzalo Rafael Chilel y Carlos Faustino Pérez, quienes se presentaron de manera voluntaria al Juzgado Noveno Penal el pasado lunes 29.
PRESENTAN DENUNCIA
La FCT presentó una denuncia en contra de Campo en la cual constan hechos de tres investigaciones que desarrolló:
Caso Alfa Siete.
El proceso contra familia Bitkov, originaria de Rusia.
Caso Tamaulipas.
RECHAZA SEÑALAMIENTOS
El pasado viernes, cuando Campo ingresó junto a agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) a la Torre de Tribunales, dijo: “Es una denuncia espuria presentada por la FCT. Ya sabemos que sistemáticamente se han encargado de la persecución de operadores de justicia. No me sorprende, ya lo sabía”, dijo.
Además, consideró que el caso en su contra se deriva de su trabajo al frente de la Fiscalía Contra la Corrupción, en la cual investigó a funcionarios de altos cargos, incluyendo al expresidente Jimmy Morales, e inició una investigación relacionada al presidente Alejandro Giammattei.
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