La jueza de Mayor Riesgo A, Claudette Domínguez, revocó la prisión preventiva que guardaban Álvaro Omar Franco Chacón, exjefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Giovanni Marroquín Navas e Ingmar Walterio Iten Rodríguez, todos procesados en el caso Traficantes de Influencias.
De esa cuenta, los tres podrán volver a sus respectivas viviendas para las fiestas de fin de año, en donde tendrán que permanecer en arresto domiciliario.
Domínguez consideró que no existe obstaculización al desarrollo del caso, puesto que el Ministerio Público (MP) ya concluyó con la investigación. Además, indicó que anteriormente se había establecido la inexistencia del peligro de fuga de los procesados.
Por lo tanto, la juzgadora estimó modificar la medida de coerción que Franco, Marroquín Navas e Iten Rodríguez mantenían.
“En el ejercicio de las facultades que la ley me dice, revoco los autos de prisión preventiva, otorgo medida sustitutiva y ordeno la libertad de los procesados”, dijo la jueza.
Claudette Dominguez, Jueza de Mayor Riesgo A, otorga medida sustitutiva y libertad para Omar Franco Chacón y Giovanni Marroquin Navas, acusados en el caso Tráficantes de Influencias.
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LOS ACUSADOS
Álvaro Omar Franco Chacón: fue titular de la SAT. Recientemente fue absuelto en el caso La Línea. Sumó 7 años de prisión preventiva por este caso y hace 6 años con 9 meses se le decretó la misma medida en el proceso Traficantes de Influencias.
Giovanni Marroquín Navas: extécnico de la SAT entre 1998 y 2004. Es señalado por el MP de presuntamente ser el enlace entre funcionarios de la SAT y empresas que buscaban beneficios fiscales. Sumó la misma cantidad de años que Franco Chacón en la cárcel y también fue absuelto en el caso La Línea.
Ambos saldrán oficialmente de prisión. Para ellos queda pendiente el juicio del caso Traficantes de Influencias.
Ingmar Walterio Iten Rodríguez: se le acusa de haber defraudado al Estado por apropiarse de una millonaria devolución de crédito fiscal mediante el pago de un soborno. Permaneció 4 años y 10 meses en prisión.
EL CASO
El caso Traficantes de Influencias se deriva del denominado proceso La Línea, centrado en el cobro de comisiones ilícitas a empresarios para la tramitación rápida de expedientes de crédito fiscal. Funcionarios de la SAT y personas particulares están vinculadas a los hechos.
La investigación develó cómo operó una red de corrupción en la SAT en 2013 y 2014, la cual supuestamente se benefició con el cobro de comisiones ilícitas sumando Q19 millones para agilizar a empresas la tramitación de expedientes de devolución de crédito fiscal.
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En dicha estructura participaron varios exjefes de esa institución en complicidad con funcionarios de menor rango y particulares.
La investigación estableció que Marroquín Navas, en complicidad con los funcionarios de la SAT como Franco, supuestamente ofrecía servicios de agilización de expedientes para la devolución del crédito fiscal, por lo cual cobraban comisiones de hasta el 11.5 por ciento del monto que esperaban recibir las empresas.
